BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

97
BATALLAS DE LA HISTORIA KAISERSCHIACHT1918 LA OFENSIVA FINAL ALEMANA RANDAL GRAY ' OSPREY MILITARY HISTORY QUIZ BOOK A

Transcript of BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Page 1: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

BATALLAS DE LA HISTORIA

KAISERSCHIACHT1918LA OFENSIVA FINAL

ALEMANARANDAL GRAY

™' OSPREY MILITARY H ISTO R Y

QUIZ BOOKA

Page 2: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

EIÉRCITOS Y BATALLAS 53

LA OFENSIVA FINAL ALEMANA

BATALLAS DE LA HISTORIA OSPREYMILITARY

Page 3: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

INDICE

Los orígenes de la batalla 02Los jefes enfrentados 06Los jefes alemanes 06Los jefes aliados 08Los jefes aliados: El Ejército francés 10Los ejércitos enfrentados 13Fuerzas alemanas 13La fuerza aérea alemana 20La fuerza expedicionaria británica 25El ejército francés 31Los planes enfrentados 34Planes alemanes 34Tácticas alemanas 37Planes aliados 37Kaiserschlacht 1918: la batalla 40El bombardeo alemán 4021 de marzo: asalto de la infantería 4022 de marzo: Gough se retira, Byng resiste 5523 de marzo: Ludendorff amplía sus objetivos 5924 de marzo: de vuelta al antiguo campo 65de batalla del Somme

25 de marzo: el tercer ejército retrocede vacilante

67

26 de marzo: Foch se convierte en «generalísimo» aliado 7127 de marzo: los franceses pierden Montdidier 7828 de marzo: el punto de inflexión «Mars» 8329 de marzo: la batalla del Avre 8730 de marzo: el Avre y el bosque de Moreuil 8831 de marzo: equilibrio 911-3 de abril: una calma relativa 923 de abril: la conferencia de Beauvais 954 de abril: el Avre y Villers-Bretonneux 955 de abril: el empuje final 100Resultados y consecuencias 102Bajas aliadas 102Pérdidas alemanas 104Después de Kaiserschlacht 104El campo de batalla, hoy en día 105Cronología 106

Page 4: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

LOS ORIGENES DE LA BATALLA

La ofensiva alemana de la primavera de 1918, so­bre todo la ofensiva de Ludendorff, ostenta muchos nombres, pero ninguno de ellos ha sido más apro­piado que el de Kaiserschlacht («batalla de em pera­dores»), el nombre que le confirió el General der Infanterie Erich Ludendorff en honor a su sobera­no y supremo señor de la guerra el kaiser Guiller­mo II. Contempla la cruel y titánica grandeza de ese acontecimiento, nada menos que el mayor ata­que aislado de la Primera Guerra Mundial (a no ser que se considere el avance alemán hacia el oeste de 1914 como una batalla aislada). Al igual que el ori­ginal plan Schlieffen, la Kaiserschlacht fue una apuesta por una victoria rápida, antes de que pudieran entrar en juego los superiores recursos aliados.

Algunas fuentes también la llaman la Friedensturm («ofensiva de la paz») como un cínico intento por parte de Ludendorff de motivar el esfuerzo de sus soldados. Este término sólo puede aplicarse apro­piadamente como palabra en clave del quinto y úl­timo ataque de Ludendorff en 1918, su ofensiva de Marne-Reims de julio (segunda batalla del Marne), cuando el último y agotador esfuerzo del Ejército alemán necesitaba de toda la inspiración posible para vencer.

Para los británicos, la batalla nunca ha recibido realmente un nombre satisfactorio. En su denomi­nación oficial, «primeras batallas del Somme de 1918» lleva a confusión, estando las batallas de 1916 grabadas para siempre en la conciencia nacional. La secuencia del comité de denominaciones de batallas sigue así: batalla de San Quintín; primera batalla de Bapaume; acciones del cruce del Somme; batalla de Rosiéres; primera batalla de Arras de 1918; batalla británica del Avre; y batalla del Ancre de 1918. Se trata de subdivisiones perfectamente racionales, aunque se ignora Amiens, pero casi no hacen justi­cia a la que fue la mayor y más intensa batalla jamás librada por el Ejército británico. La(s) segunda(s) batalla(s) del Somme es una descripción mucho más clara y memorable, si bien geográficamente los combates se extendieron al norte de Arras (Artois). En su lugar, quizás se recuerden mejor estos suce­

sos, con ese amor típicamente perverso de los bri­tánicos por las derrotas, como la «gran retirada de marzo».

Para los franceses, la batalla quedó como la se­gunda batalla de Picardía con las batallas sucesivas de «Noyon» y «el Avre» (con fecha distinta a la bri­tánica). Para los alemanes fue sencillamente la «Grosse Schlacht in Frankreich», la gran batalla en Francia.

Llamemos como llamemos a la Kaiserschlacht, ciertamente representa la prueba militar no nuclear (aunque química) más odiosa emprendida por sol­dados del siglo XX, con la posible excepción de al­gunas batallas del frente oriental entre 1941 y 1945 y la Guerra Irán-Iraq.

Alemania se había salvado de la pesadilla de dos frentes del Graf von Schlieffen, cortesía de las dos revoluciones rusas de 1917. En 1915 había elimina­do a Serbia de la alineación aliada; en 1916 a Ru­mania; y en septiembre de 1917 Rusia era mili­tarmente impotente con la caída de Riga y bajo un gobierno provisional amenazado por los bolchevi­ques. En octubre, siete divisiones de choque alema­nas, encuadradas en el XIV Ejército austro-alemán del General der Infanterie Otto von Below, habían roto el prolongado estancamiento del frente italia­no mediante tácticas de infiltración por montaña, haciendo retroceder al Ejército italiano 70 millas hacia el Piave, con la pérdida de 325.000 prisione­ros en la ruta conocida como Caporetto (desde el punto en que rompió Below).

En el verano de 1917/18, el frente occidental se­guía siendo un punto muerto atrincherado de 468 millas compartido por cuatro ejércitos principales, que ahora se estaban convirtiendo en cinco. Lejos hacia el norte los belgas aún se aferraban a las 23 millas restantes de su patria en la costa del Canal. La Fuerza Expedicionaria Británica (BEF) ocupaba las 116 millas centrales del frente en Flandes y Pi­cardía. El Ejército francés, recuperándose de los motines de principios de 1917, bajo el juicioso lide­razgo del general de división (GD) Henri Pétain, ocupaba una línea del doble de longitud pero no con la misma intensidad. Y, a finales de 1917, el tan

Page 5: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

IVMPTE SEA

Christiania• Sl Petersburg

Stockholm

N O R T H

.¿Copcnhagcn 0 \

idon Amsterdam » The Hague# s

•V ie n n a

Bucharest— -wBelgrado

Rom o*

I T E R R A H e

Algiers

SICILV

Reykiavik

□ Potencias Neutrales

□ Potencias del Centro

□ Potencias Aliadas

B A R E N T S S E A

Berlín^ ̂

gnglish Channel ^

% i *C /j ? " r ■

6 ay o / Biscoy

* MadridLisbon • ^

A y S P A I NO <.

V ' <C-y i __ s; * ConstanlinopleDura«ow 1 1 j — C

* T e..

■ o * Ath0ns1 ^ . , . : . .. m ••• h

Nicosa «

EUROPA1918

5CAU C« KlQMtTUfi0 W >» JW O) 51©

Alianzas militares al fin a l de la Primera Guerra Mundial 1918

Page 6: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

preconizado Ejército de los EE.UU. poseía casi184.000 soldados en Francia, pero el 31 de enero de 1918 ocupaba exactamente seis millas del frente con una división de combate encuadrada. Depen­diendo del transporte británico y del equipo pesa­do de fabricación francesa, el jefe norteamericano, el general (Gral.) John J. Pershing, tenía la orden de combatir como un ejército independiente, exac­tamente igual que la BEF original en 1914; el resto de sus tropas se estaba instruyendo. Al comenzar la revolución rusa, tanto los aliados como las poten­cias centrales veían a los norteamericanos como un

▼ Columnas de inf. reforzaron el frentealemana avanzando hacia occidental.el frente en Picardía. Eltransporte a caballo puedeverse entre la 1.a Cía. y la2°. En menos de cuatromeses (desde el 30 denoviembre de 1917) 42Divs. (34 del frenteoriental y Rumania), másde 500.000 hombres,

añadido fresco al punto muerto europeo. Para el año siguiente se esperaban al menos medio millón más de hombres.

Fue en esta coyuntura cuando los planes del Ge­neral der Infanterie Erich Ludendorff se convirtie­ron en una ofensiva en el oeste. Sabía que ni el Ejér­cito alemán, por muy impresionantes que hubiesen sido sus éxitos defensivos, ni los aliados de la po­tencias centrales podían resistir otro doloroso año a la defensiva como el de 1917. Políticamente, Fran­cia estaba recuperando fuerzas bajo su nuevo pri­mer ministro de 76 años de edad, el notorio Geor- ges Clemenceau, cuya retórica y regreso al puesto pareció totalmente anticiparse a las de Churchill en 1940. Para Ludendorff era impensable que Alema­nia, habiendo derrotado a todas las potencias orien­tales y sureñas de la Entente, debiera tratar con los aliados occidentales, justo en el momento en que las conversaciones de paz de Brest Eitovsk estaban dando fin a cualquier amenaza desde Rusia. Apar­te de esto, tras tres años y medio de sacrificios, los aliados no estaban ofreciendo términos aceptables para .Alemania.

Page 7: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

LOS JEFES ENFRENTADOS

Los jefes alemanes

En el momento en que Ludendorff desencadenó la Kaiserschlacht sobre la BEF, su famoso mando compartido con el mariscal de campo (MC) Paul von Hindenburg duraba tres años y medio. Su rela­ción era tan estrecha que el propio káiser se refería a los «gemelos siameses» cuando esta combinación finalmente desembocó en una derrota al otoño si­guiente. Este emparejamiento era mucho más que el militar surgido originalmente en Tannenberg. Desde julio de 1917 la «dictadura silenciosa» de Hindenburg y Ludendorff, no sólo reinaba sobre la Alemania imperial sino también de forma eficaz so­bre las potencias centrales en su conjunto. Es de­masiado sencillo ver a Ludendorff como el cerebro director de las decisiones y actuaciones, en nombre del mariscal de campo de 70 años de edad, que era poco más que una figura decorativa, Hindenburg confirió a los fines y preparativos de la Kaisersch­lacht su inmensa autoridad moral, tanto en su pa­tria como en el frente. Fue principalmente por él, más que por Ludendorff o el káiser, que el Ejército y el pueblo alemán harían una apuesta final por la victoria en el oeste.

Dos de los jefes de ejército elegidos por Luden­dorff para ser sus ejecutantes eran probablemente los mejores disponibles en la Alemania imperial. Es significativo que los tres hubieran servido en el frente oriental, en exitosas operaciones ofensivas a gran escala dirigidas por Hindenburg y él mismo. Además de esto, todos ellos tenían experiencia en

► Erich Ludendorff (1865-1937), que nunca recibió el ennoblecedor «Von», estaba convencido de que sólo su plan de la Kaiserschlacht daría la victoria a Alemania; la alternativa, como le dijo al príncipe Max de Badén en febrero de 1918, era la aniquilación. Pensaba que

el Ejército estaba «deseando el ataque» y que una sucesión de ataques desbloquearía el frente occidental. ►Inferior: Paul von Hindenburg (1849-1934), no menos convencido de que una ofensiva de primavera era la única opción.

Page 8: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► El jefe y el EM del 18 Ejército alemán, de buen humor en su CG en abril de 1918. El General der Infanterie Oskar von Hutier (1857-1933) es el segundo por la izquierda junto a su JEM, el GD Von Sauberzweig. Ambos Grals. llevan la «Pour le Mérite» y la «Cruz de Hierro». Sauberzweig predijo perspicazmente en una apreciación del 16 de enero que los franceses no correrían en ayuda de la BEF. Tras la Kaiserschlacht, los franceses alabaron erróneamente a Hutier, llamando a los nuevos métodos ofensivos alemanes la «táctica de Hutier». En realidad, éstos eran el trabajo de muchos oficiales alemanes.

el frente occidental: El General der Kavallerie Georg von der Marwitz y el General der Infanterie Oskar von Hutier como jefes de unidad en los pri­meros rápidos avances de 1914; Below como jefe del 6." Ejército durante la batalla defensiva de Arras en 1917 (en el mismo sector en el que ahora estaba a punto de atacar). Marwitz había defendido dos ve­ces su sector de Cambrai desde diciembre de 1916 y dirigido el exitoso contraataque frente al asalto blindado inglés por sorpresa en noviembre de1917.

No menos importante en el sistema de mando alemán eran los jefes de estado mayor (EM). Estos manejaban los detalles administrativos y tácticos, pero también tomaban decisiones de mando en au­sencia de sus jefes. La reputación de Hutier como vencedor de Riga se debía en gran parte a su jefe de EM (JEM), el Generalmajor von Sauberzweig, como lo hacía Below en Italia con el capaz y hábil bávaro Krafft von Dellmensingen. Marwitz, por el contrario, recibió un nuevo JEM tan sólo un mes antes de lanzarse la ofensiva. A nivel grupo de ejér­citos (GE), el Generalleutnant Hermann von Kühl y el Oberst Graf von der Schulenberg eran los ver­daderos intermediarios entre los ejércitos y Luden­dorff, en lugar de sus exaltados superiores herede­ros a la corona.

Los catorce jefes de cuerpo de ejército (CE) des­tacaban de la habitual mediocridad existente a ese nivel en el Ejército alemán. Al menos tres de estos

A El General der Kavallerie Georg von der Marwitz (1856-1929), jefe del 2." Ejército alemán, sentado con su JEM de pie. Este último es

probablemente el Oberstleutnant Stapff, que fue sustituido menos de un mes antes de la Kaiserschlacht.

Page 9: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

A El General der Infanterie Otto von Below (1857-1944) mandaba el 17 Ejército desde el 1 de febrero de 1918, tras el servicio más variado y exitoso de ningún jefe alemán de ejército, comenzando por el mando del I CE de Reserva en Gumbinnen y Tannenberg en agosto de 1914. Su

hermano mayor, Fritz, también fue jefe de un ejército en el frente occidental (desde abril de 1915); otro, Eduardo, mandó el VIII CE en Alsacia, mientras que otro más joven, Hans, mandaba la 238 Div., que realizó el avance récord del 21 de

A El mariscal de campo sir Douglas Haig (1861-1928) tardó 48 horas en apreciar la escala y el éxito de la Kaiserschlacht, pero su apoyo a Foch como «generalísimo>• fue un plinto de inflexión para la causa aliada. Ofreció su renuncia el 6 de abril de 1918, pero el secretario de

Estado para la Guerra lord Derby rechazó aceptarlo. No había ningún candidato alternativo claro.

jefes habían mandado grandes grupos indepen­dientes de ataque en las campañas de las montañas de los Cárpatos en 1916 contra Rusia y Rumania. Otro, el General der Infanterie H. von Kathen, ha­bía dirigido realmente la conquista anfibia de octu­bre de 1917 en el Báltico, de las islas del golfo de Riga, siendo apodado mordazmente «Albión». Para la Kaiserschlacht, al igual que en Cambrai, cada jefe de CE tenía que controlar entre tres y siete divisio­nes, en lugar de las dos o tres habituales.

Los jefes aliados: la BEF

A comienzos de 1918, la reputación del MC Sir Douglas Haig se encontraba en su punto más bajo. La prolongada carnicería de la tercera batalla de Ypres estaba repercutiendo en la patria, hasta el punto que su ejército, con cinco buenas divisiones

menos en apoyo de Italia, no estaba recibiendo los reemplazos apropiados por parte de Lloyd George. La esperanzadora promesa del golpe blindado en Cambrai se disolvió en recriminaciones sobre una semiderrota y una agria serie de acusaciones que apuntaban a las tropas. En enero, los emisarios de Lloyd George cruzaron el Canal para buscar en vano el sucesor de Haig. El jefe del EM imperial, el Gral. sir Guillermo Robertson, el baluarte de Haig en la patria, había sido destituido (en febre­ro), tras oponerse a una compleja intriga por el con­trol de las reservas aliadas, para ser sustituido por el intrigante archi-político y francófono, el Gral. sir Henry Wilson.

La presión producida dentro de la jerarquía del Ejército forzó a Haig a cambiar a su JEM y a sus se­gundos JEM con una amplia hoja de servicios, a su excesivamente optimista jefe de inteligencia y al de-

Page 10: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

masiado viejo intendente general a finales y princi­pios de año. A largo plazo, estos cambios serían be­neficiosos, pero en las escasas semanas que queda­ban para preparar la defensiva para oponerse a la Kaiserschlacht, estos cambios en el cuartel general (CG) hacían poco por fortalecer su autoridad ya deslucida.

Sin embargo, las apariencias a veces engañan. La tan ridiculizada falta de imaginación de Haig pue­de incluso haber ayudado en este período. Su mo­ral personal no se vio afectada a lo más mínimo, in­cluso se reforzó positivamente. El 2 de enero, un año después de su ascenso, recibió del rey su bas­tón de mariscal de campo en el palacio de Bucking- ham. El 15 de marzo, seis días antes del bombardeo de Ludendorff, lady Haig dio a luz a su primer hijo, un niño (el actual conde Haig). Este asunto aparen­temente privado tiene una importancia adicional si se tiene en cuenta que su adversario iba a perder un segundo hijo adoptivo durante las operaciones británicas en los primeros días de su ofensiva y tuvo que ausentarse para visitar su tumba.

La confianza de Haig tuvo su mejor expresión con su esposa el 28 de febrero: «en palabras de las segundas crónicas capít. XX, que es la “batalla de Dios” y no le tengo miedo al número de enemigos». Tres días más tarde su único temor era que las de­fensas de la BEF hicieran desistir en su empeño a Ludendorff.

Los jefes de ejército encargados de repeler el ata­que carecían de esta elevada certeza. El Gral. sir Ju ­lián Byng del 3.er Ejército había planeado el asalto blindado de Cambrai, sólo para verse sorprendido por la respuesta alemana. Ahora se oponía tenaz­mente a acortar su frente entregando lo que que­daba de las conquistas de los «Byng boys», el peli­groso saliente de Flesquiéres. EÍ Gral. sir Hubert Gough, de entre todos los «barones», como se les llamaba a los jefes de ejército de la BEF, tenía la mi­sión más desagradecida en el frente más largo y no­vedoso, con un 5." Ejército que no se había reuni­do hasta recientemente. Además de ello, por la insistencia de Haig, su amigo personal y duradero pero muy criticado JEM, el GD Neil Malcolm, fue

▲ El Gral. sir Julián Byng (1862-1935), jefe del 3." Ejército desde junio de 1917, no brilló contra la Kaiserschlacht, pero informó con precisión del agotamiento mutuo de

ambas partes en la mañana del 26 de marzo. Después de este día, los Anzac y otras reservas reforzaron su línea.

▲ El Gral. sir Hubert Gough (1870-1963) del 5.° Ejército, el más joven y más desgraciado jefe de ejército de ambos bandos. Lloyd George estaba determinado a volver a

llamarle, y una investigación propuesta sobre el destino de su ejército nunca se llevó a cabo. Gough publicó su propio relato, «El 5° Ejército», en 1931.

Page 11: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

destinado al mando de la 66 Div. (División), la úl­tima en llegar a Francia. El sustituto elegido por Gough fue rechazado y su 2." intendente Gral. fue reemplazado de la misma forma. Estos destinos re­flejaban el delicado status que poseía el propio Gough a causa de la desfavorable opinión de su actuación en Ypres. A principios de marzo, el mi­nistro de la Guerra comunicaba a Haig que el Go­bierno y precisamente el 5.“ Ejército no tenían con­fianza en Gough y su EM. Sin embargo conservó el puesto, conociendo Haig y muchos de los soldados a su mando sus cualidades de luchador perro de presa.

Ocho jefes de CE combatirían en la batalla defen­siva en primera línea, en un puesto táctico crucial. ¿Estaban cualificados para ello? No menos de seis de ellos habían mandado brigadas o unidades ma­

yores en la BEF original durante la desesperada ba­talla defensiva en 1914. Cinco habían mandado di­visiones o CE en las batallas del Somme en 1916. Sólo dos podía decirse que carecían de experiencia a nivel CE, el teniente general (TG) sir Richard But- ler, que había estado en el CG entre 1915 y 1918, y el TG sir George Harper, ascendido sólo diez días antes desde su querida 51 Div. Highland. Otro asunto eran los esfuerzos de una batalla móvil tras años de operaciones estáticas con una prolongada preparación.

Los jefes aliados: el Ejército francés

El alto mando francés giraba en torno a tres gran­des figuras opuestas: Pétain, el comandante en jefe

A El Ce] del Ejército francés desde mayo, Henri Pétain (1856-1951), estaba determinado sobre todo a preservar los hombres de Francia de más pérdidas. En línea con su lema de antes de la guerra «La potencia de fuego mata», trató de hacerlo confiando

más en las máquinas y en la defensiva en profundidad.

A Fernando Foch (1851-1929) fue el nuevo jefe supremo aliado (26 de marzo de 1918), que ganaría un prolongado y estratégico duelo en 1918 con Ludendorff. Su contribución directa a la detención de la Kaiserschlacht fue urgir

las reservas francesas y haciendo de la retención de Amiens un reducto esencial como punto central de los ejércitos británico y francés. Con 66 años de edad en el año de su destino, demostró ser más duro y enérgico que muchos jefes más jóvenes.

Page 12: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

(CeJ); el GD Ferdinand Foch, el JEM; y el GD Ma- rie Fayolle, el jefe del GE de reserva. Todos ellos serían ascendidos pronto a mariscales de Francia por vitales aunque diferentes contribuciones a la victoria aliada. Pétain había saneado un Ejército francés medio contaminado por motines en el oto­ño de 1917, lanzando unas eficaces aunque limita­das ofensivas locales sobre Verdún y Malmaison (Aisne). Para 1918, su estrategia de «victoria al me­nor coste» descansaba en los dos pilares de una ma­yor mecanización (carros de combate, cañones pe­sados motorizados, aviones, más armas automáticas de infantería (Inf.)) y de esperar a que las Div. nor­teamericanas sustituyeran al personal francés, exce­sivamente extendido y utilizado.

Foch, como JEM en París, tenía una visión más amplia reforzada por una prolongada visita al fren­te italiano. Seguía convencido de que sólo una ac­ción ofensiva podría ganar la guerra, y para ello ne­cesitaba una reserva general aliada de entre 20 y 30 Div., tropas que Haig y Pétain no estaban dispues­tos a darle.

Fayolle, un general artillero de pelo blanco y apa­riencia profesional sacado del retiro en 1914, es quizá el personaje menos conocido para los lecto­res no franceses. Aunque ya era el jefe de campaña más fiable de Francia, surgía ahora a la sombra de Pétain como el sustituto del «Salvador de Verdún» en mandos de CE y GE. Había combatido junto a los británicos en el Somme como jefe del 6.° Ejér­cito, y había ofrecido su renuncia por descontento tras obtener una serie de victorias que superaban las de Haig. Tanto su envío a Italia como su vuelta a mediados de febrero le señalaron como el gene­ral de «brigada de fuegos» más antiguo del Ejército francés. Pétain le escogió para un revivido mando del GE de reserva, aún sabiendo que Foch y los cír­culos políticos le consideraban su sustituto.

Se nombraron dos jefes de ejército para dirigir las divisiones de Fayolle enviadas en ayuda de Haig si Ludendorff atacaba el sector británico. El GD Georges Humbert era el jefe más antiguo del Ejér­cito francés, estando familiarizado con el sector del que el 5." Ejército británico le había relevado re­cientemente, y antes de ese 1914 jefe de la División Marroquí de élite. Más hacia el este, el GD Marie Debeney, el antiguo JEM de Pétain en 1917, man­daba el l.cr Ejército al este de Toul, destinado a transferir seis divisiones al Somme. No había servi­do todavía junto a los británicos, pero el actual JEM de Pétain, el GD Fran^ois Anthoine, lo había hecho con éxito junto a Gough, en la tercera batalla de Ypres.

El El Gral. Marie Fayolle (1852-1928), jefe del GE de reserva francés, era un cortés líder que se ganó el afecto de sus subordinados y aliados. Había sido compañero de clase de Foch en el mismo colegio de jesuítas y, más firme que Pétain, quería mantener al Ejército francés ligado al británico.

0 El Gral. Georges Humbert (1862-1921), jefe del 3." Ejército francés de la reserva, era un veterano de las campañas coloniales francesas de antes de la guerra, sobre todo en Marruecos de 1913 a 1914. Desde el mando de la estupenda Div. marroquí en el Mame, ascendió enseguida a jefe

de ejército (julio de 1915). Al igual que otros Grals. franceses en marzo de 1918, necesitó varias días para ponerse al día.

9 El 2° jefe de ejército francés en ser llamado fue el Gral. Marie Debeney (1864-1937), del 1." Ejército. Había mandado la 25 Div. en Verdún y el XXXII CE en la campaña del Somme del verano de1916. Antes de la batalla había urgido a Clemenceau la creación de un único mando aliado. Debeney reconoció su sector el 25 de marzo, y a la tarde siguiente Foch visitó su CG para reforzar la orden ya comunicada por teléfono de relevar al XVIII CE.

Page 13: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf
Page 14: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

LOS EJERCITOS ENFRENTADOS

Los ejércitos del frente occidental de 1918 estaban más cerca de la época de la Blitzkrieg de 1939-42 que de sus inmediatos antecesores en 1914. Muchos factores reflejaban esto. Los soldados eran predo­minantemente reclutas recientes y no soldados re­gulares veteranos. Los oficiales eran en su mayoría jóvenes, destinados en tiempo de guerra y estaban técnicamente cualificados, así como endurecidos en las trincheras en lugar de ser vástagos de familias militares hereditarias.

Organizativamente predominaba el esquema fa­miliar de GE hasta Div. «triangulares» de nueve ba­tallones (Bón.), un proceso que había comenzado en 1915. El nivel inferior de unidad tipo escua­dra/pelotón se componía de un fusilero escoltando a un equipo de ametralladora ligera (AML). La potencia de fuego se estaba aproximando a la de principios de la Segunda Guerra Mundial. Las di­visiones francesas y alemanas poseían un grupo or­gánico de cañones pesados (calibre 155/150 mm), y una Div. alemana tenía casi tantos morteros como sus sucesoras en 1939 (que realmente tenía más ca­ballos que sus más débiles antecesoras de 1918). Las granadas de fusil, los morteros y los lanzallamas ha­bían sido armas de infantería desde 1915.

Ambos bandos confiaban considerablemente en el transporte motorizado, en especial para ambu-

M Una lámina a color que indica parte de la ferocidad de una batalla de trincheras cuerpo a cuerpo, al estilo de 1918. Las figuras 1 y 2 son Subs. de Bóns. de Stosstruppen (5.° del Rohr, la U. original de asalto, y el 6° de Baviera) en casaca de 1915 con galoncillo de cuello de Sub. Las figuras3 y 4 son granaderos de las Stosstruppen (cabos), uno con una herramienta afilada de trincheras, el otro con la ubicua granada de palo

«destroza-patatas», con la túnica modificada de 1910. El granadero de la izquierda lleva el brazalete verde con la «S» de Sajonia de la Cía. de Stosstruppe de la 23 Div. (sajona) de Reserva (del frente oriental, marzo de 1918). Esta última U. estaría en vanguardia en el ataque «Mars Nord» del 28 de marzo dentro del sector del I CE de Reserva bávaro, 17 Ejército, contra la 56 Div. británica (1.a de Londres).

lancias y remolques de cañones pesados y existían muchas motocicletas, aunque éstas no suplantaban la importancia de los vehículos tirados por caballos y el ferrocarril. Por primera vez ambos bandos te­nían unas modestas fuerzas de carros, y los carros acorazados franceses, en especial, iban a prosperar dentro del nuevo y más móvil combate. En la ter­cera dimensión, el apoyo de fuegos próximo, ya un factor en los combates locales de 1916-17, iba a con­vertirse en la norma a una escala mucho más ma­siva y prolongada, que anticipaba las fuerzas aéreas tácticas de 1939-45.

Las comunicaciones se basaban en grandes y pe­sadas radios (a nivel brigada y superior), teléfonos, bengalas, bombillas, cintas de señalización visual, mensajes lanzados desde aviones, mensajeros a pie, motorizados o montados. Ningún método podía garantizar que se recibieran los informes con rapi­dez en una acción fluida, y esto tampoco fue posi­ble hasta que los aliados introdujeron el «walkie tal- kie» en 1943.

Fuerzas alemanas

Los cambios más notables del Ejército alemán en oc­cidente durante el invierno de 1917/18 fueron los del tamaño y la instrucción. De ser una organiza­ción con excesivo personal, defensiva, asentada en trincheras, se convirtió en un ejército superior re­forzado por 42 victoriosas divisiones recogidas de los frentes oriental e italiano (4 Div.). Ludendorff concentró 74 divisiones para «Michael». No menos de siete eran unidades de la Guardia (dos reciente­mente formadas en enero), tres eran divisiones re­gulares bávaras y una división de Inf. de Marina de Flandes. Sólo trece Div. eran de reserva o de tipo Landwehr, mientras que 20 eran unidades regula­res de línea de origen anterior a 1914, nueve de las cuales poseían uno o más regimientos (Rg.) de éli­te de granaderos. No menos de 18 Div. de las reu­nidas para la Kaiserschlacht habían combatido en las recientes operaciones de Riga, Caporetto y Cam­brai.

Debido al amplio trasiego de soldados de más de

Page 15: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

ORDEN DE BATALLA EJÉRCITO ALEMÁN EN EL FRENTE OCCIDENTAL,

21 DE MARZO DE 1918192 Div., 110 en línea, 82 en reserva, 136.618 Ofs., 3.438.288 hombres (1.232.000 fusileros y 24.000 sables),

764.563 caballos, 13.832 cañones, 8.845 morteros, 59.361 AM y 3.668 aviones de 1 * línea

Jefe Supremo: Káiser Guillermo II de Alemania Jefe del EM: General mariscal de campo Hindenburg

Primer intendente general: Gral. LudendorffI

468 millas de frente - Jefe de operaciones Tcol. Wetzell (CG Avesnes)________ I______________________

KAISERSCHLACHT50 millas

74 Div., 6.608 cañones, 3.534 morteros

GE RUPPRECHT JEM Gral. Kühl

GE PRINCIPE HEREDERO JEM Oberst Schulenberg

GEGALLWITZ

GEALBRECHT

1 4.° Ejército 1 6.° Ejército I) 7.° Ejército 1 1." Ejército I 3."' Ejército I 5.° Ejército 1 Dest. C de Ej. 1

Arnim Quast Boehn F Below Einem Gallwitz Fuchs

KAISERSCHLACHT

17 Ejército 2.° Ejército 18 Ejército

Below Marwitz Hutier(CG St. Armand) 18 Div.

(CG Le Cateau) 20 Div.

(CG Guise) 27 Div. 2.448 cañones,

2.236 cañones 1.789 cañones 9 carros

19 Ejército I Dest. A y B de Ej.

Bothmer Mudra y Gündell

Reservas de 9 a 11 Div. 730 aviones (82 SQN)

Nota: composición media de una Div. alemana en 1918: 12.300 hombres; 6-12 camiones; unos 3.000 caballos; 48 cañones de campaña y pesados; 120 morteros; 78 AM 08 y 144 AML Bergmann

ORDEN DE BATALLA 17 EJÉRCITO ALEMÁN

Gral. de Inf. Otto von Below2.234 cañones (824 pesados), 1.197 morteros, 241 aviones en servicio (380 en total)

JEM TG Krafft von Dellmensingen

Page 16: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

A Ejercicios de la Inf. alemana en febrero de 1918 para la reanudación de la guerra abierta. Están avanzando en filas de sección o pelotón. Delante en el centro se encuentra

un «gruppe» de AML con la ametralladora modelo 08/15 (introducida en diciembre de 1916). Cada Cía. tenía al menos cuatro de estas armas en enero de 1918. (IWM Q29948)

35 años y a la llamada de personal herido y de re­taguardia, las filas estaban llenas de hombres más jóvenes y experimentados, hasta el punto que me­dia sección de infantería podía contener hombres instruidos antes de la guerra. Por otro lado, las tro­pas incluían a los reclutas de 1919 e incluso a sol­dados de dieciséis años; los hombres más jóvenes y apropiados formaban las famosas «Stosstruppen», que se habían formado desde 1916. Se trataba de unidades especiales de hombres solteros menores de 25 años con raciones dobles, que se destinaban a asaltos a trincheras e incursiones, recibiendo la mayor parte de las Div. una compañía (Cia.) de asal­to de 120 hombres, dividida en secciones entre los tres regimientos de línea. En 1918, cada ejército del frente occidental tenía sobre el papel un «Sturmba- taillone» de instrucción con cuatro Cia., una Cia. de ametralladoras más destacamentos de lanzallamas, morteros y cañones de Inf. de 37 mm. El «Sturm- bataillone» del 7." Ejército de Below era el 8.", pero lo que se sabe que recibió Hutier fue tan solo una Cia., la 18. El 2.° Ejército de Marwitz tenía el 3.er Bón. Jáger de asalto, con veteranos de Caporetto y

Cambrai. Es imposible saber cuantas tropas de asal­to especializadas atacaron en realidad el 21 de mar­zo. Sumando la relación completa de unidades a ni­vel ejército conocida en el frente occidental de 1918 se obtiene sólo diez Bón. y cinco Cia., o unos 6.600 hombres. Dando a cada una de las 32 divisiones en ataque de primera línea una Cia. se obtiene el total combinado de aprox. 10.000.

Lo que está claro es que la mayor parte de las fuerzas de la Kaiserschlacht, 56 divisiones o unos800.000 hombres, emprendieron tres semanas de instrucción táctica de guerra de movimiento con sus días y noches completos, a menudo con instructo­res de tropas de asalto y munición real. La 11 Div., por ejemplo, ensayó dos veces su ruptura a escala natural en un sistema de trincheras señaladas. Al­gunas Div. se instruyeron en Rusia y Rumania, incluso antes de ser transferidas a occidente. La instrucción resaltó el liderazgo de los jefes de Cia/sección (Se.), una vuelta a la puntería con fusil, el perfeccionamiento con la AML Bergmann y el lanzamiento de granadas en trincheras. También incluyó largas marchas de aproximación, hasta de 45 km al día.

Tal era la confianza creada que los soldados ha­blaban de la «carrera sobre pista de Hindenburg»; siendo lo único importante soportar la barrera mó­vil artillera Feuerwalz (vals del fuego), con una ca­dencia de 300 metros cada cuatro minutos. Iróni­camente, la caballería aparecía en las maniobras con sus lanzas, un papel bastante más importante del

Page 17: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

▲ Sólo diez ejemplares del primer carro alemán, el A7V Sturmpanzerwagen, estuvieron listos para la Kaiserschlacht. Cuatro de un pelotón de cinco se emplearon en realidad el primer día, manejados y apoyados por 176 soldados de distinta graduación (81 conductores y 70 artilleros), en el primero de los 9 ataques alemanes

con carros de 1918. Dos Ofs. y 16 hombres manejaban la cámara de combate de 240 pies cuadrados del A7V, empezando por un cañón Sokol (ex ruso) de 57 mm a proa y seis ametralladoras tipo Maxim MG08 de 7,92 mm por los otros lados. Diseñado por Josef Vollmer, el A7V recibió su nombre del Comité

Ejecutivo del «Allgemeine- Kriegs-Department, 7 Ab- teilung Verkehrsuiesen» (Sec. de Tráfico). Dos mo­tores Daimler-Benz de 4 ci­lindros impulsaban su cor­pachón de 33 toneladas a 8 millas/hora sobre suspen­sión plana con tracción Holt, que sin embargo le hacía ir botando. Su carrocería, de 26,25 pies de longitud, 10 de anchura

y 11 de altura estaba recu­bierta de un blindaje de planchas sólidas de 15-30 mm, pero sólo podía va­dear un terreno de 1,5. Cuatro A7V apoyaron al XVII CE al sur de San Quintín, ayudando a la 36 Div. (Prusia occidental) a tomar el reducto de Le Pontchu en manos del 12 de Fusileros irlandeses.

que jugaría en el combate real. Significativamente, esa barrera sólo podía ser acelerada, no ralentizadao anulada, por las bengalas-cohete verdes de las tro­pas de asalto. La dedicación a los detalles incluía planos cosidos a sus manguitos y fotografías de las defensas de la BEF facilitadas a las Cia. Cada Cia. de Inf. también poseía un corneta capaz de tocar 24 llamadas diferentes y por ello capaz de actuar como medio alternativo de comunicaciones duran­te el avance, antes de que establecieran las líneas te­lefónicas.

El genio director de la «instrucción batiente» de la artillería (Art.) de Ludendorff era el Oberst Georg «Durchbruch» (ruptura) Bruchmüller, un oficial retirado antes de la guerra, que había per­

feccionado una exitosa técnica de breve bombardeo con tambores combinados de proyectiles de explo­sivo y gas en las condiciones menos exigentes del frente oriental, la última vez en Riga. Había estado en el frente occidental desde el contraataque de Cambrai. La técnica de Bruchmüller tenía tres fa­ses generales: primero, fuego por sorpresa, sin re­velar las baterías, hacia lo más profundo de las po­siciones enemigas, en segundo lugar, una fase de contrabatería general para silenciar o al menos ce­gar tem poralmente los cañones defensores; y, en tercer lugar, fuego sobre objetivos específicos, en especial las trincheras de vanguardia.

En relación a este Feuer~walz, Bruchmüller escri­bió más tarde de forma reveladora en una nota: «La

Page 18: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Primera linea de trincheras

Page 19: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

ORDEN DE BATALLA 2.° EJÉRCITO ALEMÁNGral. der Kav. Georg von der Marwitz

1.751 cañones (714 pesados), 1.080 morteros, 232 aviones en servicio (340 en total)I

JEM Oberst von Tschischwitz

ORDEN DE BATALLA 18 EJÉRCITO ALEMÁN

Gral. de Inf. Oskar von Hutier2.623 cañones (979 pesados), 1.257 morteros, 9 carros, 257 aviones en servicio (350 en total)

IJEM GD Von Sauberzweig

CE XVII

TG Von WerernDiv. 1.a Bav., 36, 238 Div. 9.*, 10 Div. 7.a Res., 10 Res. (4 carros A7V)

Grupo Gayl

Gral. de Inf. Von GaylDiv. 14 Landwehr, 47 Res. 223 Div.211 Div.

IV CE de Reserva

TG Von OetingerDiv. 45 Res., 50 Div. 5.a Guardia, 231 1 .a Div. Guardia (5 carros Mk IV)

TG Von ContaDiv. 34, 37, 103 33 Div.

Reserva OHL

Div. 2.a Guardia, 26 y 12

Page 20: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Una Bía. ligera alema­na de morteros de trinche­ra de 76 mm se instruye avanzando por un terreno cubierto de nieve. Cada Bón. de 1918 disponía de cuatro de estas armas cada uno. (IWM Q29969)

► Una dotación de cañón de campaña alemán de 77 mm del 18 Ejército avan­zando cerca de Rancourt, al sureste de San Quintín, en febrero de 1918. Esta era la pieza de campaña estándar del Ejército ale­mán, equipando 2.514 de ellas los tres ejércitos de la Kaiserschlacht, 24 (cuatro grupos con seis Bías. a seis cañones) por Div. con gru­pos adicionales no orgáni­cos. Este cañón disparaba un proyectil de 15 libras a 7.500 yardas. (IWM Q29884)

, * ̂ «iP’-Tn̂l "* t' - -*> -v a ¿vio*

M Morteros ligeros alema­nes de trincheras de 76 mm empujados sobre un terreno bombardeado en el frente occidental, en febre­ro de 1918. Estas precisas y rayadas armas fueron un elemento esencial de la Kaiserschlacht. Dispara­ban durante los primeros 20 y los últimos 5 minutos del bombardeo, contribu­yendo después a la barrera móvil. (IWM Q29888)

MArtilleros alemanes em­pujando a vanguardia un cañón pesado de campaña de 130 mm modelo 1913, probablemente en la región del Somme. Este cañón pe­saba 5,7 toneladas y dispa­raba un proyectil de 89 li­bras a una distancia de casi 15.750 yardas (9 mi­llas). La cadencia de fuego era de dos disparos por minuto y su elevación máxima de 26°. Los ejérci­tos 17 y 2." tenían 39 de estas piezas encuadradas en Bías. a dos cañones. (IWM Q.56559)

Page 21: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

gratitud de la infantería ... debe apreciarse más por parte de todo artillero que cualquier orden o cita­ción». Sus preparativos requirieron casi la mitad de toda la Art. del frente occidental. La corrección de tantos cañones nuevos sin delatar su presencia a causa del fuego fue la labor del capitán (Cap.) Pul- kowsky. Utilizó una variante de la solución británi­ca de calibración pre-Cambrai: es decir, hacer fue­go con un cañón para obtener su balística y ajustar esto a los datos meteorológicos y del plano. De esta manera, unos 6.000 oficiales (Of.) y suboficiales (Sub.) fueron instruidos por él antes del 21 de mar­zo. Incluso así, esta corrección previa sólo se logró por completo en el propio sector del 8." Ejército de Bruchmüller; los cañones de los otros dos ejércitos realizaron tiros de corrección.

Algunas baterías volvieron a Alemania para reci­bir nuevos cañones, con objeto de disponer de nue­vos tubos sin desgastar y que el tiro no se quedara corto. Los aprox. 1.000 cañones desplazados desde el frente oriental se calibraron en un inmenso cam­po de tiro. La escala de la preparación artillera de la Kaiserschlacht también se ocultó mediante el en­vío de noche de depósitos camuflados de municio­nes, que se inició tan solo once días antes del «Tag». Los cañones ocultos sólo empezaron a moverse una semana antes y las últimas unidades la noche antes a posiciones previamente asignadas.

Ludendorff no descuidó la moral. A algunos sol­dados prusianos (es decir, no bávaros, sajones o de Württemberg) se les dijo que la guerra acabaría en

tres meses. Oficiales cuidadosamente seleccionados impartieron instrucción patriótica durante el in­vierno. Se concedieron muchos permisos. Se distri­buyeron condecoraciones con mucha profusión, es­pecialmente en el cumpleaños del káiser. Bandas militares dieron frecuentes conciertos y acompaña­ron a las tropas mientras éstas marchaban cantan­do hacia su concentración final. Algunos soldados esperaban con ansiedad la gran cantidad de comi­da y bebida que se sabía que estaba en manos de la BEF. De hecho se extendió la convicción general, a pesar de todos los horrores de la Stellungskrieg, de que con Rusia fuera de la guerra, la paz sólo podía llegar a través de una última y victoriosa ofensiva alemana.

La Fuerza Aérea alemana

Los preparativos de invierno de la Fuerza Aérea alemana se hicieron a una escala similar, comenzan­do con un juego de la guerra del EM e intensifi­cándose con misiones fotográficas a partir de me­diados de enero. El aspecto más significativo fue un renovado énfasis en el ataque a tierra, que se sim­bolizó en marzo de 1918 al darse a los Schutzstaffeln («escuadrillas de protección») el nuevo nombre de Schlachtstafeln («escuadrillas de batalla»); ocho de es­tas unidades volaron desde el este para unirse a las 30 ya existentes en el oeste. El manual del Ejército «El ataque en la guerra de posiciones» dedicaba toda una sección al apoyo aéreo, lo que se reforzó

Page 22: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

A Filas de proyectores ale­manes de gas venenoso uti­lizados en el frente occi­dental, en febrero de 1918. El Cuerpo de Ingenieros proporcionaba el personal para los Rgtos. de guerra gaseosa. Los proyectiles de artillería con gas eran en­tonces los principales me­dios de lanzamiento de agentes letales, pero tam­bién se empleuron los pro­yectores desde diciembre de1917. Los proyectores eran morteros anticuados de 180 mm recalibrados, ca­paces de lanzar tres o cua­tro galones de agente, nor­malmente fosgeno (Cruz Verde), a una o dos millas si se inclinaban unos 45°. El 21 de marzo se usaron los proyectores sin resulta­dos contra el XVII CE bri­tánico al norte del río Scarpe. (IWM Q48449)

Page 23: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

■4 Biplaza alemán Hanno- ver CL (Ligero de Catego­ría C) II de ataque a tierra del Schlachtstaffel 12. Este modelo apareció en 1917. Su motor en línea Argus As III de 180 CV le daba una velocidad máxi­ma de 103 millas/hora a nivel del mar y un techo de 24.600 pies. Su velocidad ascensional era de 5 minu­tos y 18 segundos a 3.280 pies, con una autonomía de 3 horas. Su armamento era una Parabellum ali­mentada por tambor y de montaje anular de 7,92 mm modelo 14 para el ob­servador, cuyo campo de tiro aumentaba mediante la pequeña cola biplana, con una o dos ametrallado­ras Spandau de 7,92 mm que disparaban hacia de­lante. El fuselaje cubierto de madera laminada del Hannover podía resistir los daños, y su agilidad a baja altitud era buena.

▼ Un globo de observación AE de la artillería alema­na con su tripulación de tierra (normalmente 24 hombres) y su carro de en­volvimiento entre los cam­pos con cráteres, fotogra­fiado por un Infanterieflie- ger desde unos 164 pies. Antes de la ofensiva, cada Sec. de globos recibió un globo de reserva y una re­serva de gas para una se­mana (en vez de los dos días de antes). El AE po­día elevarse a 1.500 me­tros con dos observadores y actuar con vientos de 50 millas/hora. Los globos ale­manes no sólo aparecieron el 21 de marzo, sino tam­bién después, incluyendo los cruces del Somme el día 25. Sus 19 oponentes britá­nicos fueron pronto devuel­tos a sus depósitos y sus tripulaciones usadas como ametralladores de Lewis o para cavar defensas.

Page 24: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Una línea de soldados dañados por los efectos del gas, con los ojos vendados, unidos, y de movimientos lentos, en primer plano en contraste con un fondo de docenas de otros soldados heridos. A simple vista se retrata el severo peaje de la guerra.

Page 25: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

mediante un documento del 20 de febrero, «Em­pleo de los vuelos de batalla» que subrayaba su em­pleo bajo mando divisionario en el preciso instante en que la infantería descrestaba. Esto contrastaba li­geramente con el exitoso uso de al menos treinta aviones Schutzstaffeln en vuelo bajo en Cambrai, jus­to antes y durante el contraataque terrestre.

Dos nuevos Jagdgeschwadem de cazas se unieron a la famosa unidad de Manfred von Richthofen. Es­tos tres mandos controlaban doce de los treinta y cinco «Staffeln» (326 cazas) asignados a «Michael» o casi el 45% de la fuerza total de cazas de Alemania. Se concentraron casi un tercio de la cooperación ar­tillera y más de la mitad de las unidades disponi­bles de bombarderos, para apoyar a los tres ejérci­tos de la Kaiserschlacht. La llegada de los aviones sólo tuvo lugar del 9 al 12 de marzo, permitiéndo­se los vuelos sobre nuevos aeródromos sólo a par­tir del 17. La contribución de las Fuerzas Aéreas incluía también cuarenta y cinco globos de obser­vación con unas reservas de gas para una semana y varios cientos de cañones antiaéreos (AA) (de los mil ciento treinta y siete en el frente oriental el 21 de marzo), confiriendo todo ello una mayor movi­lidad.

La Fuerza Expedicionaria británica

Los ejércitos de Haig eran unas unidades agotadas y hasta cierto punto descorazonadas en la primave­ra de 1918. Este agotamiento estaba más acentua­do en la infantería que, disponiendo efectivamente el 1 de marzo de 514.637 hombres, tenía tan sólo el 36% de su plantilla total, en comparación al 45% de sólo seis meses antes. Como resultado de ello, la BEF se vio forzada a abandonar sus doce Bóns. por división por la norma franco-alemana de nueve. En este proceso no menos de 141 unidades creadas en tiempo de guerra desaparecieron entre el 10 de enero y el 4 de marzo, a pesar del decreto de la Ofi­cina de la Guerra de que sólo deberían abolirse los Bóns. de voluntarios del nuevo ejército de Kitche- ner o los territoriales de 2.a línea. Este golpe, que afectó a cuarenta y siete divisiones, se amortiguó hasta el punto de que treinta y ocho Bóns. se unie­ron para formar diecinueve y de que todas las uni­dades disueltas se absorbieron en un Bón. gemelo del mismo regimiento (aunque no necesariamente dentro de la misma Div.).

Esta eficazmente ejecutada contracción aseguró al menos que un Bón. medio disponía el 21 de mar­zo de unos buenos 995 soldados de toda gradua­ción. Es posible que aportara algún perverso con­

suelo a la infantería de línea británica con nuevas lealtades híbridas el que incluso la división de élite de la Guardia tuviera que ceder una brigada para fortalecer a la prosaica 31 División del norte del país (nuevo ejército). De forma similar, una brigada Highland sustituyó a los disueltos batallones de la 61 División. Significativamente, y a pesar de su mu­cho más largo proceso de refuerzo desde ultramar, las diez divisiones de los Dominios (Australia, Nue­va Zelanda y Canadá) conservaron su antigua es­tructura cuadrilateral de doce batallones.

Otro augurio del menor personal pero mayor potencia de fuego de 1918 fue que antes del 21 de marzo la mayoría de las divisiones recibieran una Cia. más de dieciséis ametralladoras pesadas (AMP), sumando en total sesenta y cuatro. Todos los Bón. de Inf. habían doblado las dieciséis ametralladoras Lewis de 1917. La carencia de personal del 5." Ejér­cito se compensó además con más carros, aviones y mucha más Art. que el 3." Ejército. Gough recibió no menos de veintitrés brigadas de Art. de campa­ña del Ejército, pero incluso esto sólo le dio un ca­ñón u obús de campaña por cada setenta yardas de su amplio sector.

La reorganización de la BEF redujo el ya corto tiempo disponible para instrucción y trabajos de­fensivos. Esta última tarea no se vio favorecida cuando el Bón. multi-propósito de zapadores de cada Div. se redujo de cuatro Cias. a tres. La de­fensiva en profundidad fue un concepto difícil de enseñar a las tropas, que normalmente no habían luchado en defensiva desde mayo de 1915. Aún así, los EM realizaron al menos reconocimientos del terreno para el contraataque; en el 3." Ejército, toda la 25 Div. ensayó esta acción.

Si la moral de los «chicos de Byng» era superior a la del 5.'* Ejército de Gough, reagrupada y muy instruida, la BEF en conjunto se benefició de unos permisos más generosos, 88.000 hombres la víspe­ra del 21 de marzo. Hasta el 17% de la Inf. de una Div. podía estar de permiso al mismo tiempo en un momento dado. El CG contabilizó tan sólo 1.921 ausencias no justificadas entre toda la BEF en mar­zo de 1918. Martin Middlebrook está seguramente en lo cierto al afirmar que se estaba recuperando la moral desde las profundidades post-Passchendaele a partir de comienzos del año.

El Real Cuerpo Aéreo (RFC) se enfrentaba a una identidad completamente nueva y más elevada, conforme la Real Fuerza Aérea (RAF) se desarro­llaba antes de la Kaiserschlacht. En Francia, el GD Sir John Salmond mandaba 31.092 hombres y 1.255 aviones operativos. A principios de marzo re-

Page 26: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

ORDEN DE BATALLA EJÉRCITOS ALIADOS EN EL FRENTE OCCIDENTAL,

PRIMAVERA DE 1918

Consejo Supremo de la Guerra (Versalles) I

IBEF

I1.828.098 hombres de los cuales 1.293.000 tropas de combate (616.000 fusil.)

372 carros, 5.902 cañones, 3.000 morteros, 4.000 AM, 1.039 avionesI

Mariscal de campo Haig(CG Montreuil)

I23 millas de frente 116 millas de frente/57 Div. de Inf. (8 Res.) 3 Div. de Cab.

— ;-------------1EJERCITOS FRANCESES

I468 carros, 2.800 aviones

IGral. Pétain

(CG Compiégne)

312 millas de frente/98 Div. (37 Res.)

FLANDES ARTOIS PICARDIA I GRUPOSDE EJER. |I I I I RESERVA NORTE

Ejército Belga 1 Ejér. Brit. 5.° Ejér. Brit. 1." Ejérc. Fran. 5.° Ejérc. Fran.

Rey Alberto Home Gough Debeney Micheler(CG Hondschoote) (CG Ranchicourt) (CG Nesle) (hasta 8 Div.8 Div. (2 franc.) 14 Div. (2 portug.) 12 Div. implicadas)

1.450 cañones 1.684 cañones,33 millas 119 carros, 42 millas

I I------------------'I----------- ,

I RESERVA NORTE

2° Ejér. Brit.

Plumer(CG Cassel)12 Div.1.648 cañones 21 millas

3." Ejér. Brit.

Byng

(CG Albert)14 Div.1.120 cañones,98 carros, 28 millas

3." Ejér. Fran.

Humbert(CG Clermont) (hasta 10 Div. implicadas)

6.° Ejér. Fran.

Duchéne(hasta 3 Div. implicadas)

579 aviones del RFC (más tarde RAF) (31 SQN)

* El grupo de Ejércitos Este defendía el frente desde Verdún a Suiza con los Ejércitos 2°, 1.°, 8.° y 7°

Nota: Composición media de una Div. británica en 1918: 11.800 hombres (13.035 en plantilla; 3.673 caballos y muías; 768 carros y vagones; 358 bicicletas y motocicletas; 14 camiones y coches; 21 ambulancias a motor; 48 cañones de campaña; 64 AM Vickers; 144 + AM Lewis).

Las Div. francesas tenían como media 11.400 hombres; 48 cañones de campaña y pesados;18 morteros; 9 cañones de 37 mm de Inf.; 108 AM y 216 AML.________________________________

AEFI

Pershing(CG Chaumont)

I254.378 hombres en Europa, de los que 162.482

tropas de combate. Cuatro Div. de combate formadas con 28.000 hombes, defendiendo sus U. 17 millas de

frente el 20 de marzo

Page 27: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

ORDEN DE BATALLA 3." EJÉRCITO BRITÁNICO, 21 DE MARZO DE 1918

Gral. el Hon. sir J. ByngI

JEM GD L. Vaughan Jefe de Art. GD R. St. C. Lecky 1.120 cañones (461 pesados)

Jefe de Ingenieros GD W. A. Liddel RFC GB J. F. A. Higgins (III Bri. 261 aviones)

XVII CE

TG sir C. FergussonDiv. 4.a, 15 234 cañones (103 pesados)(5,25 millas de frente)

TG sir G. HarperDiv. 6.a, 51 242 cañones (98 pesados)(7 millas de frente)

Tropas de Ejército

IV Bri. Acorazada: (3 Bón., 98 carros) AA: 5 Bia. Ingenieros:54 Cia + U.

VI CE V CE

TG sir J. HaldaneDiv. 3.a, 34, 59 324 cañones (132 pesados)(7,33 millas de frente)

TG sir E. FanshaweDiv. 17, 63, 47 Div. 2.a, 19 320 cañones (128 pesados)(8,5 millas de frente)

ORDEN DE BATALLA 5.° EJÉRCITO BRITÁNICO, 21 DE MARZO DE 1918

Gral. sir H. Gough

JEM GD J. Percy Jefe de Art. GD H. C. C. Uniacke 1.784 cañones (532 pesados)

Jefe de Ingenieros GD P. G. Grant RFC GB L. E. O. Charlton (V Bri., 357 aviones)

TG sir W. CongreveDiv. 9.a, 21, 1639 Div. (en reserva del CG) 433 cañones (150 pesados) 12 carros(7 millas de frente)

XVIII CE

TG sir I. MaxseDiv. 61, 30, 36 411 cañones (129 pesados) 3.a Div. de Cab. (bajo el mando de Ejér.)20 Div., 1 p. m. 21 marzo (9 millas de frente)

XIX CE III CE

TG sir H. WattsDiv. 66, 24 1.a Div. de Cab.366 cañones (130 pesados) 50 Div. desde las 3.20 a. m. del 21 de marzo (7 millas de frente)

TG sir R. ButlerDiv. 14, 18, 58 2.a Div. de Cab.356 cañones (106 pesados) (19 millas de frente)

1Tropas de Ejército

(excluyendo Art.)Cab.: 6 Rgto.Carros: IV Bri. Acorazada (3 Bón. 119 carros)AA: 4 Bia.Ingenieros: 56 Cia. + U. Transmisiones y Palomas: 24 pelotones+ U. Transporte a Motor: 6 Cia. Inf. y Policía Militar:2 Cia.+ 1 SQN Sanidad: 39 U.Municiones y Forestación: 5 U. + 3 Cia.Trabajos: 153 Cia. Impesión yAcantonamiento: 1 pelotón

Page 28: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Un soldado del 10 Bón. (1° de Gwent) de los South Wales Borderers, 38 Div. (Escocesa) (Nuevo Ejérci­to). Lleva un galón dorado vertical de herido, un ga­lón en V invertida por ser­vicio duradero, el distinti­vo divisionario del Dragón Rojo de Gales (sólo en la manga superior izquierda) y un emblema de Bón. (torre roja y negra) en el cuadrado verde indicando la 3.a Bri. La 38 Div. se transfirió del 1." Ejército al V CE (3." Ejército) en la noche del 31 de marzo al 1 de abril, pero permaneció en reserva. Este soldado tiene un pico a su espalda, el corta-alambre Mark II número 1 en la bocacha de su fusil Lee-Enfield, y una bandolera adicional de lona para munición sobre su jubón invernal de cuero.

Page 29: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

M ark I V Durante la Kaiserschlacht en el Frente Occidental, el primer combate entre tanques tuvo lugar en la Segunda Batalla de Villers-Bretonneux en abril de 1918, enfrentándose los Mark IVcontra los A7Valemanes.

El gobierno británico destinó multitud de fondos a evoluciones del diseño original del Mark I, hasta conseguir una máquina de guerra casi invencible. Los tanques Mark II, III y IV fueron prototipos con ligeras mejoras, con armamento más pesado y un depósito de combustible exterior que incrementaba la seguridad de los ocupantes. El Mark V, por su parte, fu e concebido para ser un tanque absolutamente nuevo, pero las urgencias de la guerra lo convirtieron en una nueva versión del primer diseño: se aumentó la potencia del motor y se mejoraron los puestos de disparo. El vehículo estuvo listo para las últimas batallas de la I Guerra Mundial. Los ensayos continuaron hasta dar lugar a otras cinco variantes, aunque muchas de ellas sólo fueron utilizadas en maniobras. Los Mark tomaron parte en batallas como la del Sonrnte, la de Amiens o la de Cambrai, donde tuvo lugar el primer combate entre tanques de ambos bandos. Hasta el fin de la guerra, los alemanes comenzaron a trabajar en proyectiles capaces de perforar el blindaje de los tanques. Al mismo tiempo, fabricaron carros de combate que pudieran enfrentarse a los británicos. Fue un periodo de extraordinaria evolución en la industria bélica, que alcanzó cotas de ingenio y sofisticación desconocidas hasta ese momento. La recompensa fueron diez millones de muertos.

Page 30: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

forzó el 5." Ejército con otros seis escuadrones (SQN) (114 aviones).

Después de Cambrai, justo hasta el 21 de marzo,24 oficiales de brigadas, EM y Art. divisionaria re­cibieron un curso de cuatro días sobre cooperación aérea, incluyendo horas de vuelo. Los bombardeos dirigidos a desorganizar los preparativos alemanes comenzaron el 16 de febrero y se intensificaron el 7 de marzo.

El Ejército francés

El estado y la moral de los ejércitos de Francia en la primavera de 1918 no son fáciles de valorar. Los historiadores británicos, basándose en la desprecia­tiva opinión de Haig el 7 de enero de que los fran­ceses no podrían resistir una ofensiva alemana con­tinuada, se inclinan por subestimar o ignorar la contribución francesa a la Kaiserschlacht. El punto de interrogación parte de los motines del verano de 1917 y de lo mucho que aún afectaban a los «poi- lu». Los últimos casos menores de indisciplina tu­vieron lugar en realidad a finales de enero de 1918 —pero hay que recordar que aprox. la mitad de las Div. de Pétain nunca se vieron afectadas por ello.

El jefe de operaciones de Ludendorff, el Oberst- leutnant Georg Wetzell, valoró a los franceses en di­ciembre de 1917 como «descansados y con libertad estratégica», «mejores en el ataque y más hábiles en la defensiva, pero no son tan resistentes como los británicos». Consideraba especialmente su Art. me­

jo r que la de Haig, y los observadores británicos apuntaron la confianza francesa en su más potente Art. para destruir los ataques. Esto es comprensi­ble, ya que una división normal disponía de tan sólo6.000 infantes.

De las unidades destinadas directamente a ir en ayuda de la BEF, la 9.a Div. tuvo seis semanas de ins­trucción y reequipamiento para la guerra de movi­miento. El II CE de Caballería (Cab.) era una fuer­za escogida, aunque diluida un mes antes a causa de tareas de seguridad interna en el conflictivo sur. Los temores franceses a un colapso civil al estilo ruso eran mucho mayores que los de un hundi­miento militar.

En potencia de fuego Pétain tenía dos impor­tantes cartas que jugar. Primero estaba la Reserva General de la Art. francesa, organizada por su ar­tillero antecesor, el GD Robert Nivelle y el Gral. Ed- mond Buat, con aprox. 1.000 cañones del 75 en ca­miones y otros 1.000 remolcados por tractores. El1 de marzo de 1918, las reservas de munición dis­ponían de 35 millones de proyectiles de Art. de campaña. En segundo lugar, ese mismo día Pétain aprobó la creación de una Reserva de Aviación aná­logamente móvil para el GE Norte. Se componía de dos «groupements» de cazas y bombardeos, con hasta 600 aviones con bases en Soissons, Fére-en- Tardenois y Chálons-sur-Marne.

El Ejército francés recibió sus primeros carros li­geros Renault en marzo, pero «Le Char de la Vic- toire» no entraría en acción hasta finales de mayo.

4 Elementos de la Inf. francesa: de izquierda a derecha, un Fusilier-Mi- trailleur con la AML Chauchat de 1915; un Grenadier-Fusilier con granada de fusil; un Volti- geur (fusilero normal); un Grenadier-á-main con una bolsa de granadas; un fu ­silero equipado completa­mente para el asalto.

Page 31: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf
Page 32: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

LOS PLANES ENFRENTADOS

Planes alemanes

La esencia de la operación «Michael» de Luden­dorff, como pronto fue llamada en clase por su EM de planeamiento, era que la táctica mandaba sobre la estrategia. El golpe sería dado en la primera fe­cha posible pero, una vez comenzado, el progreso o no de los atacantes dictarían la explotación.

La «Michael» se desarrolló durante un período de cuatro meses. En el premonitorio consejo de guerra de Mons (11 de noviembre de 1917), el pro­pio Ludendorff fue el primero en abogar por un ataque cerca de San Quintín para alcanzar la línea del Somme, que luego podía usarse como flanco de protección contra los franceses, mientras que la BEF sería «arrollada» por los avances alemanes ha­cia el noroeste. Es interesante que este concepto se adelanta con fuerza al de mayo de 1940, al igual que lo hizo el esquema del frente occidental en marzo de 1915 del entonces Oberst Hans von Seeckt, remitido al General der Infanterie Erich von Falkenhayn, el antecesor de Ludendorff. No existe evidencia de que Ludendorff conociera la propuesta solamente sobre el papel de Seeckt, pero es chocante que dos de los mejores cerebros milita­res de la Alemania imperial estuvieran en la misma

línea de pensamiento, con el fin de conseguir un envolvimiento moltkiano de los británicos. Luden­dorff se salió con la suya en contra de la oposición de los JEM de los GE que habían estado en el oeste toda la guerra. El Generalleutnant von Kühl (GE Príncipe Fleredero Rupprecht) quería un ataque en Flandes (llamado en clave más tarde «George») ha­cia Hazebrouck y el mar para separar a la BEF de los puertos del Canal y anticiparse así a la esperada ofensiva de Haig en 1918. Oberst von der Schulen- berg (GE Príncipe Heredero Alemán), impertérri­to ante la carnicería masiva de 1916, exigió ataques a ambos lados de Verdún («Castor» y «Pollux») para dividir Francia y adelantarse a cualquier ofensiva franconorteamericana de primavera. Algo sorpresi­vamente fue apoyado por el capaz jefe de operacio­nes de Ludendorff, el Oberstleutnant Wetzell. El primer intendente general no deseaba emular a Falkenhayn en Verdún; en cualquier caso, Haig probablemente atacaría en Flandes para socorrer a los franceses.

En la segunda conferencia de Mons (27 de di­ciembre), Ludendorff ordenó prever cinco opcio­nes: «George» y su ampliación a la zona de Ypres; un intento «Mars» en Arras; «Michael» (San Quin­tín); y Verdún («Castor» y «Pollux»), La fecha para

ORDEN DE BATALLA GROUP D’ARMEE DE RESERVE, 21 DE MARZO DE 1918

Gral. M. FayolleI

JEM Gral. Barthélemy

V CE II CE de Cab. 3." Ejército 6.° EjércitoGral. PelléDiv. 9.a, 10 y 1 ,a Desmontada de Cab.

Gral. Robillot1.a Div. de Cab.(otras 5 Div. no listas) 84 vehículos acorazados

Gral. HumbertSólo CG

Gral. Duchéne125 Div. desde 1.15 a. m. del 22 de marzo

Page 33: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Ofensivas de Ludendorff en el frente occidental, 21 de marzo al 17 d< julio de 1918

PLANES OFENSIVOSALEMANES1 George 22 George 13 Valkyrie4 Mars5 Michael 16 Michael 27 Michael 38 Archangel9 Archilles10 Roland11 Héctor12 Castor13 Pollux

14 Strassburg

ÍC o b le n z a A Las ofensivas de Ludendorff en el frente occidental del 21 de marzo al 17 de julio de 1918. Junto a los ejércitos enfrentados aliados y alemanes el 21 de marzo de 1918 se muestran los nombres en clave de las opciones ofensivas de Ludendorff. «Michael» 1-3 y «Mars» indican la extensión de la Kaiserschlacht, conteniendo cada una un ejército. También se muestra el terreno ganado por las cuatro ofensivas menores de Ludendorff tras la Kaiserschlacht.

su terminación era el 10 de marzo. El 21 de enero de 1918, Ludendorff eligió «Michael» en primer lu­gar, después de realizar una prolongada visita al frente con Kühl y Schulenberg que incluyó confe­rencias con EM de cinco ejércitos. Estimó que «George» dependía demasiado de una primavera seca y que «Mars» estaba demasiado dominada por el cerro Vimy en poder de la BEF. Tres días más tarde se enviaron las órdenes.

«Michael» contemplaba el ataque de tres ejércitos en un frente récord de 50 millas, tres veces el fren­te de ataque de Haig en 1916 en el Somme. En el centro, el 2." Ejército de Marwitz empujaría hacia Péronne y rodearía el saliente de Byng en Cambrai desde el sur. Hacia su norte, el nuevo 17 Ejército de Below enlazaría con el de Marwitz y avanzaría sobre Bapaume. El 18 Ejército de Hutier atacaría Ham en el Somme. Allí debería guarnecer el río contra la intervención francesa desde el sur, refor­zando al tiempo la ofensiva principal hacia el no­roeste sobre Arras y más allá. Una tercera fase con­templaba finalmente arrollar a la BEF de sur (Arras) a norte.

Sin embargo, muy pronto la claridad de inten­ciones de la Kaiserschlacht se vino abajo. A finales de enero, el nuevo ejército de Hutier pasó al GE Príncipe Heredero Guillermo. Ludendorff quería ejercer el control a través de dos GE, no sólo a tra­vés del bávaro Rupprecht, que admiraba a los bri­tánicos y prefería «George» en Flandes a «Michael» en Picardía. Pero el hijo del Káiser era responsable del sector francés del frente hasta el Argonne. A fi­nales de febrero estaba presionando en favor de un avance de Hutier más allá del Somme y del canal de Crozat. Ludendorff aceptó, incluso viendo cómo el 18 Ejército se reforzaba con los otros tres ejérci­tos del Príncipe Heredero, que deberían retroceder a su zona de combate si Pétain les atacaba. Las ór­denes de Hutier el 15 de marzo a sus cinco jefes de CE especificaban llegar a la línea Chaulnes-Roye, hasta 15 millas al oeste del Somme, con objeto de atacar las reservas francesas.

El 17 Ejército de Below tenía en realidad la mi­sión más difícil, por la que tenía que presionar por debajo del fuerte bastión de Arras de Byng y des­pués envolverlo desde el sur, al mismo tiempo que su subsiguiente ataque «Mars» al sur del Scarpe. Ominosamente, Below no recibió permiso para am­pliar «Mars» justo hasta ese río. Su ejército, el últi­mo formado, tan sólo igualaba al de Hutier en divi ­siones y era más débil en cañones y aviones. Antes de empezar, la Kaiserschlacht contenía la semilla de una divergencia estratégica.

Page 34: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Tácticas alemanas

Ludendorff no hay duda de que estaba convencido de las potenciales contradicciones estratégicas, pero consideraba esencial el problema táctico de la rup­tura. Como comunicó a un dubitativo Rupprecht, «vamos a hacer un agujero y el resto que siga de­trás. Así lo hicimos en Rusia». Fue por orden suya que el Hauptmann Hermann Geyer escribiría a ni­vel Bón. y superior «Der Angriff im Stellungskrieg» («El ataque en la guerra de posiciones»), publicado el 26 de enero de 1918, y ampliamente distribuido entre el ejército. El núcleo de esta doctrina era la infiltración, aunque no se empleaba ninguna pala­bra alemana equivalente. Ludendorff había orde­nado que cada infante recibiera instrucción como tropa de asalto. Las pequeñas unidades (Us.) de «Stosstruppen» o «Gruppen» deberían avanzar con­tinuamente en velocidad y profundidad, rebasan­do los puntos fuertes de las defensas que serían re­ducidos por unidades de 2.° escalón de cada Div. La barrera móvil de Art. debería avanzar al ritmo del ataque de la infantería, en lugar de al contra­rio, y las Us. de vanguardia avanzarían hasta estar extenuadas, en lugar de ser relevadas según el sis­tema aliado. Cada pequeña U estaba estructurada en base a AML y era dirigida por Of. y Sub. espe­cialmente instruidos. Las agrupaciones de combate de 2.” escalón tenían su propio «Minenwerfer» por­tátil, y cada regimiento (Rgto.) cuatro cañones de campaña hipomóviles. Era habitual que estos jefes de Rgto. de Inf. mandaran cañones de 150 mm.

El objetivo mínimo del prim er día era avanzar unas cinco millas para tomar la línea de cañones de campaña británicos, pasando las reservas a aprovechar el éxito. Sin embargo, y era crucial, Lu­dendorff no poseía medios para la explotación que no fueran los pies de sus hombres, los cascos de ca­ballos insuficientes y mal alimentados y un trans­porte a motor a menudo sobre llantas de hierro (debido a la escasez de goma). Nueve carros (in­cluyendo cinco Mk IV capturados a los británicos) se repartieron entre tres CE, pero cuando se les pasó revista el 27 de febrero fueron los primeros carros de combate que veían Ludendorff o el Kái- ser. Los primeros A7V alemanes (de 20 fabricados) no estuvieron terminados hasta octubre de 1917, por lo que era demasiado tarde para un programa de construcción en masa de carros (incluso cuan­do se había favorecido esto y se disponía de abun­dantes materias primas). Casi todos los 32 vehícu­los fuertemente acorazados de Ehrhardt perm ane­cieron en el frente oriental, sobre todo en Ucra­

nia, así como los vehículos capturados a los rusos.La caballería sólo existía en forma de un SQN por

Div. para tareas de exploración y escolta; las otras tres Divs. de Cab. se quedaron en Rusia. Incluso allí su rendimiento había sido negativo.

Planes aliados

A principios de diciembre de 1917, tanto Haig como Pétain fueron conscientes y aceptaron que tendrían que combatir a la defensiva en la prima­vera siguiente, por primera vez en la guerra. Esta­ban menos contentos con los detalles. Con disgus­to, Haig retiró a los ejércitos franceses 3.° y 6." a 42 millas del frente en Picardía, hacia abajo y a caballo del río Oise, a finales de enero de 1918. Ambos Cte. en jefe sentían que sus ejércitos estaban faltos de personal. Pétain disolvió tres Div. entre noviembre y diciembre de 1917 y, en conjunto, los aliados per­dieron once buenas divisiones para apuntalar la Ita­lia post-Caporetto.

Irónicamente, en esta época de ampliar frentes y disminuir personal, para lo que la respuesta nor­teamericana aún estaba a meses de llegar, las deli­beraciones aliadas más elevadas se centraban en la necesidad de una reserva general conjunta de has­ta 30 Div., para enfrentarse a la esperada ofensiva alemana de primavera, bien en Italia o en Francia. El nuevo Consejo de Guerra Supremo Aliado que­ría controlar esta fuerza estratégica, una ambición que se reforzó cuando Foch se convirtió en el re­presentante militar francés a principios de febrero, y Lloyd George propuso oficialmente su creación.

Este esquema hacía agua por la falta de personal y la negativa por igual de los Ctes. en jefe a ceder un número significativo de Divs. al control de un comité internacional en Versalles. Durante una cena con Haig el 24 de febrero, Clemenceau admi­tió que el mariscal de campo y Pétain, en lugar de Foch, debían ponerse de acuerdo sobre las reser­vas. Al día siguiente, Haig comunicó al nuevo jefe del EM imperial (CIGS), Wilson, que preferiría ser relevado del mando a ceder divisiones. Esto y la in­minencia del ataque de Ludendorff puso fin a un complejo aunque estéril debate.

Sobre el terreno de la zona de la BEF, la defen­siva se estaba desarrollando conforme al memorán­dum del CG de 14 de diciembre de 1917. Este no sólo se basaba en métodos y manuales alemanes de 1916-17, sino que realmente aceleró el estudio de estos últimos en traducciones. En teoría, estas de­fensas deberían tener 12 millas de profundidad en tres zonas. La primera sería la zona avanzada con

Page 35: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

puestos ametralladores ocultos, cubriendo gruesos obstáculos de alambre de espino y otros puntos fuertes o reductos rodeando a las guarniciones, de­trás del frente de trincheras. Esto serviría para va­lorar el peso del asalto alemán y para forzarle a gas­tar un tiempo, personal y munición preciosos. La batalla principal se libraría y ganaría en la zona de combate, una o dos millas a retaguardia. Esta zona con una profundidad de 2.000 a 3.000 yardas po­seía mayores reductos alambrados y toda la Art. di­visionaria (aparte de cañones de campaña contra­carro (CC) aislados en la zona avanzada). Cada Div. tenía al menos tres Bóns. para actuar en la zona de combate, con otro fuera en reserva para contraata­ques locales. También cerca de la zona de combate se encontraban las baterías (Bia.) de cañones pesa­dos. Al final de todo estaba la Zona de Retaguar­dia, una segunda Zona de Combate en su estruc­tura, cuatro a ocho millas por detrás de la zona principal de resistencia. Por detrás de su «Línea Verde» delantera se encontraban los CG, los depó­sitos de suministros y los cañones más pesados pero su construcción estaba en el tercer lugar de las prio­ridades.

Aunque sobre el papel era impresionante, este es­quema estaba seriamente limitado por la falta de tiempo y mano de obra, así como por el duro tiem­po de enero. Además de los soldados, Gough dispo­nía de un máximo de 8.830 trabajadores que levan­taban las defensas. Su Zona de Combate no tenía abrigos subterráneos el 21 de marzo y estaba sin acabar entre San Quintín y el Oise; y la Zona de Re­taguardia se componía tan sólo de una única trin­chera visible, la «Línea Verde». Las defensas de Byng eran más fuertes, pero su Zona de Combate carecía de refugios subterráneos con puestos de ametralladoras, y la incompleta Zona de Retaguar­dia tenía tres cinturones de alambrada, dos líneas de trincheras que llegaban hasta la cintura y nidos de ametralladoras.

También estaba el problema de acostumbrar a las tropas a estos cambios radicales. Los jefes de ejér­cito se lamentaban el 17 de febrero de que sus hom­bres no entendían el concepto «defensiva en pro­fundidad». Un triste y anónimo Sub. regular de 1914 comentaba que «sencillamente no nos va. El Ejército británico combate en línea y no lo hará bien en estas jaulas». La Zona de Vanguardia tenía de­masiado personal, en comparación con los métodos alemanes o franceses de «puestos avanzados», con tropas insuficientemente instruidas para su papel y poco convencidas de que su sacrificio fuera necesa­rio. Los proyectiles CC de 18 libras y los esféricos

de 60 libras de morteros antitrincheras, adaptados a minas CC (además de amplias zanjas en la Zona de Combate) es posible que diera cierta confianza contra un temido ataque a Cambrai por la espalda, pero de hecho demostraron ser un triste desperdi­cio de recursos.

Por prim era vez el CE Blindado británico (10.072 hombres y 372 carros en Francia), reorga­nizado y reequipado, se enfrentaba a una batalla defensiva de carácter. Hasta primeros de marzo la nueva doctrina no decidió que debería desplegar­se en tres grupos hasta diez millas por detrás del frente, para los contraataques de CE o Div. en la Zona de Combate, en lugar de como móviles «co­nejos salvajes» aislados, saliendo de repente desde posiciones ocultas.

La vulnerabilidad del 5." Ejército condujo por fin a que Gough recibiera la autorización del CG en fe­brero para llevar a cabo una retirada de combate hasta la gran cabeza de puente de Péronne al este del Somme, en donde 9.700 soldados y operarios trabajaban con retraso (10 de marzo) tras la simbó­lica Zona de Retaguardia. Gough hubiera preferi­do más divisiones de reserva para contraatacar, pero tres peticiones por escrito al CG no consiguie­ron más que tres, dos de las cuales sé situaron muy por detrás de la línea de vanguardia, mientras que dos también quedaron bajo control del CG. Peor aún fue que el JEM de Haig le prohibió que las acercara más en la tarde del 19.

Ya el 7 de diciembre de 1917, la Inteligencia de la BEF no tuvo dificultad en predecir una ofensiva de Ludendorff para marzo. Otro asunto era su sec­tor exacto. El RFC sólo descubrió quinientos depó­sitos de municiones cubiertos de tela impermeable en la zona de San Quintín, el 10-11 de marzo. El 2 de marzo, el Gral. de brigada (GB) Edgar Cox es­peraba que los ejércitos 3.“ y 5." se enfrentaran al ataque, pero su jefe creía que éste se extendería alo largo de no más de 30-40 millas, debido a la can­tidad de Art., por lo que el 17 de marzo se valoró más la opción de Arras-San Quintín, y no al Sur de esta última ciudad. La seguridad alemana (por ejemplo, prohibición de tráfico telefónico en un ra­dio de siete millas desde el frente, y camuflaje, con los movimientos nocturnos lo más tarde posible) dio muy poco tiempo de alerta preciso. Gough, hay que decirlo a su favor, dio la alarma a finales de enero en el momento en que supo que su oponente era Hutier.

La valoración de la amenaza a la BEF y los cru­ciales preparativos para ayudar a los franceses se vieron afectados por la preocupación de Pétain por

Page 36: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

su frente mucho más largo, que a su vez se acre­centó por las maniobras de diversión de Luden­dorff. Estas incluyeron, entre otras cosas agrada­bles, proyectiles de gas mostaza que causaron 7.223 bajas desde el 9 de marzo, en puntos a lo largo de todo el frente occidental. Se dieron fieros ataques de finta sobre los belgas, bombardeos sobre Ver- dún, y en Lorraine el 20 de marzo, un globo ale­mán de observación cayó sobre las líneas francesas, con documentos que revelaban convenientemente una ofensiva para el día 26 en Champagne (la op­ción «Roland»). A pesar de todo, el 7 de marzo Haig y Pétain habían acordado que seis Divs. francesas más Art. adicional y Us. de apoyo se concentrarían en algunas de las tres zonas al norte y al sur de Amiens, en la cuarta tarde de una ofensiva impor­tante contra la BEF. Desde la zona de Montdidier Noyon podrían asegurar las cabezas de puente del Somme, ocupar la zona del 5.° Ejército, y/o contraa­

tacar. Se desplegaron cuatro Divs. de Inf. y dos de Cab. con objeto de estar disponibles, pero casi la mi­tad de las 39 Divs. de reserva de Pétain estaban al este del Argonne.

La Inteligencia francesa, mientras tanto, trabaja­ba en el documento cifrado ultra-secreto de cinco hojas de Ludendorff, que se había introducido el 5 de marzo para la Kaiserschlacht. Estaría descifrado alrededor del 4 de abril. Esto influiría más tarde en las batallas de 1918, pero no en la propia Kaisersch­lacht.

▼ Un cañón pesado ale- bombardeo inicial. Podían mán sobre raíl, probable- disparar un proyectil de mente de 280 mm (11”), 529 libras a 18 millas, hace fuego desde el bosque (IWM Q29970) de Le Cateau, al sureste de Cambrai. Ocho de estos ca­ñones tomaron parte en el

Page 37: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

KAISERSCHLACHT 1918: LA BATALLA

El bombardeo alemán

Alrededor de las 4.40 a. m. del 21 de marzo de1918, un gran cohete blanco se elevó sobre San Quintín. Era la señal para que diez mil dotaciones alemanas de cañones y morteros abrieran fuego si­multáneamente en un bombardeo de cuarenta y tres millas de anchura que cubría ciento cincuenta millas cuadradas, una barrera a una escala que sólo sería superada por el ataque del Ejército Rojo en 1945 sobre Berlín. En cinco horas, el «tren de ca­ñoneo» de Ludendorff gastó 1.160.000 proyectiles - los cañones de Haig habían disparado 1.732.873 proyectiles «en una semana» para el ataque al Som­me de 1916. Cada pieza empleó de 200 a 600 dis­paros. Existen muChas descripciones en vivo del bombardeo en otras partes, por lo que aquí vamos a describir las siete fases planeadas por Oberst Bruchmüller, que no era, debe resaltarse, el jefe de toda la Art. (no había ninguno), sino sólo el del 18 Ejército.

Fase 1: 4.40-6.40 a. m. «Fuego general por sor­presa» con gas y alto explosivo (HE) (proporción 4:1) sobre todos los objetivos. 5.00 a. m. Los mor­teros de trincheras cesan el fuego. 5.30-40 a. m.. Fuego por sorpresa sobre posiciones de Inf. de to­dos los cañones con calibre inferior a ciento setenta mm; HE sólo contra la Zona Avanzada; HE y gas so­bre la Zona de Combate. 6.00 a. m. Amanecer.

Fases 2-4: 6.40-7.10 a. m. Cada diez minutos incluyendo cañones de Inf. sin visibilidad por la niebla.

Fase 5: 7.10-8.20 a. m. Fuego durante 70 minu­tos por casi todas las Bias. sobre las defensas de Inf.; fuego de contrabatería y de largo alcance sobre blancos normales. 7.40-7.55 a. m. Algunos obuses barren las trincheras de la Zona Avanzada; otros bombardean centros de resistencia durante 10 mi­nutos y barren hacia retaguardia. (La niebla obligó a la puntería por plano desde ese momento). Barri­do de cañones de campaña entre la 2.'' línea britá­

nica y las posiciones intermedias con proyectiles de gas lacrimógeno y HE.

Fase 6: 8.20-9.35 a. m. Lo mismo que la fase 5 con variaciones de objetivos. Algunos proyectiles de hu­mos para reforzar la niebla.

Fase 7: 9.35-9.40 Bombardeo con obuses delante de las trincheras con HE, con morteros y cañones de campaña disparando más allá de la Zona Avan­zada.

Los objetivos logrados por Bruchmüller fueron la dislocación y la parálisis. Las dos mil quinientas dotaciones de cañón de la Royal Artillery que se oponían a este fuego tenían que llevar máscaras de gas y sus observadores no podían ver las bengalas de SOS desde los reductos de la Zona Avanzada. Los blancos específicos alcanzados incluyeron la ca­beza de ferrocarril del 5." Ejército, aeródromos; Ba- paume; Péronne; el saliente de Flesquiéres (tres mil bajas por gas mostaza); el carburante y la munición de tres Bón. de carros (destruidos). Entre site mil quientos y ocho mil hombres fueron muertos o he­ridos; se dañaron líneas telefónicas enterradas a seis pies en las zonas Avanzada y de Combate; y los se- tenta-ochenta Bóns de Inf. de esta última tuvo ba­jas mientras ocupaban las defensas. El énfasis no se puso en el sector de «Michael»; se amplió a los ejér­citos 1." y 2." de la BEF así como a los franceses en Champagne.

21 de marzo: asalto de la infantería

Las primeras tropas de asalto y de zapadores em­pezaron a cortar las alambradas británicas aproxi­madamente a las 9 a. m. Cuarenta minutos más tar­de la Inf. de asalto de las 32 Div. de la primera ola de Ludendorff avanzó con cara de pocos amigos y máscaras de gas tras la barrera móvil, trescientas yardas por delante de sus Bias. de apoyo próximo de 7 y 105 mm; morteros ligeros y obuses de 150 mm. A la cabeza se encontraban las tropas de asal­to a nivel Div. y ejército, en U. tipo Cia. con armas

Page 38: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Soldados aliados refugiados en trincheras utilizan máscaras para protegerse del gas mostaza.

Page 39: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

pesadas. Se arrastraron a través de la espesa niebla de la Zona Avanzada, a menudo para alcanzar sus reductos o incluso los de la Zona de Combate en veinte-treinta minutos. La 2.a ola de asalto de Rgto. de Inf. les seguían tan solo a cien yardas, con la mi­sión de reducir estos puntos fuertes desde detrás o desde los flancos.

A las 11.10a. m., tras noventa minutos de comba­te de Inf., sólo quince reductos de la Zona Avanza­da británica resistían. La niebla había asegurado que una centena de cañones de dieciocho libras e incon­tables ametralladoras fueran superados sin realizar un solo disparo y que cuarenta y siete Bóns., o qui­zás veintiocho mil hombres, hubieran desaparecido del orden de batalla de la BEF. Un Bón. perdió to­dos sus hombres; al menos otras cuatro Us. tuvie­ron menos de cincuenta supervivientes. Cuatro de las dieciocho Divs. que ocupaban la línea perderían más de dos mil hombres capturados, rindiéndose la mayoría de los hombres en posiciones aisladas y ro­deadas por números muy superiores de tropas. Se trataba de hombres que ya habían aguantado una inimaginable prueba de cinco horas de bombardeo en un campo de batalla químico con la peor visibi­lidad. Muchos cautivos aturdidos fueron enviados a las líneas alemanas sin escolta.

La lucha por la Zona de Combate británica fue si­multánea a la de la Zona Avanzada durante más de una hora de la mañana, pero la necesidad alemana de esperar a la concertada barrera móvil dio cierto respiro a las defensas, basada como estaba en la lí­nea principal de fuego de cada Div.. Tres de las Divs. de Below avanzaron a lo largo del acceso na­tural al valle de Hirondelle, justo en la unión de los CE IV y VI de Byng y llegaron a destruir cuatro de los Bóns. de la 59 Div., capturando treinta y seis de sus cuarenta y ocho cañones, pero no antes de que un obús de 4.5” hubiera disparado unos mil proyectiles. En este sector, Byng fue erróneamente informado de la caída de Bullecourt sobre el me­diodía, no descubriendo la verdad hasta dos horas más tarde. Las Divs. 6.a y 51 también se vieron em­pujadas a retaguardia de la Zona de Combate. El V CE en el saliente de Flesquiéres, duramente gasea-

▼ Un artillero alemán en­fría un tubo caliente de cañón con trapos húmedos. La pieza es un cañón de campaña de 100 mm y tie­ne casi su elevación máxi­ma de 30°. El modelo 1917

disparaba un proyectil de 39,5 libras a 12.085 yar­das (6,8 millas) a dos dis­paros por minuto. Este es uno de los 530 de estos ca­ñones empleados el 21 de marzo. (IWM Q56535)

Page 40: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

do pero no atacado directamente, recibió esa tarde su orden de retroceder cuatro mil yardas hasta una línea intermedia.

Sin embargo, no se dividió el saliente según los planes de Ludendorff, en el sur gracias a la firme resistencia por parte de las dos Divs. más septen­trionales de Gough, que defendían Epehy y se en­contraban muy a vanguardia en la Zona de Com­bate. Su cansado vecino, la 16 Div. (irlandesa), su­cumbió tras tres contraataques por parte de aproxi­madamente una docena de las Divs. de Marwitz, que destruyeron dos de las brigadas de Marwitz y capturaron ochenta y seis de las noventa y seis pie­zas de campaña. Gough dirigió su 39 Div. de reser­va a este sector y se taponó una peligrosa brecha con la ayuda del fuego a quemarropa por parte de tres obuses de 9,2”. La alejada 50 Div. inició su mar­cha hacia los puentes del Somme para ayudar al du­ramente castigado XIX CE del TG Sir Herbert

T La primera serie de pri­sioneros de guerra pasan por un pueblo al sur de San Quintín el 21 de mar­zo. Muchos de estos infan­tes y artilleros del 5." Ejér­cito, comprensiblemente,

parecen estar aliviados por dejar la guerra. El 18 Ejército alemán afirmó modestamente haber captu­rado 7.000 hombres y 88 cañones el primer día. (IWM Q51460)

Watts, que se había visto forzado a retroceder des­de su Zona de Combate. En el centro del 5." Ejér­cito, el XVIII CE del TG Sir Ivor Maxse retuvo seis millas de su Zona de Combate durante todo el día, contra catorce de las Div. de Hutier, a pesar de re­cibir sólo cincuenta supervivientes de los ocho Bóns. en la Zona Avanzada, en donde seis de los ca­torce reductos aguantaron durante al menos cinco horas.

El III CE de Butler, el más sureño y extendido, sólo tenía unos diez mil hombres para un sector de diez millas, contra el que Hutier concentró diez Divs. con los primeros blindados de Alemania. A las11 a. m. unos quince Bóns. estaban avanzando ha­cia la Zona de Combate de la 14 Div., habiendo pe­netrado por el límite con la 36 Div. del Ulster y ha­cia el sur. A las 2 p. m. la 14 Div. estaba a retaguar­dia de su Zona de Combate y tras tres horas y me­dia de combate tuvo que abandonarla. Durante un tiempo los defensores recibieron un duro castigo por parte de la 18 Div. apoyada por Art. en el Sur, hasta que la 5. ' Brigada (Bri.) Desmontada restitu­yó la línea a la caída de la noche.

Hacia las 2 p. m. Gough telefoneó un momento a sus cinco jefes de CE, diciéndoles que tenían que realizar una acción retardadora hasta que llegaran

Page 41: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf
Page 42: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Las fuerzas enfrentadas, 21 de marzo de 1918

Page 43: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

los refuerzos aliados, para no ser destruidos en la Zona de Combate. En especial comunicó a Butler, que se quejaba de la pérdida de muchos cañones (en realidad 100), la autorización prevista para re­tirarse esa noche tras el canal de Crozar. Después visitó por turno a sus cinco subordinados, en coche, en menos de tres horas.

Una acción más brillante para Byng fue un con-

4 Las Fuerzas Enfrenta­das, el 21 de marzo de 1918 —el despliegue de di­visiones y Us. superiores al 1." día. En conjunto, 38 Divs. alemanas de primera línea se enfrentaron a 21 británicas, pero sólo 32 de las primeras descrestaron a las 9.40 a. m. contra 16 británicas. Los dos CEs. más al Norte de Below y el de Marwitz enfrente de Flesquiéres no se unieron al ataque de la Inf. A pe­sar de ello, al finalizar el día, el 5° ejército de Gough había identificado40 Divs. alemanas en ac­ción contra él; en otras pa­labras, Marwitz y Hutier emplearon todas sus Divs.

británicas de reserva en­traron en acción el día 21.

T Oficiales británicos pri­sioneros de guerra atravie­san Cambrai en marzo de1918. El distintivo de hom­bro en forma de diamante de la primera fila podría indicar la 2° Bri. de una Div. Las pérdidas de Of. en la BEF la semana hasta el 27 de marzo fueron un récord de 1914-1918 (6.325). Las bajas totales de Of. en la batalla ascen­dieron a 8.344, de los que 2.195 se consideraron «de­saparecidos». (IWM Q51462)

traataque realizado por la tarde por parte de doce carros y unos cuatrocientos infantes de la 19 Div. que recuperó la mayor parte del pueblo de Doig- nies, en el flanco norte del saliente de Flesquiéres.

Martin Middlebrook, el meticuloso historiador del prim er día, ha elaborado su extensa lista de ba­jas. Con cerca de 40.000 bajas (10.851 muertos), Ludendorff había capturado 98,5 millas cuadra­das de Francia, incluyendo 46 pueblos en ruinas, Sus ejércitos habían causado a la BEF unas 38.500 pérdidas (incluyendo alrededor de 21.000 prisio­neros de guerra, estando muchos heridos), des­truido o capturado entre 502 y 522 cañones, al menos 4 carros, y la había forzado a abandonar otras 40 millas cuadradas y once pueblos. Las ba­jas totales (aunque no los muertos) superaron las del prim er día de las batallas del Somme en 1916 (y probablemente las de cualquier otro combate de un día en la historia del que se tengan datos fia­bles). Y por una notable coincidencia Ludendorff había obtenido los mismos territorios en área y pueblos, para los que Haig y Fayolle habían nece­sitado 140 días para arrebatárselos al Ejército ale­mán en 1916.

Aún así, como también comenta Middlebrook, Ludendorff tan sólo había penetrado limpiamente por la Zona de Combate en un cuarto del frente ata­cado, y sus ataques de flanco no se habían reunido

Page 44: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

tras el saliente de Flesquiéres. Below informó en tono realista que la batalla principal aún estaba por venir, y su superior, el príncipe heredero Rup- precht, pensaba que el 5." Ejército había sido cogi­do en una semi-retirada. Para todos los generales ese día inició un tiempo de cambio de mentalidad desde las certidumbres estáticas de 1915-17. La Div. más novedosa de Hutier, la 238, había avanzado la distancia récord de 4,5 millas.

La niebla hizo que las operaciones aéreas se ini­ciaran con retraso el día 21. Por la tarde se produ­jeron muchos vuelos y combates, cuando los Fok- ker pudieron realizar sus ataques a tierra planea­dos desde un principio. Al menos seis relatos de Rgtos. alemanes se refieren a la eficacia de los ca­ñones AA británicos. Al final del día, 36 escuadri­llas del RFC habían entrado en combate, incluyen­do su II Bri. de Flandes, y había perdido 16 avio­nes (los alemanes afirman que 19) y tripulaciones, por 14 alemanes (éstos dicen que 8). Sin embargo, la U. del Barón Rojo fue una de las que no consi­guió despegar. El reconocimiento aéreo, incluyen­do el de los globos, ayudó a ambos bandos, pero las condiciones limitaron mucho los planes británicos para los aviones de observación para la Art.. Los «Infanterieflieger» y globos alemanes siguieron el avance, localizando las ropas blancas de los solda-

▲ Parte de una serie de 4.000 prisioneros del 3." Ejército británico captura­dos en el sector de Bapau- me-Arras (los ejércitos ale­manes 17 y 2° afirmaron haber hecho respectiva­mente 2.300 y 4.000 pri­sioneros el 21 de marzo) espera al tren hacia Ale­mania en un andén, quizás en Douai. La prenda de cabeza incluye revestimien­tos del casco de acero, gorras de lana y el ubicuo «gorro de latón».

►Arriba: Muerte en la zona de retaguardia. Este grupo británico ha realiza­do su última resistencia en un patético amago de trin­

chera, con una ametralla­dora Vickers y al menos un fusil Lee-Enfield. A la luz del sol primaveral se apre­cia la sombra del fotógrafo alemán, y en el horizonte del típico terreno rodado de yeso puede verse un transporte a caballo ale­mán. (IWM Q23683)

► La Cab. alemana (ula­nos) cruzan trincheras de la zona de combate britá­nica al oeste de San Quin­tín. A la izquierda de una ametralladora Lewis sobre bípode yace un cabo britá­nico de lanceros. Excepto el 26 de marzo, los jinetes alemanes avanzando esta­ban más en los rumores aliados que en la realidad.

dos en las posiciones capturadas. Esa noche los bombardeos alemanes destruyeron siete estaciones importantes de ferrocarril francesas.

Page 45: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf
Page 46: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Halberstadí CLII de las escuadrillas de batalla, Schlachtstaffeln, durante la Kaiserschlacht, la primera ofensiva alemana de 1918 . Pintura de A l Forbes. A l fondo un par de Hannover CLIII

Page 47: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Tiempo: nieblaD Reducto de Ricardo D Grand Séraucourt 0 L'Epine de Dallon

Línea de la 36 Div. el 22 de marzo tras una retirada nocturna

Canal de San Quintín

0 Hamel 0 Fontaine-les-Cles

0 Reducto de Quarry 10 Reducto de Boadicea0 Contescourt Q Castres 0 Dallon

iD Oestres S0 Grugies O I Gauchym Reducto de Racecourse 1 0 Reducto de la Estación m Estación de Essigny m Essigny-le-Grand fT I Granja productora m Reducto Juana de Arco m Trinchera Le Jeune m Foucard m Le Pontchu

Línea inicial británica del frente

BR XVII

MAXSE

ASALTO DEL XVII

CE ALEMAN

SOBRE LA

36 DIV. (ULSTER)

9.40 a. m. a 9 p. m. del 21 de marzo de 1918 BRIX lH

COUPER

El asalto del XVII CE alemán sobre la 36 Div. (Ulster). El 1." día de combate en un típico sector divisionario del 5° Ejército, al sur de San Quintín. Nueve piezas C/C de 18 libras fueron arrolladas

inmediatamente tras la línea del frente cuando los tres Rgtos. de Inf. de las Divs. alemanas asaltaron los tres Bóns. de 1° línea de la 36 Div. Sólo tres de sus puestos de 1° línea resistieron hasta la 1 p. m. o más. Las primeras Stosstruppen llegaron a la línea de reductos de la zona avanzada a las 10 a. m., y la niebla impidió la barrera artillera de los defensores hasta las 12.05 p. m.

La prolongada resistencia de los reductos de Boadicea y Racecourse impidieron una penetración alemana completa hacia la zona de combate, aunque el 463 Rgto. de cabeza de la 238 Div. tomó Contescourt hacia las 12.30 p. m. Los tres Bóns. británicos de reserva cerca de Grand Séraucourt reforzaron a los incompletos defensores de la zona de combate y, especialmente hacia el sur, formaron una línea a lo largo del ferrocarril contra la toma por parte de la 1.a Div. Bávara de la meseta de Essigny, en el vecino sector

de la 14 Div. (ligera).Desde las 10.30 p. m., los

hombres del Ulster . retrocedieron detrás del canal del Somme para defender una línea al este de Fontaine. El máx. avance alemán de ese día fueron las 4,5 millas de la joven 238 Div. hacia Grand Séraucourt. La 36 perdió 2.392 prisioneros tan sólo de Inf., incluyendo todos los del 12 de Fusileros irlandeses (588 desaparecieron) y del 15 de Fusileros irlandeses más 252 prisioneros del reducto de Boadicea (2° de Royal Inniskilling Fusiliers). Estos tres Bóns. arrollados perdieron a sus Ofs. jefes capturados. Los muertos de la Div. ascendieron a 267. Las pérdidas totales debieron superar la mitad de las 6.109 bajas sufridas durante la Kaiserschlacht.

Page 48: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

M La 4° Bri. de guardias británica (31 Div.), compuesta por los Bóns. 3° y 4.a de guardias granaderos, y el 3." Bón. de guardias Coldstream, a las órdenes del GB lord Ardee (herido el 27 de marzo), embarcando en camiones antes de las 9 a.m. del 22 de marzo al noroeste de Arras. Les quedaba un viaje de aprox. 20 millas hasta Boiry St. Martin (al sur de Arras) para reforzar el VI CE, justo al oeste de la «Línea Verde». Un pelotón de camilleros de un Bón. avanza junto a los vehículos. El arquetipo alto y confiado de los guardias se reflejaría pronto en su importante contribución a la resistencia del 3." Ejército. El 25 de marzo la Bri. se quejó de que el fuego artillero británico no permitía el empleo apropiado del fusil.

•4 Un puesto de distribución de bajas del 3." Ejército británico (CCS) cerca de Bapaume el 22 de marzo, con muchos casos de heridas en la cabeza. Un CCS (el 5° Ejército tenía diez) estaba normalmente 20 millas detrás del frente, recibiendo pacientes del puesto principal de socorro a nivel de CE y enviándolos, después de operarles, en trenes ambulancia al Hospital General de base. El Real Cuerpo Sanitario de la BEF tenía 45.180 hombres y mujeres el 1 de marzo.

Page 49: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

22 de marzo: Gough se retira, Byng resiste

Precisamente el JEM de la BEF, y a pesar de las ale­gaciones de Gough p o r lo contrario, pensaba que L udendorff no seguiría al día siguiente. El avance alemán se reanudó a las 4 a. m., a pesar de la p e r­sistente y espesa niebla, de las mil y pico bajas que cada Div. de 1.a línea había sufrido el día 21, y el inevitable retraso en todo apoyo artillero excepto el divisionario orgánico. En la antigua Zona Avanza­da del 5." Ejército, cinco reductos británicos seguían combatiendo, no cayendo el último hasta las 5 p. m. Antes del desayuno, Gough recibió la agradable no­ticia de que una petición del III CE a su vecino del sur, el 6.° Ejército francés, había obtenido la cesión de Pétain de la 125 Div. a la zona de Butler a tra ­vés de Chauny.

A las 10.45 a. m. Gough ordenó oficialmente a sus jefes de CE que hicieran retiradas de combate hacia la Zona de Retaguardia si la presión lo hacía necesario, pero señalaba que debían m antenerse en contacto m utuo y con los ejércitos de los flancos. Hacia mediodía, Maxse del X V III CE ordenó p re ­m aturam ente a su U. que retrocediera nueve mi­llas hacia el Somme, ya que veía la «Línea Verde» como una línea simbólica de aviso ya amenazada por la presión alem ana de la m añana sobre la 36 Div. Esta U. estaba situada en un peligroso saliente en el saliente del canal de San Quintín, a causa del em puje de la retirada de Butler duran te la noche tras el canal de Crozat.

El XIX CE de Watts, reforzado con la 1.a Div. de Caballería, se enfrentó a los renovados ataques del ala izquierda de Marwitz, com enzando con un bom ­bardeo de tres horas. La 66 Div. británica tuvo que abandonar com batiendo su Zona de Combate; sie­te de sus destacamentos salieron de sus asedios. Seis carros y húsares desm ontados contraatacaron al m ediodía, aliviando de este modo tem poralm ente la presión, pero a las 12.45 p. m. Watts ordenó que sus dos Divs. originales retrocedieran detrás de la 50 Div, cavando ahora frenéticam ente a lo largo de ocho millas de la «Línea Verde» en la Zona de Reta­guardia.

Seis de las Divs. de Marwitz renovaron el asalto sobre el VII CE del TG Sir W alter Congreve. La ya duram ente golpeada 16 Div. Irlandesa rechazó cin­co asaltos en masa en cinco horas; parece ser que el X X III CE de reserva de von Kathen, en sus an­sias por capturar objetivos no tomados el prim er día, descartando tácticas de infiltración. Su 79 Div. de reserva se unió a la 183 para in tentar arrebatar el pueblo «bloqueador de avances» de EpehyPeizié-

re a una brigada Leicester de la 21 Div. Este punto fuerte no cayó hasta la 1 p. m., y sólo quince de los 200 hom bres de la retaguardia británica fueron en ­contrados sin heridas.

H utier lanzó seis Divs. contra la precaria línea del canal de Crozat. El fuego de m ortero y am etralla­dora cubría los intentos alemanes de cruzar este obstáculo de 20-30 yardas; hicieron la prim era ru p ­tu ra al m ediodía en T ergnier, asegurando una ca­beza de puente considerable alrededor de las 7.30 p. m. Seis millas al norte, en Jussy, la 1.a Div. Báva- ra fracasó tres veces al in tentar cruzar. La 2.a Div. regular de Cab. intentó un contrafuerte: no sólo im pidieron sus 18 piezas de 13 libras que el Grup- pe del General der Infanterie F reiherr von Gayl si­guiera avanzando, sino que su jefe sustituyó al l .er general británico en sucumbir al esfuerzo, el GOC (Gral. al M ando) de la 14 Div.

El avance de Below contra Byng fue bastante más corto que lo deseado por Ludendorff. La 17 Div. frustró todos los ataques del XI CE sobre el salien­te de Flesquiéres. Al norte, el IV CE acudió con ra­pidez a taponar una brecha de seis millas que co­m enzaba justo al sur de la carretera Albert-Cam- brai. U na Bri. de Art. de campaña (24 cañones) dis­paró 20.600 proyectiles sobre objetivos al descu­bierto, destruyendo una batería alemana, y lanzó hum o para un contraataque por la tarde a cargo de25 carros Mark IV. Este gran golpe acorazado de la batalla, que cayó sobre la 24 Div. de reserva ale­mana, taponó efectivamente la brecha en el centro del 3.er Ejército y, aunque 16 carros no pudieron volver, lo obtenido por Below duran te el día había sido sólo una milla y media, 5.541 prisioneros y 48 cañones.

El VI CE de H aldane había sido capaz de re le­var a la castigada 59 Div. por la 40, y esta U. luchó en la Zona de Combate la mayor parte del día, has­ta verse forzada a retroceder hasta la «Línea V er­de» por la retirada del IV CE y el ataque nocturno de la 2.a Div. de reserva de la G uardia al pueblo de Mory. Aún así, menos de 300 supervivientes de la 177 Bri. (59a Div.) disputaron su posesión hasta las prim eras horas. La 34 Div. seguía apegándose a la retaguardia de su Zona de Combate, habiendo p e r­dido la Colina H enin en favor de la 6.a Div. bávara, que más tarde sufrió penosam ente a causa de su propia Art. d isparando sobre esa melé. La fuerte­m ente asentada 3.a Div. aguantó en su bastión de Arras en la Zona Avanzada, aunque la 15 Div. es­cocesa evacuó voluntariam ente hacia el norte la co­lina Monchy, ahora dom inada por el enemigo.

A las 6.30 p. m. Gough visitó a Byng en Albert,

Page 50: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf
Page 51: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf
Page 52: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Situación a 23 de marzo de 1918

Page 53: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

para asegurase de que sus ejércitos seguían en con­tacto, o rdenando este último al V CE retroceder den tro de su saliente y a una Bri. hacer de enlace de su 47 Div. con la 9.a de Gough. Haig, por p ri­m era vez, intervino realm ente en la batalla, al ver que la BEF estaba en peligro de ser dividida. A las11.30 p. m. el CG ordenó a Byng que siguiera en contacto con Gough, aunque esto significara re tro ­ceder hasta la línea del río Tortille con Péronne y al oeste de la «Línea Verde». A la derecha del lími­te de los ejércitos británicos, un em prendedor jefe de Rgto. alemán de la 27 Div. había ocupado Fins a la caída de la noche, am enazando con ello al sa­liente de Flesquiéres desde el sur.

Las tropas francesas habían em pezado a incidir en la zona de combate, enviando la 125 Div. un Rgto. brevem ente a la acción, m ientras que las Divs. 1.a de Cab. y 9.a de Inf. se aproxim aron desde p u n ­tos de desembarco cerca de Noyon. El V CE del Gral. Pellé estaba tratando relevar al III CE de But- ler a la noche siguiente.

La contribución más im portante de la fuerza aé­rea a este día se produjo por parte de un bom bar­dero nocturno alemán que alcanzó el CG del XIX CE hacia las 9 p. m.; Congreve no supo de la reti­rada de sus vecinos duran te otras siete horas. Aun­que diecisiete SQNs del RFC tuvieron que cambiar de base, cuatro habían salido para realizar ataques a tierra, a m enudo a 65 pies, y la fuerza aérea ale­mana perdió tres aviones al hacerlo. Las pérdidas británicas fueron de 30 aviones (causas diferentes;19 según los alemanes) frente a 31 derribos decla­rados (los alemanes adm iten 11 pérdidas) en todo el frente. El bom bardeo nocturno británico (811 bombas ligeras) destruyó al menos dos depósitos de municiones.

23 de marzo: Ludendorff amplía sus objetivos

La tercera m añana de la ofensiva de L udendorff vio como su creador realizaba una cambio radical de estrategia, tras estudiar los resultados del día an terio r y recibir las prim eras noticias del día, in­cluyendo informes aéreos de la re tirada masiva de

A La situación el 23 de marzo de 1918. La 3.° mañana encontró al 5° Ejército de Gough aferrándose precariamente a la línea del Canal Somme-Crozart, acudiendo las primeras tropas

francesas desde el Sur. Se estaba produciendo una peligrosa brecha entre el Vil CE de Gough y el VCE de Byng, y el Ejército de este último había sido finalmente obligado a retirarse de la mayor parte de su Zona de Combate.

la BEF hacia el oeste. A las 9.30 a. m. estableció los objetivos de sus ejércitos una vez alcanzada la línea B apaum e-Péronne-H am : Below atacaría con vigor hacia Arras-St.Pol, es decir, envolviendo Arras des­de el oeste; Marwitz avanzaría sobre M iraum ont- Lihons, es decir, «a ambos lados del Somme»; y H u tier m archaría sobre Chaulnes-N oyon, envian­do fuertes fuerzas a través del Somme por Ham. En otras palabras, L udendorff ordenó a sus fuer­zas ejes divergentes de avance, que no estaban en el plan original, ya que creía que estaba com enzan­do la ru p tu ra y explotación contra los derrotados británicos.

Comunicó sus intenciones a los JEM del Prínci­pe H eredero esa tarde, explicando que era «para separar a los franceses y británicos m ediante un rá ­pido avance a ambos lados del Somme» y habló ale­grem ente de em pujar a los británicos hacia el m ar con los ejércitos 17 y 6.°, y envolviendo a todo el frente de la BEF. Además de esto, H utier alcanza­ría la línea Amiens-M ontdidier-Noyon y avanzaría hacia el suroeste contra los franceses. Se trataba de tres objetivos estratégicos muy diferentes.

En particular, el ejército central más débil de Marwitz ya no sería reforzado por el ala derecha de H utier, si bien seguía teniendo que presionar a ca­ballo del Somme hacia Amiens y seguir en contacto con H utier y Below. El victorioso H utier, que ya ha­bía recibido tres Divs. más, recibiría dos más del 7." Ejército en su flanco sur. Otros han argum entado que la escalada sin precedente de éxitos en un fren­te de 50 millas garantizaba esos objetivos tan gran­diosos y oportunistas, pero incluso el progreso de H utier dependía de los hombres, vehículos y caba­llos que presionaban sin descanso hacia delante alo largo de las atestadas carreteras. El Káiser no te­nía dudas: volvió a Berlín proclam ando que los in­gleses estaban totalm ente derrotados.

La persistente neblina apareció a las 11.30 a. m. H utier ya había logrado hacer cruzar a siete Divs. a través del canal de Crozat. El 1." contraataque francés, al am anecer, por parte de unos 3.000 in­fantes con sólo 35 cartuchos por hom bre, llegó a las afueras de T ergnier y fracasó al acabarse la m uni­ción. Los británicos y franceses fueron obligados a retroceder en fiero combate a través de una gran se­rie de bosques, hasta 2,5 millas al suroeste de la lí­nea del canal. Hacia mitad de la tarde coraceros desm ontados de la 1.a Div. Desmontada de Cab. es­taban m anteniendo la línea aliada, y antes de caer la noche fuerzas seleccionadas de choque del III CE británico se encontraban en reserva, con excepción de la 14 «División».

Page 54: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Armones y carros de transporte de munición pesada de artillería del 5° Ejército británico atraviesan un campo arado, para bordear un camión incendiado cerca de Nesle, al oeste del Somme, el 23 de marzo. El camión arrastra un obús de 6” y 26 quintales enganchado a él. Una Bia. de cualquier tipo de Art. poseía doce carros de servicio general (GS); este transporta forraje. Estos vehículos seguramente están apoyando a parte de los 51 cañones pesados del XVIII CE que entraron en acción ese día, encontrándose dos Bris. pesadas (Rgto.) al noreste de Nesle en apoyo de la 20 Div. (IWM Q10803)

AObuses de 210 mm de la Art. a pie del 18 Ejército alemán en acción cerca de Nesle. El ejército de Hutier inició la batalla con ocho de estas poderosas piezas, que disparaban un proyectil del modelo 1916 mejorado de 1.841 libras a más de 5,8 millas, y hasta a dos disparos/minuto. (IWM Q55242)

4 Hombres de la 20 Div. (ligera) británica levantan barricadas en Nesle, el 23 de marzo. El pueblo, hasta ese momento el CG del 5° Ejército, fue también el CG del XVIII CE de Maxse hasta su traslado matutino a Roye. Nesle cayó en realidad sobre las 4 p.m. del día 25, cuando la recién llegada y escasa de proyectiles 22 Div. francesa cedió ante el mucho más fuerte XXV CE de reserva alemán, que empleó sus Divs. 206 y 50. (IWM Q10800)

Page 55: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Un tractor-oruga de la Real Artillería de Guarnición arrastra un cañón pesado camuflado de 6” británico hacia retaguardia cerca de Bapaume, el 23 de marzo. La BEF tenía 100 cañones de 6 ” para Bia. de cuatro cañones el 2 de marzo de 1918 y perdió al menos nueve, capturadas por Ludendorff en sus ofensivas. Otros 69 se enviaron a Francia en marzo y abril. (TWM Q8608)

► Evacuación del 5° Ejército de Péronne, el 23 de marzo. Se ha incendiado un edificio-almacén de la cantina de la Fuerza Expedicionaria y cargados soldados están salvando artículos. Ese mismo día un tren-hospital evacuaba heridos de Péronne mientras ésta ardía y la policía militar evitaba los atascos. La 16 Div. (irlandesa) se retiró a través de la parte sur del pueblo ribereño que la 4." Div. de la Guardia alemana recuperó tras un año en manos de la BEF. (IWM Q10806)

► Heridos del 3." Ejército británico se descargan de sus armas y equipos mientras hacen cola en un puesto avanzado de socorro (ADS) cerca de Bapaume, el 23 de marzo. Normalmente, al menos a dos millas del frente, los pacientes llegaban en ambidancia, camilla o andando como heridos del puesto de socorro regimental. El paso siguiente era el traslado al puesto principal de socorro de CE. (IWM Q8650)

Page 56: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Un infante del 251 Rgto. francés, con chaleco antibalas «Lanciers».

T Un granadero británico Mills de 1917 con peto protector Chemico. Estos especialistas en la guerra de trincheras se emplearon en los largos meses invernales antes de la Kaiserschlacht, en especial para montar frecuentes ataques nocturnos dirigidos a identificar Us. alemanas en la línea enemiga.

▼ Un Stosstrupp (soldado de asalto) alemán con peto protector. Antes de la Kaiserschlacht, desde el 8 de diciembre de 1917, los alemanes realizaron aprox. 225 ataques a trincheras obteniendo la identificación de 62 Us., en especial contra el saliente de Ypres y el frente del 3." Ejército.

Page 57: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Artilleros de la Real Artillería de Guarnición del 3." Ejército descargan proyectiles de obuses de 12” de un ferrocarril ligero de 60 cm cerca de Bapaume, el 23 de marzo.El 3." Ejército tenía quince obuses de 12” montados sobre raíles (el 5° Ejército tenía diez). Los obuses de 12” de la BEF dispararon 9.030 proyectiles durante la fase de combate. Los avances primaverales de Ludendorff, con una profundidad sin precedentes, capturaron seis de estos cañones de apoyo desde retaguardia.(IWM Q8610)

Las cuatro Div. y los 264 cañones de Maxse ha­bían avanzado toda la noche, pero la línea del río/canal del Somme no suponía un refugio segu­ro. La cabeza de puente de Ham y su Bri. de la 30 Div. sucumbió a las 10 a. m. ante un ataque de in­filtración por parte de la Div. 231 alem ana de 2.a lí­nea. Al este, la 5.a Div. de reserva de la G uardia atra­vesó bajo el fuego un puente no volado de ferro­carril. La respuesta de Maxse sólo pudo hacerse con 200 hom bres de seis Us. de la 61 Div., que pronto se vieron detenidos por el fuego de las am etralla­doras alemanas. A la caída de la noche, el flanco de­recho del XVIII CE se encontraba tres millas más arriba de su supuestam ente línea fija.

La defensa del XIX CE se vio reforzada por la lle­gada de la veterana 8.a Div. (regular), del 2." Ejér­cito de Flandes, para defender ocho millas del Som­me. Ante de esto las Div. 50 y 24 rom pieron con éxi­to el contacto del este del río, si bien la 1 ,a Div. de Cab. perdió caballos, y cinco carros se abandona­ron al no ser capaces de cruzar ese obstáculo. H a­cia las 9 p. m. setenta hom bres de la 8.a div. expul­saron a ciento veinte alemanes de una cabeza de puente en Pargny, capturando cuatro am etrallado­ras; un intento similar en St.Christ también fue re ­chazado.

El VII CE y los doscientos sesenta y tres cañones de Congreve llegaron el 23 de marzo a su «Línea Verde» pero pronto se vieron envueltos en la com­pleja tarea de defender, evacuar y cruzar la zona de Péronne. La Art. cubría con frecuencia la re tira­da, después de que la desgastada Inf. hubiese re ­trocedido apresuradam ente, como en el m onte San Q uintín alrededor de las 4 p. m. cuando la 39 Div.

abandonó esta vital altiplanicie que dom inaba la ciudad. Las pérdidas de ese día incluyeron 31 ca­ñones y cuando finalizó, el VII CE se había dividi­do en cuatro partes por el Somme. Lo que era aún peor, se había abierto una brecha de al menos tres mil yardas en tre la 9.a Div. de Congreve y el 3.er Ejército.

La 3.a orden de Byng al V CE en el saliente de Flesquiéres había vaciado por fin este sector en una orgía de depósitos incendiados, pero separándose divergentem ente de Gough, y en la confusión la 74 Div. había sido incapaz de ejecutar un papel de en ­lace. El IV CE de H arper retrocedió bastante m e­nos, cubierto por su destructiva Art. en dos pode­rosos grupos y finalizando el día aún en la «Línea Verde», aunque se perdieron cinco Bóns. bajo los ataques de Below. El VI CE de Haldane hizo en realidad tres contraataques que retom aron Mory duran te unas siete horas y perm aneció en la «Línea Verde» gracias en parte a las dificultades del TG Al- brecht por avanzar con sus cañones pesados.

Esa tarde Haig se puso en m archa para visitar a Gough en Villers-Brettoneux, el CG del 5.a Ejérci­to. Sabiendo que 45 Divs. alemanas se encontraban ahora en el frente de 47 del ejército, comunicó bas­tante obviamente a su jefe que eran precisos más hombres. A las 4 p. m. Pétain visitó a Haig en Dury (CG avanzado, al sur de Amiens) y se encontró con la petición de que veinte Div. francesas se concen­traran alrededor de Amiens. El francés quizás esta­ba demasiado asom brado para contestar, habiendo ya inform ado que Fayolle estaba llevando trece Div. a la derecha de Gough, no sólo las seis reservadas. Se acordó que Fayolle asumiría el m ando del 5.°

Page 58: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Ejército y lo llevaría al Somme en un plazo de 30 horas.

Pétain, esperando un ataque alemán en Cham ­pagne el día 26 o antes, estaba tan descompuesto que le dijo a Clemenceau duran te la cena que Lu­dendorff vencería por completo a los aliados. M ien­tras tanto, la im perturbabilidad de Haig se vio sa­cudida lo suficiente tras esa reunión en el CG como para enviar una orden a las 5 p. m. exigiendo que la línea del Somme se m antuviera «a cualquier p re­cio», aunque de hecho su integridad ya estaba que­

brantada. De una forma más realista, a las 7.30 p. m. el mariscal de campo se reunió con sus jefes de ejército que aún no habían entrado en combate. El Gral. Sir H erbert Plum er aprobó sin egoísmo disponer de tres Divs. más, todas ellas australianas de alta calidad. Aparte de esto, Byng había o rdena­do que se fortificara una «Línea Púrpura» a re ta­guardia, a lo largo del antiguo sector del Ancre de 1916.

El combate aéreo había legado a un nuevo hito. El RFC perdió 32 aviones (24 según los alemanes)

▲ La Art. del 18 Ejército alemán avanza bajando por una carretera hundida ante Ham (en el Somme), sobre el 23 de marzo. Los armones de los cañones están adelantando a una columna de transportes sobre ruedas. Es visible la delgadez y el pequeño tamaño de los caballos. (IWM Q29951)

<Inf. del XVIII CE británico se alinea en una pista del Somme en el sector de Nesle, el 24 de marzo. La abadía del siglo XII de Nesle casi no puede verse en la neblina matutina, sobre el horizonte a la derecha. Los soldados podrían ser de la 184 Bri. (61 Div.), en reserva al suroeste de la ciudad en el sector de la 20 Div. (IWM (¿10786)

Page 59: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Un alegre sargento de los EE.UU., del 6.° de Ingenieros en Roye, el 24 de marzo, sentado sobre una carga de caballetes de apoyo. Al día siguiente su U. se incorporó para luchar como Inf. en la Fuerza de Carey, en la línea defensiva de Amiens. (IWM Q10791)

en la zona de combate y anunció 36 derribos ale­manes (que adm itían 11), un dato que reflejaba al menos la explicación alem ana de su cooperación con el ejército y las dificultades en los vuelos de combate, así como la pérdida del hijo adoptivo de Ludendorff. Las tropas terrestres británicas fueron responsables de al menos dos aviones alemanes, y el XIX CE en especial se benefició del fuego de la Art. AA.

24 de marzo: de vuelta al antiguo campo de batalla del Somme

El Domingo de Ramos la región del Somme aún se encontró bajo una espesa niebla hasta las 11 a. m. Esto no retrasó las barreras o los ataques de Inf. de H utier con trece Divs. Desde las 6 a. m. tres de ellas chocaron con la muy revuelta línea franco-británi- ca en la zona del III CE, ahora bajo el m ando del Gral. Pellé. La 1.a Div. de Cab. Desm ontada france­sa fue expulsada a mediodía, a m enudo sin m uni­ción, de media docena de pueblos, y su retirada lle­vó hacia atrás a las Divs. 9.a y 125 en cada flanco. Los supervivientes de la 58 Div. británica al norte del Oise debieron estar muy aliviados al retirarse esa tarde con esta última U. al sur del río. Para de­cirlo todo, la 9.a Div. del GD Maurice Gamelin re ­trocedió cinco millas, aunque a una línea más com­pacta que había ocupado la 55 Div.

Los autores británicos tienden a infravalorar la participación francesa y a resaltar la ironía de las Us. del 5." Ejército cubriendo a las tropas que se su­

ponía debían relevarles, pero debe recordarse que sus aliados estaban en trando en una batalla que se estaba perdiendo tras muchas horas en camiones atestados, con tiempo para exam inar la situación. De hecho, Pellé fue capaz de llevar a la reserva a la14 Div. y a tres Bri. de Cab., quedándose ciento cin­cuenta y ocho piezas de Art. británicas en apoyo de los aún no estrenarse «poilus». Era tal la confusión en esta zona, ique el príncipe heredero Rupprecht fue inform ado la noche anterior al 23 de que se ha­bía identificado a la 26 Div. de los EE.UU. así como a los franceses!

Maxse ejerció un control más firme de su com­bate de CE que el ahora en gran parte redundante Butler, habiendo comunicado al Gral. Robillot que el X V III CE no debería ser relevado de forma frag­m entada por las Divs. francesas 22 y 62, que esta­ban llegando con lentitud. Siete de las Divs. de H u­tier atacaron, destruyendo las dos de la cabeza de puente de Ham dos Bóns. de la 36 Div. (Ulster), para finalmente ser detenidos m om entáneam ente por una carga de caballería en Villeselve. En ella, después de las 2 p. m., 150 soldados de la 6.'' Bri. de Cab. galoparon 600 yardas, a pesar del fuego de am etralladora desde la izquierda, y m ataron a sa­blazos a 88 guardias de la 5.a Div. de la Guardia, ha­ciendo 107 prisioneros y tres am etralladoras, con 73 bajas propias. La endurecida Inf. irlandesa re­tuvo el pueblo duran te otras dos horas. A la izquier­da, la aún no atacada 20 Div. que guarnecía el Som­me se enfrentó a una barrera de 30 minutos diri­gida desde el aire y a catorce Bóns. alemanes de re ­

Page 60: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

fresco (seis de ellos «Stosstruppen»), Tras muchas pequeñas acciones, los defensores retrocedieron unas dos millas hacia la línea del canal du N ord que cubría Nesle.

Un nuevo CE alemán, el XXV de reserva del Ge­neral d er Infanterie von Winckler, dirigió con ha­bilidad el paso de las Divs. de la Guardia 28 y 1.a en Bethencourt a través de puentes peatonales, a partir de las 4 a. m. A las 5 p. m. esta cabeza de puente incluía Pargny, a pesar de los mejores es­fuerzos de la 8.a Div. del GD William H eneker con apoyo aéreo, creando con ello una cuña en tre Watts y Maxse que abrió una brecha de una milla. El XIX CE estaba siendo expulsado del Somme a pesar de que tan sólo otro paso alemán en su frente de 8 mi­llas consiguiera una posición, al sur de Péronne. Al saber de esta penetración a las 4.30 p. m., Gough planeó un audaz contragolpe aliado convergente para la m añana siguiente, em pleando cuatro de las Bri. de Maxse y la nueva 22 Div. francesa, con el fin de recuperar la línea del Somme en Pargny. Fa- yolle y Robillot aprobaron este plan.

La situación británica era ese día m ucho peor al norte del Somme, aunque Congreve había recupe­rado el contacto con el 3.er Ejército. Su CE retroce­dió hasta seis millas a pesar de una orden verbal, con la magnífica resistencia final de la Bri. surafri- cana de 500 hombres. Rodeada al norte del bosque de M anieres, combatió duran te casi ocho horas hasta el último cartucho contra las Divs. de reserva alemanas 199 y 9.a. El GB F.S.Dawson y menos de cien surafricanos fueron capturados hacia las 5 p. m., pero supieron que el avance de Marwitz se había retrasado duran te más de siete horas, a cau­sa de un atasco de tráfico al este de Bouchavesnes. Las otras dos Bris. de la 9.a Div. disponían de esca­samente un Bón. en personal, m ientras que la 21 «División» se retiró ante la fuerza de H unt (8 Bón.), una de las varias fuerzas ad hoc que la BEF había te­nido que organizar desde el día 23. Tan sólo la lle­gada de la 35 Div. de Flandes y el traslado de 1.000 soldados m ontados de la 1.a Div. de Cab. atravesan­do el río, dio tropas a Congreve para dotar ahora a una línea den tro del antiguo campo de batalla del Somme de 1916.

Los dos CE sureños de Byng también habían re ­trocedido, en una gran y caótica retirada hacia el noroeste, por brigadas, al sur de Bapaum e y de su depósito de municiones en llamas. A las 2.30 p. m. el XXXIX CE del General der Infanterie von Stáb había penetrado vigorosamente por una brecha, ahora de cuatro millas, en tre los ejércitos británi­cos, avanzando a veces en paralelo. Fanshawe p e r­

dió el contacto con dos de sus Divs., e incluso Grals. de brigada a caballo (dos de los cuales fueron m uer­tos o capturados en este proceso) se vieron forza­dos a encontrar sus Us. en los campos de cráteres de 1916. Hasta bien en trada la noche del 25, los dos ejércitos británicos no recuperaron un leve con­tacto.

A las 7 p. m. H arper ordenó a su IV CE que se retirara, después de que el VI CE de reserva del G eneralleutnant von dem Borne rom piera final­m ente la «Línea Verde». La retaguardia de la 41 Div. fue cubierta por un contraataque de seis carros; las Divs. 19 y 51 se cubrieron m utuam ente al retirarse por un Bapaum e bom bardeado d u ra ­mente, pero 60 cañones bloquearon Achiet-le-Petit duran te la noche hacia el oeste. A fortunadam ente para estas desgastadas tropas la 42 Div., transpor­tada en autobuses y con 16.287 hombres, había re ­cibido la orden de acudir en su ayuda. El VI CE, con la Div. de guardias aún en la Zona de Comba­te, sólo tuvo que retrasar su derecha para ponerse a la altura de H arper, a pesar de furiosos y costo­sos ataques o parte de seis de las Divs. de Below.

A las 8 p. m. Haig visitó a Byng para resaltar el enlace de Arras y decirle que las reservas estaban en camino. Tres horas más tarde Pétain hizo una se­gunda visita a su colega en Dury. Gough debía po ­nerse bajo el amplio control de Fayolle, ahora que las tropas francesas ya ocupaban 14,5 millas del frente de 36 millas del 5.“ Ejército. Pétain encontró a Haig «muy deprim ido, casi desequilibrado y bas­tante ansioso» y volvió a citar sus tem ores de que el golpe principal alemán se diera en Cham pagne. Después vino el bombazo, le había ordenado esa tarde a Fayolle que cubriera París retrocediendo a Beauvais si el avance del príncipe heredero alemán seguía hacia el suroeste. Después repartió la orden escrita del día a sus GE., que subrayaba el m ante­nim iento de la integridad del Ejército francés y m encionaba sólo de pasada su relación con la BEF. A la pregunta directa de Haig de si quería decir que abandonaba el flanco derecho de la BEF, el Gral. francés asintió con la cabeza y añadió, «Es lo único que puede hacerse, si el enemigo fuerza a los alia­dos a retroceder aún más».

Haig retrocedió hasta M ontreuil, seguram ente muy afectado por las implicaciones de la separación aliada. A las 3 a. m. envió un cable y luego telefo­neó a la Oficina de la G uerra pidiendo u rgen te­m ente al Gral. Wilson (CIGS) y a lord Milner que cruzaran el Canal. Y, avisó que, si «el Gral. Foch o algún otro general determ inado que combatiría» no recibía «el control suprem o de las operaciones», la

Page 61: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

BEF «tendría que retroceder lentam ente comba­tiendo y cubriendo los puertos del Canal». Si Pé­tain se había creído erróneam ente que Haig quería decir que se retiraría hacia el norte, seguram ente nunca hubiese podido soñar que su colega fuese a p roponer tan entusiástica y urgentem ente el ascen­so de Foch, el Cte. en jefe en 1914-16 del sector norte aliado. Además de esto, Haig escribió en ton­ces personalm ente a Clemenceau y Foch, dep loran­do la amenaza de C ham pagne y urgiendo a que veinte Divs. francesas se concentraran en las cerca­nías del Somme.

En el aire, los franceses habían hecho notar su presencia. Oleadas de veinte a ochenta bom barde­ros de la reserva de aviación intervinieron en Picar­día, atacando en especial los transportes hipomóvi- les de H utier en operaciones continuadas el día 29. Los combates anglo-alemanes dieron un saldo res­pectivo de bajas de cincuenta y dos (23 según los alemanes) y cuarenta y un (9 según los alemanes) aviones. Los alem anes b o m b ard earo n A lbert, Amiens y su enlace de ferrocarril en Longueau, des­truyendo allí un tren de municiones que in terrum ­pió el tráfico duran te al menos diez horas.

25 de marzo: El 3." Ejército retrocede vacilante

El contragolpe de Gough fracasó con la creciente neblina, a causa de los retrasos de Robillot y un asal­to alemán a las 8 a. m. por parte de las seis Divs. más avanzadas en la cabeza de puente de Nesle- Ham. Estas hicieron retroceder a las dos Divs. fran­cesas unas 2,5 millas y desde Nesle en menos de ocho horas, forzando a los más tenaces británicos a hacer lo mismo. Al atardecer Robillot tuvo que re ­troceder otras tres millas hasta una línea protegida por caballería y vehículos acorazados que cubrían

tan sólo Roye. Desde esta zona Maxse marchó pol­la noche lleno de fuerzas hacia el noroeste con los4.000 infantes supervivientes de sus cuatro Divs., con objeto de restablecer la línea entre el CE fran­cés y el XIX. Baste para com entar el «estado lasti­moso» de su Inf. que los dos jefes divisionarios fran­ceses fueron sustituidos antes de cuatro días. Sin

► Un cabo habilitado del 1/6° Bón., de los Gordon Highlanders (Banff y Donside), 152 Bri. de la 51 Div. Highland (Fuerza Territorial, 1.a Línea) en orden de marcha. Las tiras de la manga indican el núm. de Bón. y la Bri. (la superior) mediante el color. Una Cía. de esta U. defendió la derecha de la zona avanzada de la 152 Bri. el 21 de marzo, ayudando a rechazar a la 24 Div. de Reserva

alemana dentro y fuera de Boursies, a pesar de un ametrallamiento al mediodía por parte de 17 aviones. Otra Cía. estuvo en el combate por Doignies en la zona de combate. El Bón. luchó justo detrás de la «Línea Verde» el 23-4 de marzo, pasando a una Bri. de la 19 Div. Se retiró pasado Bapaume el día 24 y combatió cuerpo a cuerpo en el bosque de Loupart durante una hora, el 25 de marzo.

Page 62: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

M Un carro británico Mark V del 2° Bón. (II Bri. de carros) del CE acorazado, avanza por Aveluy en el Ancre (al norte de Albert) en el sector del 3 Ejército, el 25 de marzo. Un pelotón de Inf. ligera al mando de un cabo asimilado se toma un descanso en el borde de la carretera. Esa tarde entraron en acción otros carros en la zona del 3." Ejército, y el 2° Bón. ya había realizado el mayor de esos ataques de la batalla, el día 22. (IWM Q8639)

A Una Bia. Mark II de 60 libras del 3." Ejército británico (V CE) en acción cerca de La Boiselle (en la carreteraAlbert-Bapaume), en el antiguo campo de batalla del Somme, el 25 de marzo. Este cañón pesado de campaña de 5 ” de calibre disparaba un proyectil de 60 libras a 12.300 yardas (1 millas), hasta a dos disparos/minuto. El 3." Ejército comenzó la batalla con 96 de estos cañones en Bia. de cuatro cañones. El día 25 ayudaron a infligir severas pérdidas sobre los asaltos en masa de cinco Divs. alemanas.

4 In f de la 22 Div. francesa con supervivientes de la 20 Div. británica manejan una línea de pozos de tirador recién cavados en el sector de Nesle, el 25 de marzo. El fusil francés Lebel pesaba más de una libra más que el Lee-Enfield de cargador corto, llevaba ocho cartuchos en lugar de diez, y su visor alcanzaba tan solo un máx. de 2.187 yardas en lugar de 2.800. (IWM (¿10810)

Page 63: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

embargo, Robillot retuvo la Art. de Maxse, como hizo Pellé con la de Butler a lrededor de Noyon.

Esta zona del III CE también había quedado bajo el control del 3er Ejército francés de H um bert, que tenía cuatro Divs. de Inf. y una de Cab. desm onta­da defendiendo hacia el oeste, forzando al V CE de Pélle, bien al sur de esa ciudad, a retroceder ocho millas por el día. El ala derecha de Pélle tuvo que retirarse cruzando el Oise a las 5 p. m.

Irónicam ente, ciento setenta británicos en reser­va (54 Bri. de la 18 Div.) contraatacaron a las 5.30 p. m., reconquistaron el pueblo de Baboeufen treinta minutos, m ataron o capturaron a doscientos treinta alemanes y diez ametralladoras, con objeto de salvar una Bia. francesa, actuando después como retaguardia hasta el amanecer. La 1.a Div. de Cab. Desmontada del Gral. Brecard había sufrido mil trescientas cuarenta y tres bajas en tres días.

El XIX CE de Watts se encontraba ahora solo en un frente de trece millas a lo largo del Somme, a una milla del 3." Ejército (que ahora incluía al VII CE al norte del Somme) y también de Maxse. El ata­que alemán de las 8 a. m. se tomó durante un tiem ­po como alemán, pero aún necesitó tres horas para tom ar dos pueblos más a las Divs. 8.a y 24. La 208 Div. alem ana necesitó am etralladoras en masa, ochenta cañones y cuatro intentos para forzar el Somme por el puente de Eterpigny, cruzando tam ­bién en Biaches al oeste de Péronne. Hasta las 4.15 p. m. el TG Watts no ordenó una retirada de cua­tro millas para el anochecer, hasta su parcialm ente p reparada segunda línea. Esto se logró el 26 al am a­necer, pero se perdieron ocho cañones bajo el fue­go de ametralladoras, y el 2." Rgto. Middlesex fue destruido en un 75%, en una tenaz defensa de doce horas del puente de Brie contra la 19 Div. alema­na. Otros dos Bóns. de la 8.a Div. se abrieron paso a través del pueblo de Misery a punta de bayoneta.

D urante la noche el XIX CE, con sus seis Divs. de escasamente 1.000 infantes cada una, se había convertido en la única U. en línea de Gough en un frente de trece millas con una brecha de tres millas de los franceses y cuatro millas por delante del 3." Ejército.

La U. de Byng tuvo otro día y otra noche horro ­rosos. El recién incluido VII CE fue la excepción gracias sobre todo a la «fresca» Div. 35, que reforzó una línea en el antiguo campo de batalla del Som­me. Resistió cinco ataques distintos que implicaron a cinco de las Divs. de Marwitz, sufriendo todas ellas fuertes pérdidas de oficiales. El V CE de Fansha- we, ahora a diecisiete millas de su saliente del 21 de marzo, estaba cansado, agotado y fragm entado,

desplegando tres de sus ocho Bris. sólo 1.300 hom ­bres en total. Al ser atacado por cinco Divs. alema­nas desde las prim eras luces del día, se vieron se- mi-forzadas a cruzar la carretera Albert-Bapaume a las 2 p. m. Ante los ataques alemanes en masa que sólo tenían apoyo de cañones de Inf., los británicos retrocedieron com batiendo hasta la antigua línea Ancre de 1916 a las 6 p. m. Testigos oculares con­sideraron que las tropas de von Stáb y von W atter sufrieron las mayores pérdidas de los combates p ro ­ducidos en marzo.

Below golpeó al IV CE con quince Divs. por los dos lados de Bapaume. La mayoría de los 2.200 su­pervivientes de la 19 Div. combatieron contra seis Divs. alemanas duran te más de diez horas, hasta que tuvieron que retroceder hasta la 51 Div. en y alrededor del bosque de Loupart a las 2 p. m. H ar­per ordenó que las nuevas Divs. 42 y 62 apoyaran y se acercaran, pero a las 5.15 p. m. hizo que su an­tigua U., tristem ente dism inuida, la 51 Div. High- land, retrocediera para reorganizarse tras las nue­vas formaciones. Esto dejaba al descubierto a las Div. 25 y 41 que quedaban al norte y les obligó a ponerse a la altura. Por suerte para ellos, el GOC de la 42 Div. había contraatacado de forma em pren­dedora hacia la 1 p. m. con siete carros (perdién­dose cinco en este proceso) y quizás 300 infantes del bosque de Logeast. Esta acción retrasó al VI CE de reserva de Borne duran te más de una hora. H a­cia el norte, el 1/10 Rgto. M anchester de la 42 an­cló la línea del CE en Ervillers. Con la ayuda de dos cañones Vickers que dispararon 5.000 disparos por pieza, este Bón. rechazó ocho asaltos masivos por parte de la 2.a Div. de reserva de la Guardia. El VI CE de Haldane casi no fue atacado, con excepción de la Art. y los ataques aéreos.

D urante una torm entosa noche pasada por agua, los oficiales de EM de la 19 Div. reunieron a lo lar­go de la «Línea Púrpura» más de cuatro mil reza­gados, incluyendo a seisentos de sus hombres. Una Cia. se encontró con novecientos soldados. A pesar de ello, antes de ponerse el sol, una patrulla de la 24 Div. alem ana logró cruzar el Ancre cerca de Beaum ont Hamel. Hacia las 6 p. m. Byng había te­lefoneado a sus jefes de CE, ordenando un ataque nocturno tras la línea Bray-Albert-Ancre-Puisieux- Bucquoy. Las órdenes escritas tardaron horas en llegar a los CG. y más aún en llegar a los jefes de Div. y Bri., pero se cum plieron a las 10 a. m. del día siguiente en un magnífico esfuerzo por parte de los EM. A las 9 p. m. Byng cambió la misión de la Div. neozelandesa para que apoyara al IV CE al oeste del Ancre. Aún así, seguía existiendo una bre-

Page 64: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Situación a 26 de marzo de 1918

------- 21 de marzo, línea del frente— 26 de marzo, frente británico— 26 de marzo, frente francés— — 27 de marzo a. m., frente brlt.— — 27 de marzo a. m., frente fran. - - - Línea Púrpura

0 2 4 6 8 10 Millas

Page 65: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

cha de cuatro millas y media en tre los CE. IV y V.L udendorff parece ser que se dio cuenta del

aprieto de Byng, ya que esa m añana había dado la orden verbal a Kühl de que se asegurara de que Marwitz desplazaba fuerzas al noroeste hacia Mi- raum ont, con el fin de ayudar a cruzar el Ancre. Aparte de esto, se fijó para el 28 el ataque «Mars» a caballo del Scarpe.

Continuaba la «excitación» en el alto m ando alia­do. El CIGS, el Gral. Wilson, llegó al CG a las 11 a. m. para ser inform ado de que era esencial la ayu­da francesa. Fue a ver a Pétain en Compiégne. Haig se dirigió a Abbeville esperando encontrar a Foch, Clemenceau y lord Milner a las 4 p. m. Solamente apareció el JEM de Foch, el Gral. Máxime Wygand, recibiendo una nota de Haig para el 1." ministro francés con la petición urgente de que las reservas de Pétain se concentraran al norte del Somme cer­ca de Amiens. En Com piégne, M ilner y los líderes franceses, excepto Pétain, estuvo de acuerdo con que los ejércitos aliados debían perm anecer unidos. Milner y Clemenceau decidieron reunirse con Haig a la m añana siguiente en Doullens, habiendo re­suelto el Cte. en jefe de la BEF reunirse allí con sus jefes de ejército a las 11 a. m. El último aliado tam ­bién había sido convocado. A las 10 p. m. el Gral. Pershing visitó a Pétain en Chantilly, a donde se ha­bía trasladado el CG ese mismo día, claram ente a causa del tem or a un ataque aéreo. Los norteam e­ricanos, al enterarse de las pocas reservas francesas que quedaban, ofrecieron una de sus cuatro Divs. en lugar de form ar el I CE de EE.UU., tal y como se había previsto con anterioridad.

El RFC se había dejado la piel en la batalla terres­tre, como resultado de la orden emitida a las 11.05 a. m. del GD Salmond «de bom bardear y disparar sobre todo lo que vean» en el lado alemán de la lí­nea Grevillers-M aricourt del 3." Ejército. Más de cien aviones de todo tipo, incluyendo la I Bri. del 1." Ejército, respondieron de tal m anera que las his­torias regimentales alemanas recuerdan bandadas de quince a treinta pilotos en vuelo bajo atacándo­les. Un Rgto. de élite de la 23 Div. tuvo ciento trein ­ta y tres bajas a causa de tres bombas cerca de At- hies lanzadas por el 5.a SQN (naval), que más tarde ese día pasó del sector de Gough al de Byng. Bom-

4 La situación el 26 de marzo de 1918, la batalla que heredó Foch. Había una gran cantidad de reservas aliadas en movimiento, ¿pero

llegarían a tiempo para frenar las penetraciones de Ludendorff antes de Montdidier, a lo largo del Avre, en la Península Somme-Ancre y, sobre todo, en Hébuteme?

barderos nocturnos machacaron Péronne y Bapau­me con doscientas setenta y ocho bombas. Las ope­raciones alemanas sufrieron con el avance sin p re ­cedentes que produjo dificultades en aeródrom os y en la coordinación. Los alemanes adm itieron la p é r­dida de seis aviones por ocho británicos.

26 de marzo: Foch se convierte en el «generalísimo» aliado

Gough, afectado —además de todo lo o tro — por un dolor de muelas, se había preparado para lo peor la noche anterior, o rdenando el guarneci- miento y la mejora de su «línea defensiva de Amiens» de ocho millas, cuatro millas al este de Vi- llers-Bretonneux y quince millas al este de la ciu­dad que debía proteger. Se trataba de un sistema de trincheras francés de 1915. La guarnición y los refuerzos se com ponían de dos mil novecientos hombres, fundam entalm ente diez Cias. de ingenie­ros del Ejército y quinientos ingenieros (ferrocarri­les) de los EE.UU. con noventa y dos am etrallado­ras Lewis y Vickers. El GD George Carey tomó el m ando a finales del día 26, por lo que este desta­camento de última resistencia se convirtió en la Fuerza de Carey, la más conocida de las Us. im pro­visadas de la BEF.

Los franceses estaban improvisando a mayor es­cala. Sobre el papel el 1." Ejército del Gral. Debe- ney debía acudir ahora a la izquierda de H um bert y restablecer el enlace con Gough. D urante la ma­yor parte del día dos Divs. de Cab. lucharon para cubrir a las Divs. de Inf. 35 y 56, que acudían en camiones desde M ontdidier. Tam bién tuvieron que apoyar a la desmoralizada Inf. de las Divs. 22 y 62, que cedían constantem ente terreno ante seis de las persistentes Divs. de H utier desde las 4 a. m. Roye llegó antes del mediodía, a pesar del vigoroso fue­go por parte de los carros acorazados de la Cab. francesa. Hasta 2.400 hom bres montados de la 2.a Div. de Cab. británica y del destacam ento de Har- man realizaron un contraataque desm ontado al Su­roeste de Noyon, para ayudar al grupo de Game- lin y a la muy castigada 10 Div. Excepto directa­m ente al sur de Noyon, en donde el 6.” Ejército del GD. Denis Duchéne facilitaba un potente apoyo del otro lado del Oise, una hábil infiltración alemana había hecho retroceder a los CE. de Pellé y Robi- llot de cuatro a cinco millas. Un estudio táctico fran­cés registra el único ataque de la Cab. alem ana en la Kaiserschlacht: dos ruinosam ente costosas cargas contra un Bón. de la 9.a Div.

Los XVIII y XIX CE. de Gough se encontraban

Page 66: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

ahora precisam ente en un frente de dieciocho mi­llas en la llanura de Santerre que se extiende hacia la gran curva del Somme. Las tropas de Maxse re ­trocedieron hacia el noroeste cubiertas por una he­roica retaguardia en el pueblo de Le Quesnoy. El Cte. de una Bri. y cien hom bres de otras g radua­ciones del 7." Rgto. de Inf. ligera Duque de Cron- wall con dos am etralladoras Lewis resistieron des­de el m ediodía hasta las 6.40 p. m., en que once su­pervivientes lograron escapar. Tras caer la noche, seis Bóns. de la 28 Div. alem ana lograron rom per la línea desprovista de Art. de la 36 Div., tom ando Erches, pero Maxse había redesplegado con com­

pleto éxito su CE a retaguardia, entre los CE. fran­cés y XIX.

Watts había ordenado retirarse en caso de un ata­que fuerte la noche anterior, pero debido a que sus mensajeros se perd ieron o fueron abatidos, sus ó r­denes no llegaron a las Bris. hasta dos horas y m e­dia después de que em pezara el combate, y las re ­tiradas ya se habían visto forzadas por seis Divs. al ataque desde los CE de flanco de H utier y Marwitz. La retirada de cinco millas hasta la línea selecciona­da de crestas de Rouvroy-Froissy costó al 9." Rgto. East Surrey de la 24 Div. trescientos hom bres (de los que sólo 57 salieron ilesos), pero se consiguió si

M Una posición capturada de obuses de 6 ” y 26 quintales británicos con munición espoletada y refugios protegidos con sacos terreros o telas impermeables de protección. Ludendorff capturó 147 de estas armas en sus ofensivas de 1918. El 6”, diseñado en 1915, era el obús medio y eficaz estándar de la BEF. Tenía un alcance de 11.600 yardas (6,5 millas) con un proyectil de 100 libras. El 5° Ejército comenzó con 262 de esos obuses y el 3." Ejército tenía 217. (IWM Q29971)

-4 Una barricada aliada en Roye, el 26 de marzo. Los soldados, que muestran su sangre fría a la cámara, son de una patrulla del 28 Rgto. de Cab. con lanzas de la recién llegada 5.a Div. de Cab. francesa, infantes de la 22 Div. francesa e infantes de la 20 o 61 Div. británicas. (IWM Q10825)

Page 67: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

bien de forma acelerada. El bom bardeo de los ca­ñones pesados británicos de Rainecourt provocó que un Bón. mixto evacuara el pueblo hacia las 3.30 p. m., perm itiendo que las tropas de Lüttwitz lo ocuparan y tom aran la vecina Framerville. Estos pueblos se encontraban tan sólo a pocos cientos de yardas de la nueva línea del XIX CE, ahora apoya­do por cuatrocientos cuarenta y cinco cañones. La 16 Div. seguía m anteniendo el Somme cruzando hacia el norte y dem olieron todos los puentes que quedaban, al ordenarlo Watts después de las 9 p. m. A petición de Watts Gough envió catorce am e­tralladoras (incluyendo una Bia. canadiense) y tres-

► Refugiados franceses con carros de granja cargados de muebles suben al cerro de Bouzincourt, para descender al territorio de más allá, aún sin batir, el 26 de marzo.Están adelantando a dos cañones AA de 9 quintales y 13 libras, montados sobre camiones, del 3." Ejército británico, bien situados para barrer los cielos al oeste de Albert. Podían disparar a 13.000 pies a ocho disparos/minuto o teóricamente a más de 4,5 millas en su papel de tiro horizontal. Una Bía. similar, al otro lado de San Quintín el 21 de marzo, fue la primera de estas Us. británicas en combatir en su papel terrestre. Esa tarde (26 de marzo) aviones alemanes atacaron Senlis al oeste de Bouzincourt a la luz de la luna. El grupo AA del 5°Ejército declaró haber derribado 17 aviones alemanes tan sólo en marzo. (IWM Q8637)

► Un cañón de 6” Mk VII del 3." Ejército británico en acción cerca de Hédauville, el 26 de marzo, al oeste del Ancre.Hédauville estaba en el sector del V CE y en donde estaban llegando ese día las reservas neozelandesas.Este tipo de cañón disparó 51.677 proyectiles durante el período de combate.

cientos cincuenta infantes para reforzar la vigilan­cia sobre los pasos del río.

Las órdenes nocturnas de Byng a sus seis jefes de CE (ahora con la adición del CE de Cab.) indicaban una línea de retirada desde el sureste del Ancre a través de la «Línea Púrpura», hasta pueblos muy atrás del Ancre, si la presión alem ana lo forzaba. El exhausto Congreve in terpretó esto com prensible­m ente como un permiso para retrasarse desde su expuesto sector Albert-Bray, tras una acción retar- dadora. La retirada comenzó hacia las 2.30 p. m., cubierta por nueve carros. Media hora después Congreve telefoneó a su subordinado, el GD G.M.

Page 68: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Franks, anulando la orden ya que el 3." Ejército, a causa de la Conferencia de Doullens, había dado instrucciones de que no habría ninguna retirada vo­luntaria. Franks avanzó por atestadas carreteras, encontrándose con que sus tropas ya habían re tro ­cedido más de tres millas. Hacia las 4 p. m. decidió, en M orlancourt, que era demasiado tarde para cambiar las cosas. La serie de órdenes, contraórde­nes y desórdenes continuó hasta más allá de la m e­dianoche. Solamente dejó arañar una pequeña fuerza de cuatrocientos cincuenta hom bres m onta­dos y dos mil infantes en la vital península del Som- me-Ancre, cinco millas «por detrás» del flanco n o r­te de Gough. Por suerte para él, la igual de agota­da 13 Div. alem ana se quedó en M orlancourt, m ien­tras que la 3.a Div. Australiana avanzaba a marchas forzadas hacia el sur.

El V CE de Fanshawe abandonó Albert para con­servar el terreno elevado al oeste del Ancre. Las Divs. alemanas 3.a de marines y 54 de reserva en­traron en la dañada ciudad sobre las 4.30 p. m., pero no pudo avanzar más contra la nueva 12 Div., a pesar de furiosos ataques nocturnos. Un contraa­taque británico logró hacer cincuenta prisioneros y cap tu rar trece ametralladoras. La situación em el sector del IV CE al norte era m ucho más precaria, com enzando con una brecha que aprovechó la 24

Div. (sajona) a prim eras horas para llegar a Colin- camps, tan solo a diecinueve millas al noroeste de Amiens y cuatro millas sobre el Ancre. Por desgra­cia para ellos la nueva Div. neozelandesa llegó a marchas forzadas desde el sur por batallones, en ­frentándose a la 4.a Div. desde las 11 a. m. El ata­que al mediodía de esta última con dos Bóns. sobre Colincamps pareció desbordar a los neozelandeses cuando doce carros W hippet com pletam ente nue­vos contraatacaron de reDente, sem brando el páni­co en tre trecientos infantes y capturando cuatro ametralladoras. Los alemanes vivaquearon esa no­che una milla y m edia al este de Colincamps, m ien­tras que los neozelandeses cerraron, en cuatro ata­ques sucesivos, finalmente la brecha a las 6.30 a. m., enlazando con la 4.a Bri. australiana en H ébuterne.

Esa U. había avanzado durante el m ediodía bajo el pánico del «punto por punto» creado a causa de que los poco familiares W hippets habían sido iden­tificados por patrullas montadas de artilleros britá­nicos como carros o vehículos blindados alemanes. O tra falsa identificación de los arados franceses ti­rados por tractores Ford que se vieron impedidos a atravesar el Boche, ayudó a disparar el éxodo de una colum na de transporte que se extendió hasta Doullens. La caída de H ébuterne se comunicó erró ­neam ente, pero de hecho los 1.800 supervivientes

Page 69: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

denes del ejército, desplazó su puesto de m ando (PC) quince millas al oeste; pero sus tropas sólo p e r­dieron Moyenneville tras reconquistarla una vez a un Bón. bávaro. Las Divs. 34 y 59 fueron retiradas hacia la derecha para descansar. Las tropas de Byng habían retrocedido unas 22 millas en cinco días.

En el aire, el 3.cr Ejército tuvo la ventaja de que más de doscientos cincuenta aviones del RFC (27 SQNs.) volaran en apoyo próximo, incluyendo a tres de los SQNs. del 5.a Ejército. La zona de Ba- paum e recibió la mayoría de las mil cuatrocientas treinta y siete bombas y doscientas veintiocho mil balas empleadas. Las columnas de transporte y el depósito de municiones de Poziéres sufrieron mu-

▼ El carro ligero Whippet Médium Mark A británico de 14 toneladas, diseñado a partir de diciembre de 1916 y no finalizado hasta octubre de 1917, realizó un exitoso debut de combate durante la Kaiserschlacht con el 3." Bón. del CE acorazado. Su cámara de combate ventilada y de 9 pies de altura llevaba de tres a cuatro ametralladoras Hotchkiss de 0,303” detrás de un blindaje de 5-14 mm y una tripulación de cuatro hombres. Un motor doble de 45 CV de potencia

al freno podía lograr 8,3 millas/hora, una velocidad considerable para un carro de 1916-1918, y el combustible transportado le confería una autonomía en carretera de 80 millas para un vehículo de 20 por 8 pies y 7”. Su capacidad para vadear trincheras era de 7 pies. Estas características estaban destinadas para que el Whippet explotara una brecha causada por carros pesados.

4 El caza monoplaza británico SE5a, con una envergadura del ala de 28 pies, a partir de finales de1917, dotaba a los SQNs 41, 56 y 84 del RFC durante el combate. Su motor Hispano Suiza de 200 CV le proporcionaba una velocidad de 130 millas/hora a 6.500 pies, ascendiendo a 10.000 pies en 11 minutos y con un techo operativo de 20.000 pies con una autonomía de 2,5 horas. Su armamento era una Vickers sobre el capó y una ametralladora Lewis sobre la sección central. Menos maniobrable que el Sopwith Camel, era más rápido y una plataforma artillera más estable.

de la 19 Div. rechazaron todas las penetraciones alemanas. El muy bom bardeado sector adjunto del bosque de Rossignol-Bucquory, defendido por las Divs. 62 y 42, rechazó seis ataques de la 3.a Div. de la Guardia, siendo esta última dispersada por once carros Mark IV.

El VI CE de Haldane tuvo un irritante día pla­gado de rum ores en el que el jefe de CE, por ór-

Page 70: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

La respuesta alemana a los tanques británicos. ElSturmpanzer A7V. Se construyeron una veintena de unidades

El 24 de Abril de 1918, los alemanes hicieron uso de todos sus A 7V , una decena en total, con el 2o Ejército en le pueblo de Villers-Bretonneaux. Avanzando bajo cobertura la espesa niebla matinal, los grupos de tanques operaron al principio con gran éxito, ya que la nuila visibilidad obstaculizó la acción de la artillería de campaña británica. El Grupo 1, (Panzers 526, 527, y 560) ayudó a la 228° División de Infantería a tonmr lillers-Bretonneaux al mediodía. La ilustración nmestra alPanzer 527 "Lotti" mandado por elLeutnant Vietz.e en las ruinas del pueblo.

Page 71: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

chos impactos. Cuatro Bóns. alemanes «desm ontan­do de autobuses» en la carretera Roye-Nesle fueron alcanzados por bombas. Por cincuenta aviones p er­didos (sólo doce según los alemanes), el RFC afir­ma diez derribos alemanes (cinco según ellos). Am­bos bandos bom bardearon de noche, atacando los alem anes al menos dos aeródrom os y Amiens, m ientras que los británicos lanzaron otras mil dos­cientas veintiséis bombas sobre Albert, Bapaume, Péronne, seis pueblos del campo de batalla del Somme, Ham y Cambrai.

La Conferencia de Doullens

En la m añana del día 26 los trajeados aliados se reu ­nieron en la estación de ferrocarril de Amiens, di­rigiéndose luego a Doullens. Haig ya se había reu ­nido con sus cuatro jefes de ejército a las 11 a. m.

y acordó esperar al apoyo francés al sur del Som­me. Pétain le dijo a su prim er ministro que «los ale­manes vencerán a los británicos en campo abierto; después de eso nos vencerán a nosotros». Clemen- ceau recibió un gran golpe, com unicando esto al presidente Poincaré, antes de acudir a la sesión ge­neral de mediodía. Un emotivo Pétain habló de desplazar veinticuatro Divs. a la zona de Amiens (el día antes eran quince) y de que los británicos se re ­tiraran del mismo m odo que habían hecho los ita­lianos en Caporetto. Esto enfureció incluso al fran­cófono Gral. Wilson (CIGS). Cuando intervino un enfadado Foch, Haig se ofreció a servir bajo sus ó r­denes. Los diez políticos y generales sentados a la mesa acordaron finalmente que el avance de Lu­dendorff debía ser detenido al este de Amiens. A propuesta de Haig se firmó un acuerdo franco-bri­tánico, dando a Foch la coordinación, no sólo de la inm inente batalla, sino también de todo el frente occidental y de todas las fuerzas aliadas. A las 4 p. m. Foch estaba visitando a Gough, el desafortu­nado ausente, pidiéndole que su ejército resistiera al este de Amiens. Tam bién ordenó al Gral. Fayo­lle que defendiera el terreno «pie a pie» —pero esto se interpretó libremente.

L udendorff estaba em pezando a acusar el esfuer­zo de seis días de combate, perdiendo la paciencia hacia las 7 p. m. al hablar por teléfono con el p rín ­cipe heredero R upprecht y am enazando con echar al JEM de Below, en desacuerdo con el progreso del 17 Ejército. Sus ambiguas órdenes de la tarde dirigían al 17 Ejército hacia AbbevilleDoullens-St Pol; el 2." Ejército debía tom ar Amiens y alcanzar la línea Moreuil-Airaines (diecisiete millas, al oeste- noroeste de Amiens); y el 18 Ejército debía avanzar contra los franceses sobre la línea Roye-río Avre ha­cia Tartigny - Com piégne sobre el Áisne, apoyado por el 7.” Ejército. Se trataba de objetivos muy d i­vergentes, incluso si el castigado 17 Ejército iba a te­ner la ayuda del ataque aislado «Mars» contra Arras.

A La Conferencia de Doullens, el 26 de marzo.El mariscal de campo Haig se encuentra con Georges Clemenceau, con el mismo indómito mostacho, el primer ministro de

Francia. El otro civil es el Sr. Louis Loucheur, ministro francés de Municiones, que trabajó eficazmente con su colega británico, Winston Churchill.

27 de marzo: Los franceses pierden Montdidier

Los soldados de Ludendorff vacilaban de puro ago­tam iento contra la em pecinada defensa. Sus p ro ­pias raciones se retrasaban 48 horas, ya que el trá­fico prioritario transportaba munición a través del to rturado terreno del antiguo campo de batalla del Somme. Muchos ya conocían ese terreno dem asia­do bien de 1916 y lo devastaron al año siguiente. Por lo tanto, no hay que extrañarse mucho de que los mismos frutos de la victoria estuvieran com en­zando a intoxicar y retrasar el avance. Los aparen­

Page 72: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

tem ente vencedores podían ver que los supuesta­m ente ham brientos británicos no carecían de nada en cuanto a comida, bebida y material. Los chubas­queros y las botas eran adquisiciones especialmen­te valoradas.

Mientras tanto, los británicos retrocedían hacia almacenes aún más surtidos y, a pesar de unas p é r­didas estimadas de setenta y cuatro mil seiscientos cincuenta y un hom bres (más de la mitad de ellos el 21 de marzo), se acercaban a los refuerzos y reemplazos. La 5.a Div. regular estaba llegando de Italia y, lo que era más significativo, las cuatro po­tentes Divs. de élite Anzac, algunas de las cuales lle­gaban en autobuses de Londres desde Doullens, es­taban a m ano para reforzar la línea desde Arras. Los reemplazos, incluyendo a los hom bres de p e r­miso, estaban llegando ahora a través del Canal a un ritm o de diez mil al día. El Gabinete de la G uerra había rebajado las edades mínimas de ul­tram ar en seis meses hasta dieciocho años y medio, tras tres meses de instrucción, para reun ir cincuen­ta mil reclutas, y liberó a seiscientos once mil hom ­bres de trabajar en municiones y agricultura.

Todo esto podía tener poca influencia sobre la batalla de Fayolle en el sur. Los franceses se enfren­taban a trece de las Divs. de H utier, incluyendo a cuatro descansadas y a una amplia Art., con sólo diez Divs. en línea (dos de Cab.), aunque se esta­ban acercando otras seis. Se repitió el esquema del día 26. El grupo de Gamelin, desplegado en p ro ­fundidad a lo largo del Divette, anuló todos los ata­ques del G eneralleutnant Conta con una masa de 80 cañones y disfrutando la Inf. de un buen campo de tiro.

El CE de Robillot y el nuevo VI CE eran de nue­vo los eslabones débiles. Su caballería desm ontada, sus ciclistas y carros acorazados lucharon desespe­radam ente para defender los huecos dejados por la mal abastecida Inf. y para ganar tiempo para que acudieran las Divs. 38 y 70, pero a partir de las 10 a. m. comenzó una retirada general. Esta acabó tras caer la noche a 7,5 millas a retaguardia, con Robi­llot defendiendo una línea a través de la cuenca pla­gada de pueblos del Avre y del Matz al sur de M ont­didier. En este centro de carreteras y ferrocarril en ­tró la Div. 206 alem ana hacia las 9.30 p. m. Las nue­vas Divs. francesas relevaron a la Cab. aunque la in­fatigable 5.a Div. de Cab., a pesar de su 50% de ba­jas, encontró un Bón. que am pliara la precaria lí­nea de la 56 Div. al oeste del Avre. A la 22 Div. sólo le quedaba el 30% de su Inf., y estos hom bres no fueron relevados hasta el día 29.

Fayolle se enojó al tener que elegir en tre las prio­

ridades de cubrir Amiens antes de Noyon, exigido por la visita de Foch, o cubrir Noyon antes de Amiens, según Pétain por teléfono. En cualquier caso dependía determ inantem ente de sus reservas. Los CG. de Debeney y del GD Marie de Mitry al su­roeste de M ontdidier estaban situados en la brecha de nueve millas en tre ellos y H um bert, si bien nin­gún soldado cubrió la carretera de M ontdidier has­ta las 3 a. m. del día 28.

La no reforzada línea de Gough seguía siendo casi tan larga como la de Fayolle y era defendida por nueve esqueléticas divisiones contra quince ale­manas, de las que sólo seis habían estado en prim e­ra línea el día 21. El X V III «CE» de Maxse, alejan­do gradualm ente sus cañones de los franceses, tan sólo cedió una milla tras sus aliados. Los fusileros irlandeses de la 108 Bri. se redujeron a unos dos­cientos. Los contraataques hicieron en realidad trescientos setenta y un prisioneros de dos de las mejores Divs. alemanas. A m edianoche, la recién llegada 133 división del Gral. Mesple y la 4.a divi­sión de Cab. habían relevado a la mayoría de los su­pervivientes de Maxse. En tan solo una semana ha­bían perdido a veintiún mil setecientos cinco cama- radas.

El extrem adam ente escaso personal de Watts fue reforzado por el rugido centralizado de 385 caño­nes en la que más tarde se llamó la casi olvidada pero épica batalla de Rosiéres. Los cañones de cam­paña en traron en acción cuando la Inf. alem ana se encontraba tan sólo a 600 yardas. Las Divs. 8.a y 24 fueron atacadas sobre las 7.30 a. m. por el III CE de Lüttwitz. Se perdió Rouvroy y se volvió a recu­perar, para ser perdido de nuevo sobre las 2 p. m., cuando se acabaron las granadas y la retirada de Maxse dejó el flanco al descubierto. Enfrente de Rosiéres los defensores no cedieron nada de terre­no, a pesar de las oleadas de ataques que literal­m ente avanzaban a ritm o de tambor. En el norte hacia el Somme, la 16 Div., habiendo ya sufrido 5.543 bajas, luchó duran te cuatro horas y media contra ataques convergentes de los guardias alema­nes, antes de retroceder dos millas de Proyart a M orcourt. De alguna forma Watts y H eneker ade­lantaron a trescientos soldados a cinco millas del centro para lanzar un contraataque a las 2 p. m., que recuperó los cruces de caminos de H arbonnié- res-Proyart e hizo 217 prisioneros. Una hora des­pués el GB E.P. Riddell sobre un caballo de Art. condujo hasta el último hom bre en una dramática carga en H arbonniéres, desde trescientas yardas, contra la 208 Div. alem ana que avanzaba en de ocho a diez oleadas. Este ataque recuperó Vauvi-

Page 73: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

EL CAMBIO TÁCTICO

DE VON BRAUCHITSCH

c[X]4GDFINCKENSTEIN

BRC X l x|xWATTS

Línea del frente por la mañana

[] Fricourt0 Bécordel-Bécourt0 Meaultre□ Dernancourt0 Ville0 TreuxU Buire

G

HO

0 Morlancourt Q Sailly t i l Bray m Laneuville m Etinehem 10 Chipilly SU Cérisy E0 Sailly' Laurette ( 0 Hamel

Mérincourt

10 ChuignollE0 MorcourtE ] Bayonvillersm Lamottem WarfuséeE S Proyart

Rainecourtm Framervillem Vauvillersm Harbonniéresm Guillaucourtm Weincourtm MarcelcaveEH Ca/eux• 0 Caix m Rosiéres

ACKER

Br|x 3 vi1CO N GREVE

El avance del 2° Ejército alemán al norte del Somme fue bloqueado a las 9.45 a. m. del día 27 a causa de una combinación de ataques aéreos y artilleros británicos con la firme resistencia desmontada de la 1.a Div. de Cab. centrada en la cota 108. Demostrando una excepcional y puntual flexibilidad, el GD Von Brauchitsch ordenó por teléfono a dos de sus Rgtos. de Inf. de la 1° Div. (Kónigsberg) que realizaran un giro de casi 90° a la izquierda y cruzaran el Somme por Chipilly-Cérisy, para coger al 5° Ejército británico por la retaguardia, al sur de río.El 1." Rgto. de granaderos defendería el terreno obtenido al oeste de

Afueras de Albert

Cota 108

Melancourt.A pesar de los ataques

aéreos y de un empedernido combate a cargo de 80 soldados británicos en Cérisy, el 43 Rgto. de Inf. se abrió camino a través de un improvisado puente pedestre a las 2 p. m. El 3.” Rgto. de granaderos del Cte. Von Johnston reforzó entonces el ataque, y su III Bón. tomó los pueblos gemelos de Warfusée y Lamotte sobre la calzada romana a las 7 p. m., entre las dos líneas defensivas del 5° Ejército.

Aunque las tropas de Johnston no pudieron tomar una granja al oeste de Warfusée, la respuesta británica había sido confusa y deslabazada. A pesar de ello, a la mañana siguiente el XIX CE,

Línea del frente por la tarde

Río Somme

XXX

GUNDELL G[ X ] XIVG O N TARD

habiendo librado y tácticamente ganado la importante batalla de Rosiéres al sur, consiguió escapar oblicuamente atravesando el frente de las nuevas posiciones alemanas. Los superiores de Brauchitsch no supieron explotar su éxito. En especial la 4° Div. de la Guardia del mismo XIV CE no se enteró del éxito de Cérisy, y podría ser bastante significativo que Marwitz estuviera desplazando a vanguardia el CG de su ejército ese mismo día.

Línea defensiva

de Amiens

FUERZA DE CAREY

a Amiens

Del mediodía a las 7 p. m. del 27 de marzo de 1918 (y parte de la batalla de Rosiéres)

Page 74: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

llers y restableció el frente de la 50 Div., aunque una renovada presión y escaseces de munición obli­garon más tarde a los británicos a retroceder a su ligera línea de ferrocarril de salida. Los hom bres de Watts habían hecho 800 prisioneros, muchos más de los que habían perdido.

La brillante iniciativa m atutina del GD von Brau- chitsch amenazaba con envolver por completo a esta combatida línea. Al m ando de la retenida Inf. de la 1.a Div. justo al norte del Somme en Morlan- court, von Brauchitsch ordenó a sus Rgtos. 3." de granaderos y 43 que giraran 90" hacia el sur y cru ­zaran el Somme frente a Cérisy. A pesar de los ata­ques aéreos, repararon el puente que había sido vo­lado y a las 2 p. m. habían capturado el pueblo.

A las 7 de la tarde , el 3.“ de g ranaderos había conquistado los pueblos rom anos clave de Lamot- te y W arfusée, a la derecha de la línea de re tirada de las divisiones 16 y 39 de la Fuerza de Carey. La respuesta de G ough al paso de Cérisy fue des­plazar a re taguard ia a la 61 división en autobuses y cam iones hasta Marcelcave detrás de la Fuerza de Carey, con el propósito de estar d ispuesto para contraatacar. Ju sto antes de esta o rd en , sobre las5.30 de la tarde , G ough supo que al día siguiente sería relevado p o r el general Sir H enry Rawlin- son. Fue un d u ro golpe tras haber ejecutado una

hábil re tirad a de com bate de una sem ana, en una escala sin p recedentes en la historia del Ejército británico.

El 3." Ejército de Byng recuperó su com postu­ra, p e rd ien d o un poco de te rren o sólo en cuatro puntos, a pesar de que diecinueve Div. estaban atacando sus doce. Unos cuatrocientos guardias de d ragones desm ontados defen d iero n firm e­m ente Sailly-Laurette en la península del Ancre- Somme hasta ser relevados p o r la 3.a Div. austra­liana del GD Sir Jo h n M onash. En to rno a Albert, el V CE cedió te rren o a lo largo de u n a franja de dos millas, pero los contraataques aseguraron que se conservara la altiplanicie. En la p rop ia ciudad una cañón AA de 88 mm m ontado sobre un ca­m ión dem olió un p u n to fuerte en una fábrica d e ­fendido po r los británicos, derrib an d o después un caza Bristol.

▼ Los alemanes presentan a ocho caracteres típicos de la BEF, tras su conquista de Albert el 27 de marzo. Todos parecen haber perdido sus escudos de las gorras, sin duda como souvenirs de guerra. Este grupo incluye a

algunos conductores de la Royal Artillery, un Highlander con falda y un galón de herido en su manga izquierda, dos soldados escoceses más con bonetes y un soldado del CE Blindado. (IWM (¿55248)

Page 75: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

El reen tran te de H ébuterne, defendido por los Anzac, estaba situado en la unión de los ejércitos de Below y Marwitz, lo que significaba que los ataques estaban muy mal sincronizados. T an sólo la 3.a Div. de la Guardia disparó con m orteros y cañones con­tra el bosque de Rosignol, adjudicándose la mayo­ría de los doscientos prisioneros británicos perd i­dos por el IV CE y ocupando dos carros averiados. El VI CE también desarboló los prim eros ataques con am etralladoras y Art.; la 31 Div. tuvo que re ­troceder dos mil yardas a causa de ataques de infil­tración de la Inf. duran te seis horas, que redujeron a un Bón. defensor a cuarenta y cuatro soldados de cualquier graduación, pero el TG H aldane envió a sus guardias en socorro y los reforzó con la Bri. de cabeza de la 32 Div.

A unque estuviera muy lejos, el príncipe herede­ro R upprecht pudo entrever que se estaba perd ien­do la batalla. A prim eras horas de la tarde ordenó que avanzaran tres Divs. de la reserva y reanuda­ran el vital ataque contra H ébuterne. L udendorff desobedeció bruscam ente a su jefe de GE y dirigió a las tropas al sur del Somme, hacia M ontdidier. El bávaro replicó: «¡Ahora si que hemos perdido la guerra!»

En el aire, el 3.cr Ejército era de nuevo ayudado considerablem ente por los ataques a tierra del RFC, centrados ahora a ambos lados del Somme hasta el punto de un récord de 50 toneladas de bombas y trecientos trece mil trescientos cuarenta y cinco p ro­yectiles. Las columnas a pie alemanas sufrieron p ar­ticularmente. El combate aéreo fue intenso sobre Albert, logrando Richthofen tres victorias (de las 13 de su U.), m ientras que el alférez canadiense A.A. McLeod obtuvo un Cruz Victoria por rechazar a tres triplanos Fokker y salvar a su observador heri­do. Los «vuelos de combate» alemanes destruyeron cuatro pueblos en el Ancre y en el Somme. Los ale­manes adm itieron la pérdida de tres aviones con­tra 29 británicos.

28 de marzo: El punto de inflexión «Mars»

El día anterior, Foch había exigido a Pétain: «¡no debe perderse ni un m etro más de suelo francés!» Ese día, el GE de Fayolle dem ostró por prim era vez que estaba listo para realizar más cosas que tan sólo una acción re tardadora. El 3.er Ejército de H um bert sólo perdió un pueblo ante los ataques m atutinos del XVII CE del TG von W erern y con­traatacó a la 1 p. m. con tres Divs. y hasta 180 ca­ñones de apoyo. T res pueblos fueron arrollados y, aunque la 10 Div. alem ana recuperó dos, la victo­

ria m oral y la obtención de dos millas fue al bando francés. El VI CE de De Mitry retom ó tres pueblos al oeste de M ontdidier a la so rp rend ida 9.a Div. ale­mana.

El ejército de H utier se estaba reorganizando en la línea M ontdidier-Noyon; sólo se requirió a los dos CE del ala derecha que am pliaran la línea del Avre hacia Moreuil. Tras un bom bardeo de 90 mi­nutos, tres Divs. atacaron al mal asentado ag o lp a­miento Mesple y lo hizo retroceder cinco millas a través de cuatro posiciones sucesivas, hasta la línea La Neuville-Aubercourt. A pesar de ello, la mayor parte de los supervivientes del X V III CE británico fueron relevados en este proceso.

El XIX CE de Watts en la bolsa de Rosiéres no re­cibió la orden de retirarse hasta las 4.45 a. m. Tres de sus jefes de Div. se habían reunido a m ediano­che, alertando del peligro de ser cortados si no se retomaba Lamotte. Se telefoneó a Watts y éste lo hizo a Gough para conseguir que se rescindiera la orden de resistir de Foch. A las 3 a. m. la llamada del jefe del 5." Ejército levantó al «generalísimo» de la cama y obtuvo permiso para retrasar el XIX CE hasta la Fuerza de Carey. Este retraso significó una confusa retirada a la luz del día hacia el suroeste, he­cho que costó a la retaguardia la libertad de su GB. A mediodía las cinco «divisiones» habían retrocedi­do coherentem ente, paralelamente al curso superior del río Luce y a pesar del fuego de enfilada.

A m ediodía se inició el contraataque de la 61 Div. con 2.400 hom bres, apoyado por 34 cañones; pero, en campo abierto, no pudo acercarse a m enos de 200 yardas de los pueblos de la 1.a Div. sobre la cal­zada rom ana. Antes de cuatro horas se renunció a este intento. La re tirada del agrupam iento de Mes­ple expuso de nuevo al XIX CE, cuya retirada de la tarde se benefició de una torm enta de agua y de la protección de seis vehículos acorazados cana­dienses, aunque la 8.a Div. perd ió la m ayor parte de dos Bóns., debido a que las órdenes no llega­ron. M ientras tanto la Fuerza de Carey, ahora con cuatro mil hom bres, con la 1.a Div. de Cab. a su iz­quierda, rechazó el 1." ataque im portante al que tuvo que enfrentarse. Sin em bargo, su rean u d a­ción por los guardias alemanes, tras un fuerte bom ­bardeo de Marcelcave, encontró ese pueblo vacío. La Fuerza de Carey, reforzada por todas las Cia. de transm isiones del CE excepto el operador tele­fónico de Watts, se había atrincherado a m edia mi­lla hacia el oeste.

Los supervivientes del XIX CE, cubiertos por dos Bóns. de Inf. de la 39 Div. en Cayeux, se retiraron de noche campo a través y por congestionadas

Page 76: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf
Page 77: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

M

M Una batería de cañones de campaña de 18 libras del 3." Ejército británico, en acción al Oeste de Albert el 28 de marzo. Puede verse tierra recién cavada junto a los surcos de los cañones. Estos cañones ya han hecho fuego y forman parte del letal apoyo artillero en el sector del Ancre de ese día. El 3." Ejército comenzó con 495 piezas y la BEF con 2.887 (el 2 de marzo); esas armas emplearon 5.471.480 proyectiles del17 de marzo al 7 de abril. Los alemanes capturaron no menos de 524 piezas de18 libras hasta el 7 de julio. El cañón de 18 libras tenía un alcance de 7.000 yardas (casi 4 millas), una elevación máxima de tiro de 6° y una cadencia de 8 disparos por minuto.Detrás del flanco izquierdo de la Bía. puede verse una columna de Inf. (IWM (¿8655)

■4 El bombardero biplano y biplaza francés Breguet 14B2 voló operativamente desde el verano de 1917, siendo pedidos más de 2.000. Este robusto diseño de Louis Breguet tenía guarniciones soldadas de acero y tuberías de superficie en la cola. Su motor Renault de 12 cilindros y 300 CV, en un gran capó, le confería una velocidad máx. de 98 millas/hora a 10.000 pies, que se alcanzaban en 11,5 minutos. Su armamento defensivo era una única ametralladora Vickers que

disparaba a vanguardia sobre un fuselaje (a veces se añadía una ametralladora Lewis o sustituía a la otra), y el observador poseía una Lewis doble de montaje anular, así como una Lewis sencilla opcional para disparar a retaguardia o hacia abajo. El depósito de bombas podía contener 32 bombas de 8 kg. Una ventana lateral en el fuselaje y unas puertas inferiores ayudaban a realizar la puntería para el bombardeo.

carreteras. Dos Divs. cruzaron cada una la ruta de la otra y, perdido el contacto, m archaron cruzando el Avre y en parte incluso el Noye. Ahora descan­sarían como reserva, ya que los 1.000 infantes re ­formados de la 20 Div. en traron en línea al sur de la Fuerza de Carey y la 163 Div. francesa llegó en camiones.

Rawlinson reem plazó en el m ando a Gough a las4.30 p. m. y los dos generales hablaron durante una hora. El nuevo jefe del ejército heredaba sólo seis Div. (una de Cab.) en línea, aunque dos Div. del III CE y las otras dos Div. de Cab. se estaban acercan­do desde puntos situados de 11 a 30 millas al sur de M ontdidier, para volver a unirse a la delgada lí­nea británica al este de Amiens. Rawlinson escribió rápidam ente a Foch, expresando sus temores sobre la ciudad si no llegaban tropas de refresco en un plazo de 48 horas.

El 3." Ejército se enfrentó a ataques por parte de29 de las Div. de R upprecht a lo largo de las 33 mi­llas entre el Somme y Arleux, al norte de Arras. Los telegramas de las 3 a. m. de Marwitz no lograron posponer los ataques de Kathen y W atter al norte y al sur de Albert. A lrededor de D ernancourt los australianos barrieron a 200 infiltrados a prim era hora de la m añana y, ju n to a la 35 Div., rechaza­ron tres ataques. Entre el Somme y el Ancre, la 3.a Div. australiana (300 bajas) recuperó en tre 600 y 1.200 yardas en un em puje hacia M orlancourt a fi­nales de la tarde. En el bosque de Aveluy, los wüt- tem berger de la 54 Div. de reserva fueron aniqui­lados por el fuego y los contraataques, al tratar de am pliar la cabeza de puente sobre el Ancre contra el V CE.

El IV CE de H arper, reforzado por los Anzac, de-

Page 78: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

fendió el reentran te de H ébuterne, con cuatro Divs. contra nueve. Los únicos logros alemanes fueron parciales, al oeste del bosque de Rossignol. En rea­lidad los Anzac am pliaron algo sus defensas m e­diante contraataques. El grueso del VI CE de guar­dias de Haldane rechazó sangrientam ente cinco ataques por parte de tres de las Divs. de Below, aunque los defensores fueron castigados con am e­tralladoras, patrullas y francotiradores.

Las tropas de Byng habían obtenido al mismo tiem po una anticuada victoria del día. La largam en­te m adurada sub-ofensiva «Mars» de L udendorff enfrentó a nueve Divs. de refresco contra cuatro que defendían el fuerte y aún no asaltado baluarte de Arras. El bom bardeo de cuatro horas y m edia co­menzó con gas mostaza a las 3 de la mañana. Aun­que similar al del 21 de marzo, Bruchm üller no ha­bía participado en esta barrera. O tra diferencia fue que el am etrallam iento aéreo en el último minuto, antes de que la Inf. atacara a las 7.30 de la m añana sin la ventaja de una niebla de pantalla y a m enu­do hom bro con hom bro. A las 5 de la tarde la ofen­siva se había convertido en una sangrienta deten­ción con enorm es pérdidas, a ambos lados del Scar- pe. En ningún punto había penetrado más de dos millas, retirándose los defensores regulares o esco­ceses sólo hasta la fuerte «Línea Verde» al sur del

río y delante de la Zona de Combate en la orilla norte.

Abrigos subterráneos con equipos de am etralla­doras y alambradas habían apoyado la resistencia de la Zona Avanzada. La Art. británica no resultó neutralizada como el día 21; sus cañones dispara­ron en tre 650 y 750 proyectiles por pieza, a m enu­do a 300-600 yardas. El cerro de Vimy ofrecía un espléndido observatorio, y todos los cañones alem a­nes llevados a vanguardia fueron silenciados.

Las peticiones de bom bardeo y los vuelos bajos del RFC jugaron su papel a ambos lados del Som­me. La mayoría de los 58 aviones perdidos (31 se­gún los alemanes) fueron a causa del fuego AA, pero se destruyeron siete aparatos alemanes. Los caballos de la Art. alem ana sufrieron especialmente el ataque aéreo.

El total desacuerdo de L udendorff se expresó en las órdenes de la tarde, que detenían «Mars» y can­celaban su ampliación «Valkyrie» hacia el norte. Be­low tuvo que ceder dos Divs. a Marwitz, que reci­bió tardíam ente la orden de tom ar Amiens por el camino más corto, m ientras que el avance de H u­tier debería continuar el día 30. No debería lanzar­se ninguna nueva ofensiva aislada contra la BEF, hasta la «Georgette» en un plazo de en tre ocho y diez días.

■4 Pilotos del RFC pasan sus informes de reconocimiento a su Of. al mando cerca de Albert, el 25 de marzo. El Of. sentado es el Cte. H.V. Stammers del 15 SQN. La suya era una U. de biplazas RE8 (hasta 19 aviones) que apoyaba al V CE en el saliente de Flesquiéres desde el aeródromo de Lechelle, el despliegue aéreo más avanzado en el sector del 3." Ejército el 21 de marzo, formando parte de la 12 Ala (CE) en la III Bri. El núm. 15 informó del avance alemán al oeste de Bullencourt el día 21 y después, como muchos SQNs, tuvo que irse al oeste. El RE8 o «Harry Tate» era una plataforma estable, aunque lenta y vulnerable, para realizar fuego y reconocimientos.

Page 79: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

29 de marzo: La batalla del Avre

Un oscuro Viernes Santo con nubes de torm enta sucedió a una lluviosa y gélida noche. Sería el día con menos acontecimientos de la Kaiserschlacht hasta ese momento. El 3.er Ejército de Hum bert continuó con los ataques locales del día anterior, pero las tres Divs. implicadas perdieron casi todo lo obtenido por la m añana a causa de los contraata­ques alemanes de la tarde desde los bosques entre Onvillers y Boulogne la Grasse. H utier no dejó de atacar con diez Divs. de su CE de la derecha contra el agrupam iento Mesple; el CE de Lüttwitz consi­guió tres Divs. adicionales para su misión de la tar­de. Estas, incluyendo la hasta ahora no em pleada 1 Div. de la Guardia, y la 243 Div. más al sur de Mar-

T Zapadores del 18 Ejército alemán puenteando un cráter de mina entre San Quintín y Ham, en marzo de 1918. Cada Bón. de zapadores divisionario tenía en general dos Cías, de estas tropas. Una U. sanitaria (¿Cía. de Camilleros?) está pasando junto a ellos. La

historia del 247 Rgto. de Inf. de Reserva alemán, una celosa U. puntera de la 54 Div. (Württemberg) de Reserva, aduce que estas viejas tropas de trabajo estaban inactivas sobre el 29 de marzo, ya que sólo tenían que trabajar seis horas al día. (IWM Q55241)

witz, hicieron retroceder a los franceses y a sus apo­yos británicos (cinco Bóns. de la 20 Div.) dos millas hasta un frente de siete millas entre el Avre y el Luce, conquistando el bosque de Moreuil.

El ataque del VI CE de De Mitry a caballo del Avre, al norte de M ontdidier, finalizó con la cesión de una distancia similar. Sin em bargo el 1." Ejérci­to, a pesar de las dos brechas recibidas en su línea, pudo contar con cinco Divs. de refuerzo en el pla­zo de 24 horas. Esto se debió en parte a que Foch, que se había reunido con Haig en Abbeville por la m añana, no pudo relevar al 5." Ejército. Afortuna­dam ente por 1.a vez, esa U. británica no recibió n in ­gún ataque sobre su línea principal, si bien dos je ­fes de Div. cayeron víctimas de las bombas. La ca­ballería regular y dos Rgto. a duras penas m onta­dos de escribientes reforzaron la Fuerza de Carey, m ientras que las Us. del III CE se acercaban a Amiens, y los ingenieros iniciaron una línea de re ­serva a través de Gentelles.

Al norte del Somme se había vuelto a la situación de la guerra de trincheras, con bom bardeos de gas desde el lado alemán. Las órdenes de la tarde de Ludendorff, ampliadas por teléfono a las 6 p. m., subrayaban la importancia de que Marwitz y H u ­tier avanzaran para alcanzar la carretera al sur de Amiens, en un amplio frente una milla y media al

Page 80: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

oeste del Noye. T res Divs. más de Below debían unirse a las reservas que apoyaban este esfuerzo. No fue un buen presagio para los planes del alto m ando el que las cansadas tropas de Marwitz h u ­bieran luchado duram ente ese día al sur del Som­me.

El recuperado equilibrio de la BEF quizás se sim­bolizó de una m anera más clara con la visita del rey al CG y al 3." Ejército (una vez más el 5." Ejército fue ignorado por los im portantes visitantes). Irón i­camente, un prim o real, el Káiser, era inform ado al mismo tiem po de forma optimista en Mons.

El 5.” Ejército también recibió la mayor parte del apoyo aéreo limitado por el tiem po, en forma de 259 bombas y am etrallamientos, en su mayoría al sur de la calzada rom ana. Los alemanes perdieron dos aviones.

30 de marzo: El Avre y el bosque de Moreuil

Fayolle se enfrentaba ahora al ataque del Ejército alemán más victorioso de H utier sobre todo su fren­te de 25 millas, entre Noyon y Moreuil. La barrera inicial de 90 m inutos comenzó a las 7 a. m., an u n ­ciando un ataque de Inf. por parte de catorce Divs. En el sector de Noyon la 9.a Div. de Gamelin des­cubrió la hora-H en una orden proveniente de un avión de observación derribado. Esto perm itió a la

Art. del V CE pulverizar las tres Divs. alemanas que se estaban p reparando y destru ir los refuerzos en camiones. Después de que contraataques franceses hicieran prisioneros, los combates term inaron de forma efectiva antes del mediodía.

Una vez más el II CE de Cab. de Robillot, menos cohesionado y no tan favorecido por el terreno, ce­dió terreno hasta el punto que hubo Grals. que reu ­nieron a la Inf. rezagada. La 1.a Div. de Cab. fran­cesa bloqueó brechas con sus Us. desm ontadas, j i ­netes, ciclistas y vehículos acorazados. Al mediodía Robillot había llevado a sus hom bres a unas 2.000-3.000 yardas hacia el sur, acudiendo la 67 Div. en su ayuda. El vecino CE (XXXV) retrocedió menos y m antuvo firme su flanco hacia el Avre, en Ayencourt.

Las tropas de Debeney m antuvieron un combate m ucho más precario al oeste de M ontdidier, en un frente de 10 millas en forma de S. Tan sólo una de las cuatro Divs. de Inf. defensoras disponía de sus nueve Bóns., y una vez más los dragones, corace­ros y húsares desm ontados dem ostraron ser los de­fensores más resueltos. Sus contraataques obtuvie­ron prisioneros y ametralladoras, en especial el ata­que de la tarde, con una profundidad de 9 millas, por parte del 16 de dragones, para recuperar le Montchel a la 9.a Div. (de Silesia) en el vital límite del Ejército del Avre. El jefe de la 56 Div. describió

Page 81: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

a las tripulaciones de dos vehículos acorazados p ar­ticipantes como «varias veces heroicas».

A pesar de ello la ofensiva alem ana casi dobló la cabeza de p u en te del Avre. U no de los seis p u e ­blos tom ados fue Cantigny, que los no rteam erica­nos re tom arían dos meses más tarde en su 1er a ta­que im portan te en el fren te occidental. En espe­

► Un soldado ametrallador Lewis del 17 Bón., Real Cuerpo de Fusileros del Rey (KRRC), 117 Bri. de la 39 Div. (Nuevo Ejército), una U. de reserva para el sector del VII CE del 5.a Ejército, en acción desde el día 21. El 17 KRRC, sólo en el sector de la «Línea Verde» el día 23, rechazó un ataque al amanecer del XXIII CE de Reserva alemán, permitiendo que toda la Bri. se retirase sin bajas. Desde las 4 a.m. del día 25, esta U. formó parte del XIX CE que luchaba en la batalla de Rosiéres y participando en un contraataque de 500 yardas cerca de Demuin, el 30 de marzo. La ametralladora Lewis de diseño norteamericano de 25 libras tenía refrigeración por aire y disparaba hasta unas once cazuelas con 47 disparos de balas de 0,303” por minuto. Cada Bón. poseía 36 de esas armas, o dos por sección más cuatro para tareas AA.

4 Caballos de la Bri. de Cab. canadiense muertos durante la exitosa pero costosa carga del bosque de Moreuil, el 30 de marzo. Esta fotografía se tomó el 3 de abril, y se han cavado pozos de tirador a ambos lados de la pista. (IWM Q10858)

cial el CE de Lüttwitz había logrado un peligroso en tran te en el sector del XXXVI CE francés, al sur de M oreuil.

Fragm entos del 5." Ejército, apoyados por 69 ca­ñones pesados, resistieron a ocho de las Divs. de Marwitz en un frente de ocho millas. El 228 Rgto. de refresco se rom pió en el sector norte de Hamel,

Page 82: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

sufriendo más de 700 m uertos y heridos. La Fuer­za y la Cab. de Carey dem ostraron ser indestructi­bles. T an sólo entre el ferrocarril y Moreuil cedió la línea británica. En el bosque de M oreuil, a la de­recha del límite aliado, una Bri. de Cab. canadien­se (con 1.400 hombres), apoyada por aviación y am etralladoras anglo-francesas, atacó el bosque a las 9.30 a. m. por dos lados. Cuatro SQNs. m onta­dos y dos desm ontados lim piaron la mitad del bos­que en una costosa melé de 90 minutos. La otra Bri. de la 2.a Div. de Cab. les siguió y la caída de la no­che encontró a la Inf. de la 8.a Div. com partiendo la maleza con siete agotados Bóns. alemanes de tres Divs.

Hacia el norte, los bosques de «Rifle» y «Little», llamados así en recuerdo a sus defensores, cambia­ron de m ano tres veces hasta que los hom bres de las Divs. 20 y 50, batidos por 48 cañones de cam­paña y pesados, restauraron la línea matinal des­pués de las 7 p. m. Al norte del Luce la 66 Div. fue auxiliada por tres contraataques de la 39 Div., pero Demuin al final cayó. Watts envió al 12 de lance­ros, que recuperó un bosque que se convirtió en el bosque de los Lanceros. El contraataque con una misión parecida de la 9.a Bri. australiana (200 ba­jas) sólo pudo recuperar otras 200 yardas de las Div.19 de H anover y la Ersatz de la Guardia. Estas ha­

bían conquistado aproxim adam ente una milla de terreno y estaban a 11 millas de Amiens.

D urante la noche Watts relevó a tres de sus es­queléticas «divisiones» con aproxim adam ente 1.800 infantes de la relativamente descansada 18 Div. Al norte del Somme, los hom bres de Byng tom aron ahora claram ente la iniciativa. Los australianos de Monash rechazaron tres ataques al mediodía y co­gieron de enfilada a la 228 Div. al sur del Somme. Los neozelandeses avanzaron m etódicam ente unas 500 yardas, causando 480 bajas y capturando 125 am etralladoras y morteros. Los guardias desarbola­ron un asalto m atutino de la 234 Div., a pesar de una barrera de 2 horas y 3/4 y el bom bardeo de ca­torce aviones. El 3." Ejército tenía ahora a los CE. australiano y canadiense m anteniendo los dos ex­trem os de su línea.

Haig cenó con Clemenceau en el CG del 5." Ejér­cito y renovó su prom esa de que Debeney volvería a cruzar el Avre y conservar la altiplanicie. La «Ge­neral Directive N.° 1» de Foch ordenaba cubrir Amiens con las fuerzas actuales y form ar masas de reserva de maniobra al norte de ella (británicos) y al norte de Beauvais (franceses). A estos últimos Pé­tain envió a su vez 20 Divs., incluyendo cuatro de Italia (llamadas de nuevo entre el 24 y el 26 de marzo).

■4 Una Bía. de Art. pesada británica en retirada, en marzo de 1918. Este cañón de 5,2 toneladas es un Mark II de 60 libras. La urgencia de la situación puede verse en que los pesados caballos del condado de Clydesdale empiezan a trotar y en la dotación de la Real Artillería de Guarnición que se han subido a los apoyos de pie junto a los engranajes.

Page 83: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

31 de marzo: Equilibrio

El día de Pascua, según afirmó el piadoso Fayolle, salvaría a su GE. Y precisam ente ese dom ingo se dio una m añana lluviosa con intervalos de sol, en la que consolidó su línea de catorce Divs. contra las doce de H utier, con excepción del bom bardeo ale­m án desde las 7 a. m. A partir del m ediodía cuatro pueblos franceses en el sector de Debeney sufrie­ron ataques locales. El más serio fue un asalto de la 1.a Div. de la Guardia prusiana sobre Grivesnes, que llegó hasta su castillo, tan sólo a cinco millas y me-

▼ Tropas de construcción de ferrocarriles alemanas tienden traviesas de paso ancho a través del campo de batalla del Somme, aún con neblina, en abril de 1918. A la derecha pueden verse gruesas alambradas británicas. La falta de comunicaciones por ferrocarril reparadas o nuevas en la recién conquistada zona del 5° Ejército británico el 30 de marzo provocó que Ludendorff retrasara su

apuesta final por Amiens durante varios días, hasta que se trazaron suficientes pistas para abastecer a la ofensiva con munición de Art. El servicio de ferrocarriles del Ejército alemán (independizado en 1916 de las tropas de comunicaciones) poseía Cía. de construcciones, tráfico y almacén, con catorce Bóns. de trabajo y suplementarios. (IWM (¿55293)

dia del objetivo de la línea de H utier sobre el río Noye. En ese m om ento salieron dos vehículos aco­razados franceses y se dirigieron contra estas tropas de elite.

A mediodía las cuatro Divs. de Inf. de Robillot con 108 piezas del «75» y «1559» en su apoyo rea­lizaron unos cuidadosos y limitados avances, to­m ando puntos tácticos a las 5 p. m. a las cuatro Divs. enemigas al oeste de Matz. Tam bién se produjo una im portante acción en el hasta entonces parado sec­tor del Oise del 6.° Ejército francés. Hacia las 5.30 p. m. en Chauny, hom bres de Hessen de un Rgto. de la 75 Div. de reserva (recién llegados del sur de Laon) cruzaron el río en balsas. Todos ellos caye­ron víctimas del 16 Bón. de fortificación de la 58 Div. británica.

El LI CE de von Hofacker dirigió el «Schwer- punkt» de ese día en tre el Luce y Moreuil con un suavizamiento antes de la 1 p. m. En dos horas con­quistó los tres bosques disputados el día anterior, en gran parte gracias a la elástica 243 Div. y a la 199, una descansada Div. de ataque. La harapienta línea aliada se reforzó entonces con las Bris. m on­tadas de la 2.a Div. de Cab. que llegaron al galope y un Bón. de la nueva 29 Div. francesa, así como 200 supervivientes de la 8.a Div., recuperando la es­quina noroeste aislada del bosque de Moreuil. Los

Page 84: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

hom bres de Hofacker habían logrado el único éxi­to visible en el mapa de situación de Fayolle, de2.000 yardas.

Al norte del Somme la única acción no de bom ­bardeo implicó al V CE, que realizó un ataque de Bón. mal sincronizado y fallido al oeste de Aveluy, que costó dos de los cuatro carros W hippet de apo­yo, y una Bri. de la 4.a Div., recuperando 400 yar­das de trincheras al sur del Scarpe.

Por 1.a vez desde el día 25, las últimas órdenes del RFC habían resaltado el bom bardeo a alto ni­vel y la búsqueda de aviones enemigos. De hecho, el día no ofreció más que tres combates aéreos an- glo-alemanes, por lo que los cazas volvieron a am e­trallar por la tarde. Poco después de las 2.15 p. m. un observados de un SQN del III CE rom pió el fue­go contra 2.000 infantes alemanes que se estaban reuniendo para atacar al sur de Moreuil. Los bom ­barderos nocturnos británicos lanzaron 628 bombas du ran te un período de diez horas sobre cuarteles y transportes alemanes del pueblo.

La fuerza aérea total alem ana era ahora de 822, 102 aviones más que el día 21, debido sobre todo a 76 cazas adicionales asignados a los ejércitos de la Kaiserschlacht. Sus enemigos contaban con 645 aparatos, pero la contribución francesa ciertam en­te equilibraba las cifras. Los alemanes adm itieron cuatro derribos por 19 aliados.

T ras una conferencia al m ediodía en San Q uin­tín, L udendorff telegrafió a sus dos jefes de GE que los flancos internos de Marwitz y H utier fueran re ­forzados por seis Divs., debiendo presionar a van­guardia hacia Amiens a caballo del Avre. Esta deli­berada aunque limitada ofensiva sería lanzada el 4 de abril, lo más pronto que la logística permitía, siendo un factor im portante la falta de munición del 2." Ejército. El propio R upprecht, conduciendo a través del área tom ada en tre Péronne y Bapau- me, vio los bloqueados cruces de carreteras y las cansadas tropas que realizaban marchas de 28 mi­llas de norte a sur, como consecuencia de su redes­pliegue.

1-3 de abril: Una calma relativa

Los tres prim eros días de abril representaron una calma en el combate pero no en el trabajo para am ­bos bandos. El GE de Fayolle sólo tuvo que repeler ataques a pequeña escala cerca de Grivesnes y un avance nocturno en Morisel (2/3 de abril). Pétain había dado ahora a su 2." en el m ando 27 Div. de Inf. y 5 de Cab. con 1.344 cañones (528 pesados) y unos 700 aviones. En el sur, la penetración de H u­

tier había sido taponada en profundidad y, no es de sorprender, tanto Foch como Fayolle estaban pensando en rom per la bolsa de M ontdidier.

La vital unión de Debeney con los británicos en el Avre había sido reforzada. Después de que Haig explicara a Clemenceau en la m añana del día 1 el p la tean de V ille rs-B re tto n eu x que dom inaba Amiens, Foch fue convocado por teléfono. No m u­cho después de las 3 p. m., el «generalísimo» estu­vo de acuerdo en que los franceses tom aran el sec­tor de tres millas entre Moreuil (sobre el Avre) y H angard (sobre el Luce). Durante las dos noches si­guientes las Divs. francesas 133 y 29 reem plazaron final y com pletam ente a las Divs. 8.a y 14 del 5.a Ejército.

Antes de que tuviera lugar este relevo, esa apa­rentem ente infatigable 2.a Div. de Cab. había re ­conquistado el bosque Rifle, em pleando 1.000 sol­dados desm ontados detrás de una preparación a r­tillera de ocho minutos y con una barrera de am e­tralladoras por encima de su cabeza así como de

Page 85: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Un soldado del «Fort Garry Horse», Bri. de Cab. canadiense, 3° Div. canadiense del 5." Ejército. Este Rgto. estuvo en la segunda oleada del famoso ataque al bosque de Moreuil (defendido por el 122 Rgto. de fusiles de la 243 Div.), el 30 de marzo de 1918. Tras tener un muerto por fuego de Art. el día 21, ya había participado en una acción de retaguardia el día 24. Su Of. al mando, el teniente coronel (Tcol.)R.W. Paterson, mandaba entonces la fuerza montada mixta de la 3° Div. de Cab., y envió un destacamento de la 6° Bri. de Cab. a su famosa carga de Villeselve, la otra acción importante montada de la batalla.

M Un cinematógrafo del Ejército alemán filma a la In f que avanza por una carretera cerca de Albert, en abril de 1918. Sorpresivamente, Ludendorff no tuvo cámaras que filmaran el día inicial de la Kaiserschlacht, pero el despliegue de Us. cinematográficas en otras partes podría haber formado parte de sus dispositivos de decepción para los aliados. (IWM Q55252)

apoyo aéreo del 84 SQN. Se capturaron 100 prisio­neros alemanes y trece am etralladoras de la recién enviada 25 Div., pero los contraataques elevaron las pérdidas de los jinetes a más de 300.

El 3.cr Ejército aún se enfrentaba a las Divs. de R upprecht en la línea del frente con quince p ro ­

pias, aunque seis eran Us. extragrandes de los Do­minios. Los Anzac obtuvieron logros locales el día 1, y la nueva 32 Div. de Ypres reconquistó Ayette a sus poseedores de la 239 Div. en un bien planea­do ataque nocturno, atrapando 129 prisioneros con20 m orteros y ametralladoras.

Page 86: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

M Un obús de campaña de 4,5” del 5° Ejército británico en la carretera a Péronne, es superado por un transporte alemán y un cañón de campaña de 77 mm, a finales de marzo de 1918. También se han desplazado a ambos lados de la carretera dos cañones británicos de campaña de 18 libras. Pueden apreciarse con claridad el escudo camuflado del tubo, la manivela de elevación a 45°, la palanca para la puntería en dirección y el freno de la rueda del obús. Este material pesaba 3.004 libras y disparaba un proyectil de 35 libras a 7.000 yardas (4 millas) hasta a cuatro disparos/minuto. El 5,5 formaba una Bia. de seis cañones de las tres de una Bri. (Rgto.) estándar de la Real Artillería de Campaña. El 3." Ejército empezó con 164 de estas armas; el 5° Ejército con 288 (904 en la BEF, el 2 de marzo). Los británicos perdieron 154 obuses de campaña, capturados a Ludendorff el 7 de julio.

M Desaliñados y hambrientos infantes (foto alemana) comen hasta la última miga de sus raciones diarias, tras apilar sus armas, durante el avance a Montdidier del 18 Ejército, afínales de marzo. Por el núm. de la tira de hombro, esta U. parece ser el 81 Rgto. de Reserva reclutado en el Rin, de la 222 Div., una U. creada al norte de Verdún en septiembre de 1916 y se desangró en el Somme en noviembre. En 1918 ocupaba el sector de Ailette (Aisne) hasta ser enviada al sureste de Montdidier, pero no combatió en la Kaiserschlacht.

Page 87: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Foch envió también al CG sus órdenes del 1 de abril, a Fayolle, sobre cooperación aérea anglo- francesa, evidencia de que no había ignorado la 3.a dimensión de la batalla. Estas establecían los ejes de los reconocimientos, para asegurar una cobertura combinada total; concentraciones de bom bardeos en enlaces claves del ferrocarril, especialmente en San Quintín, Jussy, Ham, Péronne; la prioridad para el ataque a tierra y el refuerzo m utuo; y una diseminación centralizada de la inteligencia por ra ­dio, aviones con mensajeros, o un vehículo a mo­tor diario al CG de Foch.

El l .er día y noche de la existencia de la RAF (Real Fuerza Aérea) no vio ninguna parada de la activi­dad aérea. Los seis SQNs de cazas del 5." Ejército volaron todo el día, y sus bom barderos diurnos des­truyeron cinco pueblos así como Péronne. Bapau- me recibió tres visitas. Diecisiete bom barderos noc­turnos FE2b estuvieron activos a ambos lados del Somme. Se perdieron 40 aviones (31 según los ale­manes), doce debido al fuego AA, y 10 aviones por parte alem ana (se adm itieron 4).

La RAF aseguró haber derribado trece aviones alemanes al sur del Somme en su 2.° y 3.cr día de existencia. Estos aparatos formaban parte del arma unificada de combate y reconocimiento de que Lu­dendorff había disfrutado desde octubre de 1916. El campo avanzado de aterrizaje de Rosiéres fue el centro de una melé de una hora con 60 aviones el2 de abril, una seria advertencia para las intencio­nes alemanas en tierra.

3 de abril: La Conferencia de Beauvais

U na semana después de Doullens, la cúpula aliada se volvió a reun ir para redefinir las fuerzas de Foch, tal y como este lo había solicitado a Clemenceau. El encuentro a las 3 p. m. en su CG de Beauvais, p re ­sidido por «el Tigre» y Lloyd George incluyeron a los Grals. norteam ericanos Pershing y Tasker Bliss. Estos dieron a Foch la «dirección estratégica de las operaciones militares» y el «generalísimo» publicó la «General Directive N.° 2». Esta contem plaba una re­novada ofensiva im portante alem ana al norte del Somme, con sólo una m enor al sur del río. Confor­me a ello, los aliados deberían lanzar una contrao­fensiva simultánea sobre M ontdidier y a caballo del Somme, dependiendo de la resistencia defensiva real de la BEF sobre la línea Albert-Arras.

4 de abril: El Avre y Villers-Bretonneux

La línea final deseada en la Kaiserschlacht dem os­

traba lo modesto que se había vuelto el objetivo de Ludendorff. Los puntos de esta línea, Grivesnes- Ailly-sur-Noye-bosque de Gentelles-Blangy Tronvi- lle, no incluían a la ciudad de Amiens, sino que sim­plem ente ponía a sus puentes y al triángulo de sus enlaces ferroviarios bajo el fuego de largo alcance desde 12.000-14.000 yardas. Quince Divs. (seis de refresco) debían atacar a siete aliadas en un frente de 15 millas.

La Art. alemana, abastecida de munición gracias a los recientes esfuerzos de 60 Cia. de construcción de ferrocarriles en la zona devastada, abrió fuego hacia las 5.15 a. m. duran te 75 minutos, con algu­na ayuda de proyectiles con gas. Al igual que el 21 de marzo, los «Minenwerfer» actuaron en la fase fi­nal, esta vez duran te quince minutos. El asalto de la Inf. comenzó a las 6.30 a. m. bajo una persisten­te lluvia. Nueve millas de tropas al ataque de doce Divs. (cinco de refresco) cayeron sobre las cinco Divs. de la izquierda y el centro del l .er Ejército de Debeney, que estaban apoyadas por 958 cañones, incluyendo más de 200 británicos del 5." Ejército.

T res Divs. francesas cedieron terreno ante una superioridad aplastante de atacantes, luchando en los bosques, hasta dos millas y perdiendo Morisel, Castel y Mailly-Raineval. La más septentrional, la29 Div., aguantó con firmeza desde el bosque Rifle hasta el pueblo de H angard (reconquistado); y tam ­poco cedió la 127 Div. en Grivesnes. A las 4 p. m. la Art. y las reservas de Debeney, incluyendo tres Divs. de refresco, no sólo había infligido grandes pérdidas al enemigo sino que estaban contraatacan­do. El cauteloso jefe del ejército regresó a su CG y a la cena corrió el champaña. Fayolle llegó para de­cir con alegría que «desde hoy los boches están “fi­chú”».

El despliegue final del XIX CE de Watts alrede­dor de Villers-Bretonneux tuvo la virtud de la p ro ­fundidad. Detrás de las Divs. 14 y 18, con una Bri. de 2.250 australianos en el centro y la 6.a Bri. de Cab. en reserva inmediata, estaba la Línea Gente- lies, de tres a cinco millas por detrás y defendida principalm ente por las Divs. 3.a de Cab. y 24. La 2.a Div. de Cab. era la parada de larga duración delan­te de Amiens. Unos 320 cañones (80 pesados) apo­yaban al frente de seis millas. Como prom edio dis­pararon 500 disparos cada uno en el fuego de 10 horas, deteniendo a m enudo los ataques alemanes en puntos al descubierto. La 14 Div., la más septen­trional, atareada y cansada, retrocedió o corrió ha­cia atrás dos millas en cuatro horas, siendo supera­dos a la fuerza unos 500 rezagados por los puestos australianos al sur del Somme. Dos Rgtos. de la 228

Page 88: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

GD ERS

BOFECK

CONTRAATAQUE AUSTRALIANO-BRITANICO

EN VILLERS-BRETONNEUX

a 6 p. m. del 4 de abril de 1918

inminente captura por parte de la 9." Div. Bávara de Reserva del 2° Ejército alemán, que avanzaba a las 4.30 p. m. con sus tres Rgtos. de Inf. (quizá 5.000 hombres). El principal

ataque alemán se produjo al sur del ferrocarril y el Tcol. J.Milne (que moriría a causa de una bomba el 12 de abril) les dijo a sus tres jefes de Cía. del 36 Bón. australiano: «Avancen hasta que sean

detenidos y manténganse allí a toda costa». A pesar de sufrir 150 bajas avanzaron más de una milla junto al ferrocarril, hasta el primer puente pasado Villers-Bretonneux.

BR 36 AUS

MILNE

BRC><C17 QUEENS(-)WOOD

9BAV RES

CLAUS

Bosque de Hangard

A WarfuséeTiempo: lluvia

Villers-Bretonneux

Aeródromos

Montículo

Bosque de Lancer

Un contraataque británico liderado por los australianos, precisamente cronometrado y desde las mismas trincheras, salvó a Villers-Bretonneux y a la meseta sobre Amiens de una

Límite del contraataque

Ferrocarril

Marcelcave

AAmiens

0 Los 100 australianos de Sayer más el 6° de Londres (2.a oleada)

Mayor avance alemán

Page 89: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

Div habían roto su línea desde la calzada rom ana hasta la mitad de camino hacia Hamel, a pesar de las pérdidas iniciales causadas por su propia Art.. Esta penetración perm itió al 5." Rgto. a pie de la G uardia tom ar Hamel con 300 prisioneros al m e­diodía, incluyendo al EM de una Bri.

Mientras tanto, el 35 Bón. australiano había re ­chazado los tres ataques m atutinos de la nueva 9.a Div. bávara de reserva, y la 18 Div. tres de las Divs. Ersatz de la G uardia y la 19 Div.. Estas Us., en par­te al descubierto a causa de la m archa de la 14 Div., se retiraron por la noche a trincheras excavadas una milla al este de Villers-Bretonneux. En esa co­yuntura, el GD G raf Finck von Finckenstein de la 4.a Div. de la G uardia sugirió a su jefe de CE, el TG von Gontard, que su reserva, la llena de recursos1.a Div., recibiera la orden de am pliar la brecha. G ontard lo rechazó —una decisión que puede que costara a Marwitz Villers-Bretonneux y más.

Al norte de la calzada rom ana, la 6.a Bri. de Cab. avanzó con 12 am etralladoras Hotchkiss y restauró la línea de la 14 Div. en la altiplanicie que dom ina­ba la ciudad. El fuego de la Cab. desm ontada y de la Art. rom pió todos los intentos posteriores de G ontard de continuar el avance. Al sur de la carre­tera de bifurcación, el XI CE de Kühne reanudó su ofensiva tras otra hora de bom bardeo a las 4 p. m. Esto fue demasiado para la 18 Div., que se retiró

▲ El 3." Rgto. de In f de una Div. alemana (quizás la 4° de Pomerania) descansando cerca de Bapaume, antes de una acción, en abril. Se aprecia la protección de orejas y cuello proporcionada por el Stahlhelm modelo 1916.

bajo la lluvia y se arrastró por el lodo hasta 2.500 yardas de la carretera bosque de Hangard-Villers- Bretonneux, excepto en su flanco extrem o que se pegó a los franceses en H angard.

En el norte se abrió una brecha entre los británi­cos y los ahora vacilantes australianos. Hacia las 5 p. m. los bávaros estaban a 440 yardas de Villers- B retonneux, y las Bias. británicas retrocedían bajo el fuego. Después, desde sótanos del pueblo y po­siciones exteriores, once débiles Cias. de reserva australianas (unos 600 hombres) y británicas (unos 420 hombres), impulsadas por el 36 Bón. australia­no del coronel (Cor.) J. Milne, contraatacaron a am ­bos lados de la línea del ferrocarril hacia el este. Las dos Divs. de K ühne recularon hasta 2.000 yardas a las 6 p. m.

Al norte de la calzada rom ana, el 17 de lanceros avanzó al galope corto para hacer ver al 33 Bón aus­traliano que no debía retirarse y enlazó a la 6.a Bri.

Page 90: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Cab. francesa y autocañones Renault llegan a un cruce de carreteras con policías británicos, quizás cerca de Amiens, a finales de marzo o principios de abril. El vehículo blindado«autocanon» Renault poseía un cañón Puteaux de 37 mm (teniendo el Renault ordinario una ametralladora Hotchkiss de 8 mm) con una tripulación de tres o cuatro hombres y un motor de cuatro cilindros y 4.600 cc, dentro de un chasis acorazado de camión. El II CE de Cab. de Robillot poseía siete grupos de vehículos acorazados con doce vehículos cada uno. Realizaron un espléndido trabajo aguantando y después rechazando los avances de Hutier desde el 25 de marzo.

► Una fotografía alemana claramente preparada. Dos infantes han encontrado un sitio para dormir alrededor del borde de un agujero de bomba en el Somme, en 1918. El agua de estos cráteres se utilizaba para afeitarse, a no ser que hubiese sido contaminada con gas mostaza.

Page 91: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

de Cab. con los exitosos contraatacantes. Tres vehí­culos am etralladores canadienses añadieron la po­tencia de fuego de sus Vickers contra la 9.a Div. bá- vara de reserva.

A las 7 p. m. la línea se había cerrado y un avan­ce nocturno australiano a caballo de la línea de ferrocarril obtuvo incluso otras 200-300 yardas, lle­gando hasta las trincheras del mediodía. El día y la noche costaron a los australianos 661 bajas y 167 a la 7.a Bri. de Cab. Sólo dos Rgtos. de la 4.a Div. de la G uardia perd ieron 498 hom bres de toda g radua­ción.

La lluvia había convertido las condiciones del terreno en ruinosas, im pidiendo cualquier vuelo por la mañana. Sin embargo, la V Bri. realizó ata­ques a baja altura por la tarde, y esto se repitió a ambos lados del Somme durante el día 5 (200 bom ­bas lanzadas y 20.000 proyectiles disparados). Las pérdidas alemanas fueron de cuatro aviones, fren­te a cinco británicos.

5 de abril: El empuje final

Las tropas de H utier estaban demasiado exhaustas como para renovar los ataques. En especial, el su­ministro de municiones para la cabeza de puente del Avre era precario. En su lugar, cinco de las Divs. de Debeney contraatacaron la línea alem ana entre Cantigny y Castel, duran te todo el día. Se recupe­ró poco terreno, aunque se em plearon unos pocos carros pesados franceses en Grivesnes, y Fayolle consideró a sus hom bres capaces de realizar tan sólo unos asaltos limitados de guerra de trincheras. Pero se había llegado a un punto de inflexión moral.

El esfuerzo del 2." Ejército alemán fue poco m e­jo r al sur del Somme, a pesar de las órdenes de Marwitz de envolver Villers-Bretonneux por ambos flancos. Kühne anuló su mitad del ataque y no vol­vió a enviar a su 24 Div. de reserva (sajona). Gon­tard ordenó la tom a de la cota 104 pero, tras un bom bardeo de una hora desde las 10 a. m., cuatro Rgtos. de la 228 y la tardíam ente llegada 1.a Div. no pudieron avanzar más de 150 yardas desde sus lí­neas de partida. El fuego automático australiano y de la Cab. con el apoyo de la Art. les obligó a en­terrarse y causó más de 208 bajas.

El 3.er Ejército de Byng estaba en alerta ante su prueba final, alertado por prisioneros de la noche an­terior. El bombardeo con gas comenzó a las 7 a. m., pero demostró ser poco eficaz. La Inf. de Rupprecht se dirigió a la cima dos horas más tarde. Contra el sector bajo del Ancre del VII CE, defendido total­mente por australianos, las tres Divs. de von Kathen

y 16.000 proyectiles gaseosos obtuvieron de 1.000 a 1.500 yardas al norte de Dernancourt.

Se habían em pleado Stosstruppen del 3." Bón. de asalto Jáger, así como cañones de cam paña ais­lados contra nidos de am etralladoras (orden gene­ral de L udendorff del 30 de marzo), pero un con­traataque de la 4.a Div. australiana con cuatro Bóns. expulsó a la 50 Divs. de reserva de la vital cresta a las 5.15 p. m. Las tropas de Kathen perdieron de 1.300 a 1.600 hom bres contra unos 1.233 australia­nos, cuya propia y activa Art. consumió 27.588 p ro ­yectiles.

En el sector Albert-Hamel del Ancre, el V CE re ­sistió con éxito ante cuatro de las Divs. de Marwitz, cuyas ganancias netas tras doce horas de combate fueron un huerto y unos pocos cráteres de proyec­tiles bom bardeados con granadas de fusil en el bos­que de Aveluy. El flanco izquierdo de Below lanzó seis Divs. contra el entrante de H ébuterne, con el fin de conquistar este y Colincamps (apodado «Loki») tras cuatro horas de bom bardeo. Todo esto fue precedido por un intento por parte de la 37 Div. británica a las 5.30 a. m. de reconquistar el Bosque de Rossignol. Dos Bóns. tuvieron el p rofu­so apoyo de once carros y 120 cañones aportando una barrera móvil, una pantalla de hum o y un p re ­ciso fuego de supresión. Tan sólo un carro sin en ­terrar entró en acción, pero la Inf. avanzó casi la mitad del camino hasta el bosque, antes de que el ataque alemán general le obligara a retroceder.

El XIV CE de reserva de von Lindequist no lo­gró rom per el centro según lo planeado. En lugar de ello, los únicos pobres resultados se produjeron a espaldas del reentrante, ganándose la granja de Le Signy a los neozelandeses y la mitad este de Buc- quoy a la 42 Div.

Las dos figuras suprem as del Ejército alemán hi­cieron unos comentarios lo suficientemente sucin­tos sobre el 16 y último día de la Kaiserschlacht. H indenburg escribió, «nuestras fuerzas estaban ex­haustas», y Ludendorff, «la resistencia enemiga fue más allá de nuestras fuerzas». En reconocimiento a esto, en la tarde del día 5 ordenó que pararan los ataques.► El fina l de la batalla, el 4/5 de abril de 1918. El avance de Ludendorff había logrado un rnáx. de 40 millas en 16 días, sobre todo entre la zona de San Quintín y la línea trazada a caballo del Avre, al Norte de Montdidier. Eran unos logros tácticos impresionantes sobre el

plano, pero que no tuvieron un resultado estratégico, llegando hasta unas 7,5 millas de Amiens en su punto más cercano. Por el contrario, los Ejércitos de Marwitz y Hutier serian echados de la bolsa Montdidier Somme por las ofensivas aliadas en agosto.

Page 92: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

El final de la batalla, 4-5 de abril de 1918

I S

T21 de marzo, línea del frente 30 de marzo, frente británico30 de marzo, frente francés31 de marzo, frente británico 31 de marzo, frente francés 5 de abril, frente británico5 de abril, frente francés

4 6 8 10 MillasH

12 16 Km

\

‘ v- n y c itc -* - ErviHers XVIII \1 -------- xxx-' ^XXXg r l q Bosque de ñ Moryi

^ Bosque de Rosignol r i ¡B e h a fl$ s VIR Dojgnjes \ _ _

' H « w tp n » /* U|SÍS“ » h - XX' Sapighles x x x ~ ~N z C R : Hebu,erni7 • A chie-^reviJIers _ x x x

f i e Signy le-Petit • • x iV R Havrincourt /7\Gourcelies» . f% Farm Bapaume

XXXColincamps

BYNG

Beauquesne \ 1xxx - - W /O WHamel

\ # > Marco¡ng

• Flesquiéres

xxxx

E l %'+, x xxx

,i a a a ? * x x x ¿r 1 2 1

3P ^ 1 S x v i n ' r © - j .HUM BERT ̂ A

J X T ^ERl» " P

Page 93: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

RESULTADOS Y CONSECUENCIAS

El 4 de abril la BEF había recibido 101.000 reem ­plazos de Inf., a m enudo con dieciocho años de edad o menos. Todo su CE de Cab. había comba­tido de una m anera que recordaba a la campaña de 1914, perdiendo 4.300 de sus soldados principal­m ente regulares en una invalorable demostración de movilidad y solidez. Haig las llamó sus mejores tropas, mientras que Gough y Rawlinson se bene­ficiaron de su presencia en la línea en apoyo. En cierto sentido, e irónicamente, com pensaron a un CE blindado que se estaba reequipando, a causa de las pérdidas de carros y carburante, y que fue ca­paz de hacer poco en la segunda semana, excepto facilitar destacamentos de am etralladoras Lewis en el Ancre. El valor de las tropas montadas para abrir­se camino a través de los campos llenos de cráteres, trincheras y cruzando cursos de agua del Somme también se dem ostró por el hecho de que los fran­ceses em plearan no menos de cinco Divs. (dos des­montadas) para cubrir o reforzar la concentración del GE de Fayolle. Su papel no fue simplemente el de hacer escaramuzas; las cifras incompletas de ba­jas de marzo para tres de estas Us. ascienden a 2.265.

Bajas aliadas

La historia oficial británica (1937) otorga a Haig una pérd ida total de 177.739 hombres, de los que unos 72.000 eran prisioneros y al menos un tercio de ellos heridos o gaseados. Esto indica una tasa media diaria de pérdidas de más de 11.000 hom ­bres, y tres veces más que en la campaña del Som­me de 1916. El 5." Ejército de Gough (incluyendo el VII CE durante su existencia) perdió aprox. 90.882 hombres, y sus dieciséis Divs. de Inf. reci­bieron por prom edio un 50% más de bajas que las 23 Us. de Byng (con unas pérdidas totales de 78.860). De los nueve CE de Inf. participantes, el XIX de Watts sufrió el que más; más de 32.500, de los que 19.000 fueron desaparecidos. Dos de sus Divs. (la 16 y la 25) perdieron más de 7.000 solda­dos, al igual que la 36 Div. (Ulster) en el CE de Max­se. La Div. más golpeada del 3." Ejército fue la 59

con 6.038 bajas, casi dos terceras partes (807 m uer­tos) el l .er día. N inguna de las 30 Divs. originales de Haig perdió menos de 1.950 hombres, o aprox. el 20%. Cinco Divs. de los Dominios sufrieron 7.211 bajas en los diez días en los que participaron. In ­cluso los 500 hom bres del 7." de ingenieros de los EE.UU. perdieron 77 oficiales y soldados de tropa.

Las pérdidas francesas ascendieron a unos 77.000 en tre 20 Divs. participantes, una indicación de la dureza de los combates. T an sólo los combates de marzo costaron tres de las Us. de Robillot, 4.798 «poilus» m uertos o capturados. L udendorff afirmó haber hecho más de 90.000 prisioneros aliados el 4 de abril, de los que quizás de 13.000 a 18.000 eran franceses.

M aterialmente, los aliados habían perdido 1.300 cañones, en su gran mayoría británicos; 2.000 am e­tralladoras británicas capturadas (según la prensa de L udendorff el 27 de marzo); unos 200 carros (to­dos británicos); un núm ero desconocido de vehícu­los acorazados; decenas de millares de caballos; die­ciséis aeródrom os; y más de 400 aviones británicos, sin contar un núm ero sustancial aunque descono­cido de aparatos franceses. Atrás quedaron 300 lo­comotoras y tractores averiados; casi 20.000 vago­nes de ferrocarril quem ados y miles de toneladas de suministros y municiones. El 5." Ejército había volado 248 puentes tan sólo en su zona.

Sin embargo, la mayor parte de este material pe­sado fue pronto reem plazado. El 26 de marzo, Winston Churchill, ministro de Municiones, rela­cionó 1.915 cañones que iban a ser enviados a Haig el 6 de abril. Las fábricas de municiones trabajaron sin parar en Semana Santa. La producción de am e­tralladoras fue de 10.000 al mes. El CG pidió 230 millones de proyectiles de armas ligeras el día 26 de marzo o antes, siendo esto el 9% del total de 1918. La producción de carros fue superior a 100 al mes. Antes de un mes desde la Kaiserschlacht, la fuerza de aviones en servicio de la RAF había cre­cido de 276 a 1.310 y su total de pilotos instruidos a 374 (9 de marzo al 6 de abril). Esto se hizo a pe­sar de la mayor tasa semanal de derribos de la guerra, o más de 19 tripulaciones aéreas perdidas

Page 94: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

► Un puesto de socorro de campaña del 17 Ejército alemán cerca de Arras, en1918. El lugar parece recién ocupado y totalmente provisional. De entre todos los preparativos de la Kaiserschlacht de Ludendorff, los sanitarios fueron los menos exitosos. Se quejaba de que los heridos ligeros se apresuraban hacia retaguardia de cualquier manera. De hecho, un Of., o Sub. y un soldado (de una Cía. deametralladoras), heridos a principios de abril necesitaron tres días de marcha y escalada de cerros para llegar a San Quintín. Incluso un Of. de las Stosstruppen herido el segundo día tuvo que buscarse su propio transporte hacia retaguardia. Un jefe de pieza AA declaró que los carros de forraje tirados por caballos se emplearon en el último momento para la evacuación de bajas, cuando éstas sobrepasaron a las expectativas.

► Un infante británico muerto con su herramienta de trinchera a la izquierda. Se ha improvisado una cubierta por encima de la cabeza con láminas de cartón tras un muro de ladrillo. El personal de Inf. de la BEF ascendía el 1 de marzo de 1918 a 514.637, y el 31 de marzo el director de Personal estimó las bajas sólo de Inf. y Cab. (esta última tuvo mayores pérdidas en abril) en 124.462. (IWM Q23684)

Page 95: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

por cada 100 salidas entre el 24 y el 30 de marzo, peor incluso que el «Abril Sangriento» de 1917. Se habían establecido 45 nuevos aeródrom os. La BEF recibió 111 locomotoras estándar y 2.042 vagones en abril y mayo. Tam bién estaban llegando locomo­toras norteam ericanas para apoyar a los ferrocarri­les aliados, que habían trasladado lateralmente un récord de 46 Divs. en 20 días.

Geográficamente, la Kaiserschlacht había creado una enorm e bolsa de 1.200 millas cuadradas, 40 mi­llas en el interior de las líneas aliadas, más terreno del que los franceses y británicos habían cedido for­zosamente al invasor en tres años. Sin embargo, ésta no contenía ningún pueblo o terreno de im­portancia estratégica o industrial, y el prestigioso prem io de Amiens estaba fuera del alcance de sus manos. Los aliados seguían teniendo dos líneas de ferrocarril norte-sur al oeste. El frente occidental había sido alargado en unas 26 millas y trece Divs. alemanas estaban situadas en una peligrosa cabeza de puente poco profunda sobre el Avre, al noroes­te de M ontdidier. Todavía estaban considerable­m ente al este de la línea alcanzada en agosto de 1914.

Pérdidas alemanas

Estos logros y trofeos de cara a la galería habían cos­tado a los ejércitos de la Kaiserschlacht la terrorífi­ca suma de 239.000 hom bres (datos de la historia oficial de 1944, el 10 de abril), un sacrificio de san­gre medio por día de 11.400 soldados. T an intenso desgaste no se había visto desde los gigantescos cho­ques frontales de 1914. El mayor ejército de H u­tier, el 18, tuvo 84.800 bajas entre 35 Div. implica­das, pero hicieron 51.218 prisioneros aliados en la prim era semana. Las tropas de Marwitz salieron proporcionalm ente peor paradas con 73.800 hom ­bres de entre 24 Divs. implicadas. La factura del carnicero del 17 Ejército de Below de 81.200 refle­ja su negativo y costoso avance hacia Arras, en el que doce Div. se unieron a las 17 originales. Ya el30 de marzo R upprecht registraba de 2.000 a 3.000 bajas por cada una de sus Div. No se dispone de las pérdidas en carros y Art., pero la cifra adm itida para la nunca com pletam ente participante fuerza aérea es de 76 aviones derribados.

Aunque las pérdidas aliadas fueron ligeramente superiores en personal, con muchos más hombres perdidos perm anentem ente como prisioneros, la pérdida cualitativa fue peor para los atacantes. Las «Stosstruppen» sufrieron fuertes pérdidas el 21 de marzo y el 4-5 de abril. Una Div. típica, la 185, de

2.a clase en la clasificación aliada, perdió no menos de 90 oficiales en el ataque «Mars» del 28 de m ar­zo, es decir, más de la mitad de sus jefes de Inf. Las bajas en tre los Sub. fueron igual de serias para el Ejército alemán. Los reemplazos inmediatos llega­ron en series de 400-1.000 por Divs., pero estos p u ­dieron ser reclutas de 1919 o heridos que regresa­ban. Num éricam ente no se sustituyeron los caídos, y tampoco tuvieron su elevada moral e intensiva instrucción.

Después de Kaiserschlacht

Im pulsado por los enormes logros tácticos de la Kaiserschlacht, Ludendorff atacaría cuatro veces más en los cuatro meses siguientes. N inguna de es­tas ofensivas posteriores igualaron a la Kaisersch­lacht en tam año o resultados, incluso el bien pla­neado ataque «Blücher» sobre el Aisne contra los franceses, que reconquistó el M arne a 40 millas de París (25 de mayo al 5 de junio). O tra brecha fue sellada, esta vez por las tropas norteamericanas, bri­tánicas e italianas así como francesas. A mediados de julio, cuando Ludendorff aún seguía intentan­do batir a los británicos con un golpe de gracia en Flandes, que su ataque a pequeña escala Lys o «Georgette» no había logrado, el equilibrio de fuer­zas se había vuelto inexorablem ente en contra de la Alemania imperial.

Foch y Haig no sólo tenían cantidades masivas de carros, proyectiles de gas y hum o para m ejorar el fuego artillero, y más personal en general, sino que también disponían de un recuperado Ejército bri­tánico que sería el elem ento principal de las casi continuas ofensivas aliadas de los últimos cuatro meses. Si la una vez única Kaiserschlacht se hubie­se dirigido hacia Flandes en marzo o abril, se po­dría haber producido una penetración en Haze- brouck y los puertos del Canal, destruyendo la zona básica más vulnerable de la BEF. Al dirigirla hacia el sur contra el débil pero resistente 5." Ejército se aseguró la intervención masiva de las reservas fran­cesas, acelerando la afluencia «Doughboy» a través del Atlántico y uniendo a los aliados en un m ando único que les llevó a la victoria.

Page 96: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

EL CAMPO DE BATALLA, HOY EN DÍAArras, Cambrai, San Quintín o Perónne son todas ellas buenas bases para visitar el amplio terreno de la Kaiserschlacht, m oteado con pequeños pueblos reconstruidos y bosques repoblados. Un recorrido en coche o autobús son los mejores medios de echar un vistazo hasta el momento de bajarse y apreciar el terreno o los m onum entos a pie.

Los soldados desaparecidos del 3." Ejército están relacionados en el m onum ento de Arras, al norte de la ciudadela de Vauban. La N319 al sur de Arras da acceso a la línea final aproxim ada del 3.ei Ejér­cito de Byng pasando por Ayette, Bucquoy, girando brevem ente en H ébuterne y Colincamps saliéndo­se a la derecha. El m onum ento a los desaparecidos del 5." Ejército en 1918 está justo antes del pueblo de Poziéres (más conocido por los combates de 1916). Desde cerca de Albert (m onum ento al C uer­po de Ametralladoras del Hotel de Ville), la carre­tera comarcal D52 conduce hacia el suroeste a lo largo de la línea del Ancre defendida por los aus­tralianos. El m onum ento a los guardias cerca de Ginchy (D20) es un buen observatorio para divisar la gran zona de la m archa en retirada al sur de Ba­paum e. La N44 hacia el norte de ese pueblo pasa por Sapignies, Behagnies y Ervillers, todos ellos im­portantes pueblos de la retaguardia. El saliente de

Flesquiéres está saliendo de la A2 desde Cambrai.La N336 conecta San Q uin tín y Longueau

(Amiens) cruzando el Somme en Brie y después la gran llanura de Santerre al sur del río. Al norte de V illers-Bretonneux se levanta el m onum ento mili­tar nacional australiano, dentro del cementerio mi­litar británico, ofreciendo una vista panorám ica de la zona de combate de abril. El museo de Sir Wi- lliam Leggat docum enta el pueblo y sus defensores. En Doullens (N I6 desde Amiens) la Sala de Conse­jos del Hotel de Ville, en donde se nom bró a Foch, se ha conservado y está abierta a los visitantes. M ontdidier y Noyon son buenos puntos focales para cubrir la parte francesa del frente de batalla.

En la zona de frente original del 5." Ejército pue­de encontrarse la colina M anchester a 1,5 millas al oeste de San Quintín. El fuerte de Vendeuil, el fuerte de ladrillo de los años 1870 que se utilizó d u ­rante mucho tiempo como un reducto del 5.” Ejér­cito, está al norte de La Fére sobre el Oise. Algu­nos caídos en marzo de 1918 descansan en el ce­m enterio británico de Vadencourt en la zona de combate original, tan sólo uno de los 164 cem ente­rios en esta zona tan sólo del prim er día de batalla, pero solamente 978 de los m uertos británicos po ­seen tumbas individuales.

A El fin de una Bía. de la Art. de campaña británica ante Albert, en marzo de 1918. Esta U., al igual que muchas otras, se retiró demasiado tarde para evitar el aniquilador fuego

de represalia. Los armones de munición parecen estar aún bastante llenos, y los caballos están sin arnés.La Kaiserschlacht sufrió unas no relatadas miles de bajas en animales.

Page 97: BATALLAS DE LA HISTORIA. 053.KAISERCHLACHT. 1918.pdf

CRONOLOGÍA28 de julio al 12 de agosto de 1914. Las principa­les declaraciones de guerra europeas.5 al 9 de sepdembre. La prim era batalla del Mar- ne term ina con las esperanzas alemanas de una rá­pida victoria en el frente occidental.1915 a 1917. La guerra de trincheras pone un p u n ­to m uerto en el frente occidental.23 de octubre de 1917. El jefe de operaciones de L udendorff escribe su apreciación de una ofensiva en 1918 en el oeste.11 de noviembre. L udendorff convoca una confe­rencia del EM en Mons para considerar la ofensiva de 1918 en el oeste.20 de noviembre. Ataque blindado británico por sorpresa en Cambrai.30 de noviembre a 3 de diciembre. Una contrao­fensiva alem ana limitada en el sector de Cambrai elimina los logros británicos.15 de diciembre. El armisticio de Brest Litovsk cierra oficialmente el frente oriental (ruso). Las con­versaciones de paz comienzan el día 22.27 de diciembre. Segundo consejo de guerra de Ludendorff.Enero a febrero de 1918. Fase de instrucción y re­fuerzo del Ejército alemán (21 Div.); reorganización invernal de la BEF desde el 10 de enero.21 de enero de 1918. Ludendorff se decide por la opción de ofensiva de prim avera según la opera­ción «Michael», tras visitar el frente. El «día D» para el 14 de marzo.1-12 de marzo. Los alemanes inician el despliegue de sus Us. terrestres y aéreas. La Inf. empieza a con­centrarse a 6-12,5 millas tras el frente. El príncipe heredero R upprecht consigue retrasar una semana el «día D», que pasa al 21.3 de marzo. El T ratado de Brest Litovsk establece la paz entre Rusia y las potencias centrales.10 de marzo. H indenburg distribuye la orden de operaciones de «Michael» y comienza el período fi­nal de la preparación de la Art.16-19 de marzo. 60 Divs. de Inf. se desplazan al frente.20 de marzo. L udendorff o rdena la «Michael» para las 4.40 del día 21.21 de marzo. COMIENZA LA KAISERSCH­LACHT: La operación «Michael» (tres ejércitos con 65 Divs.) destroza al 5." Ejército británico y hace re ­

troceder al 3." Ejército (un máximo de 27 Divs.) hasta seis millas, con aprox. las mismas pérdidas en un frente de 40 millas.23 de marzo. Retirada general de la mitad de la BEF hacia el Somme; el 3.er Ejército abandona Pé- ronne y el saliente de Cambrai. Las prim eras tro ­pas francesas entran en acción en el sur. Las fuer­zas alemanas a ambos lados del Somme reciben ahora la orden de dividir a los aliados. Punto críti­co de la batalla.24 de marzo. Comienza la crisis en el m ando alia­do. El 3.er Ejército de Byng pierde Bapaume; el 5." Ejército de Gough pasa a manos francesas.26 de marzo. Se ordena a la BEF defender la línea del Somme, llegando las reservas de Anzac al 3.er Ejército, pero pierde Albert. En la Conferencia de Doullens, Foch se convierte en el «generalísimo» aliado «de facto».27 de marzo. El 3." Ejército francés pierde M ont­didier, pero el resto del 5.° Ejército de Gough pe­lea heroicam ente para detener al 2." Ejército ale­mán.28 de marzo. La ofensiva am pliada «Mars» del 17 Ejército alemán en el sector de Arras (3.cr Ejército) fracasa ese día. Gough es sustituido por Rawlinson. Ludendorff ordena la «Georgette» contra Flandes en un plazo de ocho a diez días.30 de marzo. El 18 Ejército alemán presiona hacia Amiens.2 de abril. El 5." Ejército británico es oficialmente abolido (se convierte en el 4." Ejército).4-5 abril. Último em puje alemán hacia Amiens de­tenido a unas diez millas al este, a causa del agota­miento y de una defensa británica reforzada p rin ­cipalmente por los australianos.5 de Abril. FINALIZA LA KAISERSCHLACHT 9-29 de abril. Segunda ofensiva («Georgette») de Ludendorff, batalla del Lys.27 de mayo a 4 de junio. Tercera ofensiva de Lu­dendorff («BlücherYorck»), 3.a batalla del Aisne. 9-14 de junio. Cuarta ofensiva («Gneisenau») de Ludendorff, batalla del Matz o de M ontdidier. 15-17 de julio. Q uinta ofensiva de L udendorff («Marne-Reims» o «Friedensturm»), segunda bata­lla del Marne.18 de julio a 11 de noviembre. Las ofensivas alia­das de los «Cien Días» conducen al armisticio.