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Katja Brunner

demasiado cortas las piernas

von den beinen zu kurz

Spanisch von / Spanish translation by Carla Imbrogno

Buenos Aires, 2014

Gegengelesen von Maren Schiefelbein

Alle Rechte vorbehalten, insbesondere das der Auffhrung durch Berufs- und Laienbhnen, des ffentlichen Vortrags, der Verfilmung und bertragung durch Rundfunk und Fernsehen. Das Recht der Auffhrung ist rechtmig zu erwerben vom: All rights whatsoever in this play are strictly reserved. No performance may be given unless a licence has been obtained. Application for performance etc., must be made before rehearsals begin, to:

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Katja Brunner

demasiado cortas las piernas

Traduccin de Carla Imbrogno. Buenos Aires, Argentina, 20141 La traductora agradece a Maren Schiefelbein la lectura atenta de esta traduccin.

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Una pieza teatral para cuatro o cinco actores o actrices, o trece hombres en salida de bao. Todas las voces corresponden a un yo femenino. Por lo dems, la realidad es cuestin de interpretacin, incluso ms all de la propia percepcin del yo. OPERACIN 1 1 sta es una versin para la escena que prioriza los usos de la oralidad y no sigue estrictamente las reglas de estilo y normativa en espaol. A pedido de la autora y de la editorial alemana, tampoco sigue estrictamente las reglas de puntuacin en espaol sino que reproduce los cortes, pausas o interrupciones en el ritmo presentes en el original. El original no mantiene un sistema uniforme o regular en cuanto a la puntuacin y el uso de las maysculas y las minsculas, sino que ambos son ms bien aleatorios. Los saltos de un tiempo verbal a otro tambin son un rasgo propio del texto en alemn, que busca dar cuenta de la fragilidad y relatividad de toda perspectiva, todo relato, todo recuerdo. Como en el original, la falta de punto al final de una frase o voz indica una transicin menos abrupta o una continuidad entre una y otra voz, mientras que la existencia de un punto al terminar una frase indica un corte ms contundente. Del mismo modo, la existencia de una minscula inicial detrs de la raya de dilogo implica continuidad o bien menor mpetu en el comienzo de la frase, mientras que la mayscula indica un mpetu mayor. La raya (), cuando aparece sola y con espacios, indica una pausa mayor a la que sugeriran por ejemplo una coma, un punto y coma o los puntos suspensivos. Ante dudas, intencin de publicacin o puesta en escena, se ruega tomar contacto con la traductora para adecuar la versin a los requerimientos del caso: textkabinett@gmail.com. [N. de la T.]

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Mis piernas no me pertenecen, eso que estoy viendo no es mi cuerpo es un accesorio anexado a un centro pensante fue ensamblado en el vientre de mi madre escucho una voz: de a poco debera ir volviendo en s. Una luz clara un piiip montono el aliento involuntario acelerado intento controlarlo ahora detenerlo contener el paso del aire no puedo es como si respirara desde afuera En la parte trasera del centro de pensamiento un latido sordo no s a qu se debe carraspeo en un intento de interrumpirlo Hambre sed anhelo de una explicacin o al menos de un sorbo de jarabe El latido sordo se extiende involuntario por las orejas por todo este accesorio un latido que nadie advierte supongo, apenas alcanzo a ver mi pecho agitndose trmulo como una mariposa, el aleteo exiguo de una mariposa, ha perdido el polvillo sobre sus alas una contraccin nerviosa descontrolada espstica de reojo veo cables vendas mangueras tenazas ganchos luz que se proyecta sobre bandejitas plateadas mi rostro se refleja deformado un ruido continuo viene de algn lado y se va, como se va mi pecho, unodostrescuatrocincoseis persigo esa voz quiero que pueda dirigirme no un sueo febril no una sirena de alarma solo quiero que esa voz pueda dirigirme mi aliento no me pertenece mi voz no me pertenece ser que no tengo cuerdas vocales consternacin dnde estn mis cuerdas vocales pienso en voz alta dnde estn mis cuerdas vocales repito Dnde estn mis cuerdas vocales, un mantra uno que nadie oye solo mi pensamiento, la pregunta da vueltas y vueltas a mi pensamiento hasta que VOCALES se funde con DNDE las palabras se superponen DNDE devora VOCALES Hasta que me hago encima: me han inmovilizado, me han inmovilizado o

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Un pao, un pao mortuorio drapeado sobre mi cuerpo rectificado del torso a los pies quiero movilizarlo pienso en mis pies pies como fango endurecido una voz se acerca Vamos es hora de alimentar a las fieras Una risotada. Hoy tenemos men del Mediterrneo, no parece hacerle ilusin Pienso vamos, ahora sonro a partir de ahora mi central de pensamiento lo mueve todo, decido con la esperanza de que la idea traiga consigo el movimiento por delante me sirven algo mi cabeza imposible rotarla el campo visual limitado qu es eso ser una bandeja naranja y sobre la bandeja taza plato partes de un cuerpo una mano me pone sobre el pecho una servilleta Usted sabe, para no mancharse Escucho pasos, delante mo una mano, tenedor cuchillo mechero infusin, escucho el agua hirviendo, veo una cacerola alguien que la vierte un enfermero procurando que el agua llegue a mi taza de a gotas con todas mis fuerzas trato de usar mi voz DNDE ESTN MIS CUERDAS VOCALES Hasta que l sin quererlo la derrama Lo siento Fue un chorro largo como un chorro de meo No pasa nada l grita

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Lo siento no fue mi intencin sanar pronto disclpeme Espero a que empiece a doler listo ya Nada Nada de nada Inclinado sobre m sonre, justificndose El enfermero al borde de la cama ahora tan solo un nio en un cuerpo que le queda demasiado grande la cabeza descuella entre los hombros Murmura algo Sorry Toma la cacerola La vuelca generosa Una cacerola grande, por cierto Que ahora exitosa se vierte sobre m Imagino lo caliente que debe estar el agua Cambio de forma el latido sobre mi pecho se ha desplazado hacia abajo y qu veo ahora un criadero de ampollas montones de ampollas brotando de la piel bullen en

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la superficie como en una olla infernal mi piel por qu habra de odiarla un espectculo natural El enfermero nio y yo Contemplamos fascinados esto es lo mejor de todo la cuadrilla de ampollas cmo conquista su alrededor ahora trepan en direccin a la cara cruzan la clavcula toman el cuello una danza de ampollas que llega hasta la barbilla esa ligera protuberancia por debajo del labio inferior las ampollas avanzan y en la central de pensamiento ya ni siquiera me pregunto por las cuerdas vocales Se escucha la puerta el burlete de goma que se aprieta otra vez abierta pienso Ay Dios ah viene otro espectador ubcate junto al enfermero nio Ser que est limpio el mdico su guardapolvito el mdico de las manoplas El doctor Doctorus Plmula Tarntula examina las ampollas enormes sus ojos abiertos ante mi rostro comprueba que proliferan me hace un guio en seal de reconocimiento Pero qu conejita ms encantadora ESCALDADURAS SON BUENAS PARA ENDURECERSE ES VITAL PARA USTED LAS AMPOLLAS SE REABSORBERN LAS LLAMADAS AMPOLLAS TEMPORARIAS AS LES DECIMOS NOSOTROS ES UNA FORMA DE AYUDARSE A USTED MISMA, A LA INVESTIGACIN CIENTFICA, A NOSOTROS

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Si miro al frente todo el tiempo estn ah rodeando mis ojos las ampollas permanentes como las llamo yo estoy a punto de hacerme encima supongo pregunto a los gritos DNDE ESTN MIS CUERDAS VOCALES El doctor Doctorus sonre, mete la mano en el guardapolvo, saca algo, dice Esto es para el postre Es algo hecho de piel, irrigado rosado henchido embutido lo miro de arriba abajo, concentrada toda mi concentracin est puesta en ese postre, se me vienen a la mente morcilla butifarra ahumada asada salchichita de Viena salchicha de pap me detengo en la salchicha de pap me detengo con una sonrisa involuntaria creo que se me nota en la cara me pregunto, estar edulcorada El regocijo de los hombres es la hoguera de mi regocijo el enfermero nio se inclina sobre m los codos casi sobre mi rostro no quiere contagiarse las ampollas ardientes recula un poco cuchillo y tenedor en mano se pone un guante primero despus el otro el doctor Doctorus hace un gesto de asercin lo que tengo es ese innegable regocijo interior por la salchicha de pap los brazos manos dedos de los pies msculos huesos cbito y radio y todo lo que viene al caso para trozar ahora la salchicha de pap en pedacitos de lo ms finos casi como rollitos deben ser un postre especial un posludio del cual me encantara poder rer ahora l me abre la boca Garganta profunda sonre satisfecho el doctor Doctorus por encima de sus gafas la mirada fija de su concentracin me obsequia atencin exclusiva tanta que casi la gozo, el enfermero nio pincha un rollito con el tenedor me lo mete en la boca los nervios del gusto

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quiz pero no, qu lstima el enfermero nio se me acerca viene a socorrer la paralizada musculatura maxilar fuerza el movimiento de masticacin abre cierra abre cierra peligrosamente se rozan unos con otros los dientes por el ruido que hago al mamullar escucho que mi deglucin est intacta cuento los arrolladitos restan trece qu alegra debo estar salivando quiero decirle al enfermero nio que ser delicado es otra cosa, igual pronto tendr otro cuerpo lo doy por hecho

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NACIMIENTO

La escena de pujas Un nacimiento como muchos otros Como muchos otros Incorrecto, el nico en su tipo Aj Ah viene saliendo, no expedito, no, un parto ms bien complicado Hay que imaginrselo ms o menos as, como cuando un nio infla el cuerpo de una rana soplando con una pajita, se hincha, se llena de aire, el cuerpo se dilata, la piel se estira y tensa al mximo crece redonda, redondendose ms, repleta, presin excesiva sobre el bajo vientre de la parturienta, solo que aqu no todo no todo es nicamente aire como en el cuerpo de la rana, no, es todo lo que este incubadero conlleva lquido amnitico, tejido, sustancias glandulares, colgajos en este incubadero que ha estado transformndose en los ltimos nueve meses, el conjunto de los trastos del tero eso, transformado, para colmo cambio hormonal y ahora encima la criatura, la criatura hace las veces del aire que viene de la pajita en el ejemplo de la rana, bombea, todo se hincha, todo presiona tanto y con contracciones en este bajo vientre incluida la criatura, que no quiere otra cosa que salir y que ahora casi perfecta est lista, casi perfectamente armada, provista de todo esta criatura y todo el bagaje pueril que la rodea, el necesario para abastecer los nueve meses que dura el engorde, la criatura y todo eso estira el vientre hasta dejarlo fino como el papel, estira la piel de la parturienta ah abajo y cuando est tirante a punto de rasgarse, a punto de que le estalle la cabeza por la presin excesiva, y la garganta constreida empiece a escupir fontanas de sangre, se desgarra por abajo, ah donde presiona la cabeza de la criatura que entonces s, increble, empuja como una ola, s, como una ola sale la cabeza con el pequeo ser humano anexado pero en lugar de salir sin ms por el agujero desgarra algo, y desata un aluvin Algo que en el momento a la propia parturienta le pasa desapercibido, algo que solo advierten los que ayudan al parto

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como sea fue ms bien complicado, tuvo consecuencias daos, laceracin perineal Y la madre, mal que nos pese, lo malentendi, lo malinterpret, lo tom como una decisin macabra de quien estaba por ser parida, como la decisin consciente de causarle dolor Aunque en el momento le pas desapercibido, con semejante desgarro que provoc la cabeza de la criatura, y el aluvin que se desat en su cuerpo, con semejante torsin de la criatura impulsndose como un can para salir a la luz Esa criatura tendra que haber quedado dentro Por qu o haber muerto dentro, nacido muerta Porque adentro estaba segura y protegida Dependencia forzada era eso Un incubadero como ningn otro, nunca ms estar tan contenida, solo le hubiera faltado un hermanito, uno que fuera engordando con ella, en el mismo vientre abastecido con todo lo necesario para la vida para eso el padre tendra que haberla llenado un poco ms, para que al lado se hubiera engendrado otro engendrar ya no le sera posible, porque el perineo no fue lo nico que la criatura se llev puesto con la cabecita, no fue lo nico no, desprendi todo el incubadero, lo enganch con sus dedos lo arranc, con sus puitos vigorosos se llev consigo una buena carga de interioridad, todo se desgarr tanto que prcticamente cay por s mismo, un abismo La conjetura, la imputacin entonces, de que lo hizo a propsito, no puede ser tan errada lo que pasa es que la madre nunca lo expres as, nunca lo formul as no obstante lo cual o pese a eso quiso examinar su placenta despus, porque los gatos y eso se comen las protenas y ella quiso ver sus secundinas, quin sabe, me habrn mostrado de verdad las mas da igual, las huele pero sin probarlas, el personal de enfermera no debe notarlo y despus de ese parto, despus la invadieron el cansancio y la certeza del desgarro, porque en algn momento fue cediendo el efecto del cctel de calmantes y

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porque le pareca injusto estar sola en la habitacin del hospital, porque a la criatura la haban estacionado transitoriamente en algn otro lado, no junto a ella, si bien alguien se la haba puesto en manos mejor en brazos s, mejor, en los brazos y ella no supo cmo sostenerla si bien haba visto muchas veces cmo se sostiene a un nio, y tambin haba sostenido a los hijos de otros, a su ahijado 1 y su ahijado 2 y su ahijado 3 durante un tiempo haba estado juntando ahijados metdicamente, as que todo el mundo pens, seguro que no tendrn hijos, esos dos y ahora el milagro una nia sali estallando del vientre materno con el puo firme lo registr muy bien, la madre, el desgarramiento del cual ahora es consciente mientras que afuera en el pasillo el padre toma conciencia abruptamente: Esto es lo nico con vida que engendraremos juntos esta nia y eso le provoca S, qu le provoca tristeza no, alivio No, tristeza. Aunque saba, en su mente, lo saba en su mente: es probable que solo haya UN hijo, a lo sumo, desde el principio tuvieron que vencer dificultades que enfrentaron tomando medidas para favorecer el embarazo tratamiento de fertilidad, clavo de olor en el primer cajn de la mesa de luz, consultas al chamn, babytimer, bocetos manuscritos para incentivar la produccin esto fue al principio, despus sigui el camino de rigor hasta la fecundacin in vitro y ahora contentarse con esta nia es esto un hecho positivo para el padre, s lo toma con naturalidad: poner todo el amor en un hijo, no puede ser tan malo Pero haban estado mirando lugares ms amplios para vivir, en eso est pensando la madre, con dos cuartos para nios, un jardn alrededor, por qu no construir un estanque donde las ranas pudieran desovaran, y al final ahora contentarse con el apartamento en el centro de la ciudad piensa

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decepcionada S, bastante. Y tambin de alguna manera furiosa, siente que la nia es ingrata, tantos preparativos, tanto esfuerzo, tantas idas y vueltas y ahora la nia desgarra las instalaciones para cualquier otra vida que pudiera venir Acaso no la colma el instinto, el amor maternal, acaso no defiende su derecho ms primitivo de saber qu significa ser madre, pero si es algo que se trae en los genes etcteraetctera

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EL CUENTO DE LAS PIERNAS DEMASIADO CORTAS Haba una vez un rey, el rey estaba casado. Su esposa, la reina, alguna vez haba sido una bruja, pero una bruja que haba depuesto sus propios dioses para tomar por Dios al rey. Haba cado de rodillas ante l para rezarle y ese fue el fin de la autonoma, algo que no obstante a nadie incomodaba, las cosas estaban muy bien as como estaban. Pas mucho tiempo sin que hijos coronaran el matrimonio. Tras una serie de congestivos abortos en algn momento rept de las entraas maternas una princesa, se liber de entre las ptridas vsceras de su madre, una pequea revolucionaria con la corona ya puesta desbroz el camino desde su madre hacia fuera, la coronita un adorno para esa testa dorada, la existencia de una exponente tan bella en su gnero era un elogio para todas las fminas. El padre sin embargo no se vio complacido por el nacimiento, quera un varoncito vigoroso, un heredero al trono, un prncipe negro, un guerrero, un luchador que supiera apreciar la sabidura de pap. Ahora en cambio ah estaba, en medio de esa feminidad que lo asqueaba una feminidad todava discreta, aniada, la que por cierto no lo interpelaba ms que para de alguna manera descargar tensiones. No haba pues otra salida que buscarle a todo eso cierto costado positivo, algo que la belleza en absoluto modesta de la hija facilitaba. As las cosas alz a la nia, y erigi para ella un trono, un trono especialmente invisible concebido por alquimistas. Desde aquel da la princesa ocup ese trono que le quedaba demasiado alto, tanto que sus pies no alcanzaban el suelo, tanto que cualquier movimiento hacia delante o atrs hubiera significado caer a lo profundo. Decidi entonces quedarse donde estaba. Y colorn colorado, si no ha muerto, ah est sentada hasta el da de hoy.

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CONSIDERACIONES En ella habitan unos quince pensamientos a la vez Lo crees Unos quince pensamientos a la vez girando en torno de lo mismo: es injusto, es injusto, es injusto Acaso lo es el pensamiento no lo es el pensamiento: es injusto, es injusto el pensamiento no lo es per se, es solo un pensamiento, no quince qu ms quisiera ella que estar enfurecida, pero la furia sera furia consigo misma y cmo podra estar enfurecida consigo misma, tan enfurecida la furia destructiva uno la deja adentro De dnde sacas eso es lo que le dijeron a ella, que mejor debe dejarla adentro, porque descargarla pondra en riesgo su vida y si su vida est en riesgo podra tener efectivamente un desenlace fatal, y todo esto se debe simplemente a que las personas con semejantes historias evidencian un comportamiento autoagresivo incapaz de volcarse hacia afuera, ms bien se vuelca hacia dentro, como una pequea marca de fuego, o un juego: qu tanto puedo tajarme el antebrazo izquierdo con la mano derecha, cortes en los genitales, alfileres en los labios vaginales etc etc, estas personas tienen aos para elucubrar suficientes de estos jueguitos Ella tal vez no lo hace, hay que ocultar los indicios por eso por eso solo se lo imagina acaso una forma de encontrar satisfaccin Hace rato que se quit de la cabeza el captulo de la satisfaccin los pinchazos, la sola idea de volver a rascarse y abrir una herida de dos das, evitar adrede cortarse las uas de los pies encarnadas, cigarros encendidos rozando el sobaco, las partes ntimas solo se lo imagina, no lo lleva a cabo, le falta coraje eso sera coraje no, quiz falta de furia suficiente consigo misma

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porque ella misma ya se ha perdonado quiz en cierto sentido se ha perdonado, es que le han dicho que debe, tiene que perdonarse, que ahora es indispensable que de una vez entienda aunque al principio ms no sea con la cabeza que da igual el lugar, el tiempo, cmo, qu tan duro, da igual cul haya sido su participacin, quin es o era el o la autora del hecho, da igual porque no haba forma de que ella pudiera evitarlo y todos, TODOS, expresamente TODOS los adultos saben que est terminantemente prohibido hacer este tipo de cosas con menores de edad en efecto, terminantemente prohibido y eso se lo han dicho y es como un mantra que ahora ella repite para s, a diario en realidad, como un ruego a la Meca, solo que sin mirar a la Meca, lo repite para s a diario: tengo que perdonarme, tengo perdonarme Y como se lo repite a diario, a veces incluso frente al espejo de un probador frente al reflejo que le devuelve la ventana del autobs cuando afuera ya es de noche, por eso ahora lo sabe muy bien y lo saca a la luz como algo valioso, revuelve entre sus huesos craneales sacndolo afuera como un obsequio de otro tiempo, es que as de extrao le resulta Eso de perdonarse obviamente, es que da igual que deba perdonarse porque no es capaz de llegar hasta un lugar donde la palabra PERDN realmente tenga sentido, hasta una superficie que sea sensible al perdn, porque aquellos que se lo insinan buscando convencerla no saben nada de esa superficie, apenas saben reaccionar como lo han aprendido, con la mejor voluntad y por gratitud frente a esa buena voluntad, por esa buena intencin ella repite ahora su pequeo mantra Tengo que perdonarme Debes repetirlo mientras te lavas los dientes, mientras doblas tus soquetes, mientras pelas zanahorias, mientras te atas los cordones se entiende

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tambin le han dicho, es bueno que nos lo cuentes. Y entonces escarbaron, insistieron, queran, deban examinar exhaustivamente las circunstancias del caso, claro que con cuidado, claro que con ternura casi, pero igual hay que indagar los hechos concretos, ir a fondo, ser que esta criatura ha mentido, esta criatura est mintiendo, hay que ponderar todas esas informaciones, y toda esta indagacin a la criatura no la ha perjudicado en absoluto porque a posteriori le dijeron: Contarlo todo es parte del proceso de elaborarlo y ella asinti y lo cont, cuando tuvo ganas en lo ms ntimo de s quiz admitieron, en voz baja, sin que nadie lo escuchara realmente, que a lo mejor sentan algo de curiosidad, por ese objeto de escrutinio, dicen que no es bueno barrer el polvo bajo la alfombra, hay que sacarlo afuera para que todo est bien y le hablaron de respeto y quiz hasta lo tuvieron, poco a poco

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JUSTIFICACIN (AMOR A LOS ANIMALES) Otra cosa mi padre tambin amaba, amaba a los animales. Para cada una de las letra que existen, todastodas de la A a la Z poda nombrar uno un animal de la lista roja esa lista internacional, una especie de catlogo de especies amenazadas menos para la zeta, para la zeta no nombraba ninguno. Porque yo siempre me le adelantaba: ZORRINO Y l se rea, me haca cosquillas tenamos un vnculo corporal de lo ms suelto y exclamaba ZENIT. Es que sola mirar al horizonte angustiado por el futuro de tantas especies perdidas digamos condenadas a la extincin, o bien y ah fue que me sensibiliz con el tema porque era un optimista, un optimista realista, como deca de s mismo, en fin, porque lo era, le conceda a la zeta el zenit: el futuro. Me ense a tratar con la naturaleza precaucin, respeto, era un intuitivo nato, capaz de pronosticar el tiempo mejor que cualquier reporte climtico y sin hacer trampa, no solo cinco minutos antes cuando los mosquitos vuelan bajo, la verdad es que hasta hoy no s muy bien cmo lo haca es que tambin poda aprenda rpido los animales los animales ese era su tema permanente, qu hacer para evitarlo, para evitar la degradacin inhspita aplastante vertiginosa de nuestros ecosistemas, no poda dejarlo, lo tocaba en lo ms hondo de s, todo eso. Como si no pudiera seguir viviendo sin las ranas toro. Y sin el pato azuln menos que menos. Deca, imagnense si no hubiera ms patos azulones. Imagnenselo un momento. Yo no quisiera seguir viviendo. Lo estn haciendo, imposible de detener, y lo seguirn haciendo hasta que no quede ni un solo pato azuln. Se la pasaba hablando de que en los ltimos varios miles de millones de aos hubo solo cinco extinciones masivas, como la de los dinosaurios y que nosotros estbamos provocando otra, nosotros nosotros, el primer delito gigantesco contra nuestra Tierra cometido por la mano humana

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etctera etctera. Llenaba las cenas con todo eso, exposiciones de lo ms variadas, a veces en versin doble, una primera exclusiva para mam y otra infantil a mi medida. Aprend muchsimas cosas. Una vez de esto hace bastante de repente apareci un venado en la entrada del garage nos miraba sin miedo orgulloso dira. Una imagen inolvidable, que inmediatamente se destruye el venado, apenas un cervato todava, se derrumba, literalmente se desploma, pap me toma de la mano, me levanta de un tirn, corremos hacia el lugar del accidente, dos giles mdicos de urgencia, advertimos rpidamente: en el costado izquierdo tiene una herida de gran superficie infectada purulenta al principio un shock, excitacin, mucha adrenalina. Con cuidado, con sumo cuidado pap lo llev hasta la casa, el venado estaba como ausente, de veras extenuado, ni siquiera se defenda. Poco a poco fue cobrando fuerzas, pap lo cuid para que se curara, sanara, como dira l. Cuando lo pusimos en libertad ya no era un cervato, ah ya estaba grande, ya crecido aunque joven, pero crecido "listo" como yo deca. As a ms tardar fue que aparecieron animales en nuestros juegos, l jugaba conmigo al mapamundi, ah est Asia, donde vive la rana toro aunque no por mucho tiempo, ah est Amrica del Norte, donde viven fulano y mengano aunque no por mucho tiempo, ah est Europa, ah est Suiza y ah vives t aunque no por mucho tiempo.

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JUSTIFICACIN

Es hora de cambiar la perspectiva aclarar que no es que alguien se haya APROVECHADO de m que haya fingido amor contencin dedicacin para despus tomarme prestada como juguete hay que erradicar esa creencia adaptar el cdigo penal, para el cdigo penal un beso en la boca ya es un acto sexual, hay nios que quieren que sus padres los besen en la boca lo ven en la televisin y eso no tiene nada de perverso si mirramos con otros ojos el amor a los nios habra varios que se pondran de pie, admitiran tener ese tipo de inclinaciones y estoy hablando aqu en nombre de mi padre pero tambin en nombre mo, que no se pierda de vista esto, si ahora levantaran la mano todos los que tienen esa predisposicin natural el mundo entero estara consternado. Ese por ejemplo a quien mi nia adora, a quien tiene tanto que agradecer, quiero decir, a esas personas tan sensibles por desgracia no se les reconoce todo lo bueno que dan de s. Es lo difcil de la cuestin. Lo que obstaculiza un cambio de mentalidad. Pero insisten con la regla de que UNO DE ESOS igual ABUSADOR DE MENORES as ningn amante de nios se pondr de pie, con semejante clima de aniquilacin. Ninguno se pondr de pie y dir s, he pasado con mi hija su primera noche y s que le ha hecho bien. Dejemos atrs la fobia y volvamos a sentir correctamente con el cuerpo y hagamos un trabajo de esclarecimiento que no haga todo mal desde el principio. La introduccin la debera dar alguien bien intencionado y si la criatura pide un beso y ha desarrollado un deseo, una curiosidad, es probable que eso sea perfecto para la criatura, siempre y cuando el acto se adecue al grado de su desarrollo fsico.

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MADRE Haba ido al mdico para un chequeo creo S, un chequeo general, cncer de mama y eso, palpacin tacto etctera y no haba dicho cundo volva a casa, haba dicho que quiz pasaba por lo de su madre que estaba en cama con gripe, abandonada a su propia suerte, quera pasar un rato por lo de su madre, no dijo a qu hora regresaba y entonces bueno, o acaso abre la puerta de la casa en el camino pas por la confitera, el paquete con la torta en una mano y la cartera en la otra, deja el manojo de llaves en la mesita junto a la puerta lo hace todo sigilosamente, quiere sorprenderlos, es que trae torta de limn y tartn de frutillas para la pequea, va en puntas de pie, se asoma al escritorio Nadie por aqu Nadie por aqu No, nadie por aqu, qu gracioso piensa, dnde se metieron Seguro estn en el living y camina en silencio por el corredor, ah tampoco estn en el parque quiz imposible, al entrar vio los zapatos, estaban tal como la pequea los haba dejado tirados botas de lluvia da igual a lo mejor no da igual porque si fueran botas de lluvia ella no considerara la posibilidad de que pudieran estar en el parque, un padre responsable no va a jugar al parque bajo la lluvia, por lo menos NUNCA sin botas adems estamos hablando de una criatura, una criatura se empecina y se pone sus botas hasta con buen tiempo, no es ninguna novedad como sea ahora va y se fija en el bao, siempre en silencio y en la cocina, nada. Y escucha ruidos en el dormitorio as que va, no presiente algo, o

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simplemente aunque inquieta sale volando hacia el dormitorio y se asoma por la puerta que est entreabierta lo que ve dos personas durmiendo, una ms pequea desnuda, sin ropas, la manta la cubre hasta el ombligo digamos, una ms grande tambin bajo la manta roncando sumida en un sueo profundo se dejaron llevar al punto de quedarse dormidos. Qu clase de cuidado es ese atencin a lo que viene ahora: la pequea no est durmiendo, abre los ojos sbitamente, de inmediato ve a la mam, levanta una mano para saludar, mimosa le hace seas para que se acerque la madre no puede creer lo que ve claro que puede creerlo, est en su sano juicio bueno y entonces, qu pretende creer no puede CREER lo que SIGNIFICA esa imagen siguiente pensamiento: ella ocupa mi mitad de la cama luego baja la mirada, no lo soporta, desestima la sospecha siguiente pensamiento: tomaron un bao y cayeron rendidos de sueo, el agua tibia de la baera, tan agradable, desata el cansancio e invita al descanso pero la autocomplacencia en el rostro de la hija no se la puede explicar y por qu no dice nada, est despierta, le puede hablar porque no quiere despertarlo a l, una vez que ha cado en un sueo profundo, sera martirizarlo as que se va y corta la torta noms o qu. Prepara el caf, los llama, lo despierta con mimos espera or sus excusas intiles que estuvieron correteando por el living, sudaron a ms no poder y luego tomaron un bao, un bao refrescante, acalorados como estaban, y se entregaron a la cama rendidos de sueo y la pequea quiso dormir con el pap en la cama matrimonial como cuando era muy muy chiquita y se sali con la suya exigi una vez

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que pap dispona de un da entero con su hija ella tambin tena a derecho a dormir la siesta con pap etctera etctera y en lugar de seguir indagando la madre sonre conmovida por lo bien que se llevan padre e hija Tampoco tanto supongo l evita entrar en detalles ya que ella no lo menciona As que ella se dice, si l no lo menciona es porque no ha pasado nada raro y se niega a s misma que haya sido cierto lo de la mano, la mano hacindole seas y lo de la mirada de alguna manera extraa de la hija, se lo ha imaginado, es todo producto del nimo turbado despus de la consulta mdica, eso no, la escena que ve tiene que haber sido otra, tiene que haberlos encontrado de otra manera en el dormitorio tambin lo creo porque de lo contrario la pequea y ella compartiran algo pero no, ellas dos jams compartiran algo abierta o secretamente. No, no compartiran nada a lo sumo quiz el amor por el mismo hombre a lo sumo cuando se asoma en realidad ve a su marido de espaldas sobre la cama con los dedos en su hija entre los cabellos No, entre las piernas y su hija de rodillas a su lado y Por qu no grita, si lo est viendo, por qu no rene a sus vecinos a los gritos, testigos pero si est pegando unos gritos lacerantes, desgarradores, no la escuchas escucho, el grito de amor, de una madre desde sus entraas, ah donde madre e hija alguna vez fueron una, de ah viene el grito y penetra el afuera No, no puede largarlo, el grito se le queda atragantado Ser que cae muerta: ahogada en su propio grito No, es descabellado: gira, da media vuelta, el paquete con la torta en una mano, la cartera en la otra, toma el manojo de llaves de la mesita junto a la puerta, sale cerrando la puerta muy despacio, sin mirar atrs, no toma el ascensor, cuenta cada

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uno de los escalones hasta abajo, empuja la puerta de vidrio, se dirige a su automvil, abre, sube, se va adnde a la comisara a la oficina de la mujer quiz intuyo que lisa y llanamente condujo, por horas, como lo ha visto en las pelculas, donde los protagonistas conducen por horas a campo traviesa cuando han descubierto algo terrible, cuando lo han reconocido, cuando se han iluminado, lo que fuera, para dar un giro a su vida tras el volante, tomar decisiones fundamentales, autopsiar lo que ha sido su vida hasta el momento cierto yo opino que no reflexiona en absoluto, solo conduce, conduce hacia algn lugar, algn desvo, es que ahora no importa nada, no importa dnde desemboca el camino y el centro pensante est inactivo, puros retazos hay, retazos de imgenes que busca hacer a un lado para poder concentrase en la luz del semforo en rojo se distrae contando los pxeles diminutos que componen la luz del semforo en rojo tambin cuenta los postes que deja atrs a lo largo del camino, esos postes con o cuntas mujeres al volante vienen de frente una tarea casi estadstica solo conduce, arrebatada deja atrs pueblos estar pensando en vengarse vengarse de quin de l est demasiado aturdida en este momento, no sabe por dnde empezar no piensa en otra cosa que en irse volver alguna vez cundo llegar cmo podra LLEGAR si no existe un ADNDE hablo de LLEGAR al punto de tomar una decisin No lo hace

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S lo hace. Porque ya lo hizo. Qu cosa Nada. Cmo nada. De lo ms sencillo: no hace nada de nada. En parte tambin porque su ojo interior no puede librarse de la siguiente imagen: mi hija con esa verga en la boca. Pero en un punto lo que la tortura no es que sea SU hija sino ms bien, ms bien No piensa esa frase, seguro que no, seguro no piensa realmente en frases apenas en retazos de imgenes sin un epgrafe realmente pensado Pero sobre todo no siente compasin. No, exacto, no siente compasin. No piensa: con lo pequea que es qu le est haciendo qu indignacin y todo eso. Ms bien piensa: qu me est haciendo ella, mi propia hija, con MI marido. Ve la cuestin de mujer a mujer. No ve a la nia como una nia. A sus ojos no es ms que una pequea mujer y mujeres ms pequeas que ella las hay a montones. S, lo que est haciendo con SU marido la vuelve ms grande, la hace madurar. No se le ocurre pensar que tal vez ella no quiera hacerlo. Porque cuando piensa est demasiado centrada en s misma, no se le ocurre ni pensar que todo eso a la criatura quiz no le divierta. De hecho no ha llorado ni nada por el estilo, en realidad hace tiempo que no llora. Nono, estaba de rodillas a su lado de lo ms suelta, sacando la colita para afuera As lo ve ella. Por eso es natural que la perciba como una mujer y no como una que necesita proteccin. Y por eso se siente dbil, en lo que se dice la posicin de la ms dbil que se va en su automvil, se tiene que ir lejos y los otros dos quin sabe qu estarn haciendo. Ha sido excluida. Qu debera haber hecho. Qu debe hacer. Correr por las calles, por ejemplo, gritando a los cuatro vientos su pena

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La misma cantinela de siempre, porfavorporfavor que no empiecen todos a fustigarla con dedo acusador, quin le creera que no sabe nada, que su marido a su hijita, quin le creera que no es culpa de ella, que no sabe nada. Ms bien diran que lo permite, que incluso es cmplice, echaran a correr el rumor y la fustigaran con los dedos de toda una mano acusadora. Su madre, de por s ya dbil de salud, y para colmo engripada, de por s ahora todo es ms difcil para su madre con el marido muerto etc todos estos pensamientos le recorren la cabeza zigzag Ser que est a punto de provocar un accidente Pero por qu Por el zigzagueo en la cabeza Ah, no, por fuera est como quien hace la plancha de lo ms tranquila, demasiado tranquila dira como esa vez en casa cuando abre la puerta y grita: Hola, he llegado. Como lo hace siempre. Hola, he llegado. Y se entrega al abrazo de su marido, dnde has estado tanto tiempo, te mand un mensaje de texto, es cierto, se lo escucha llegar, y ella responde sin terminar de caer realmente en la cuenta que estuvo en lo de su madre paseando en el parque, con la madre, la torta y mientras habla piensa en el paquete con la torta tres pisos ms abajo en el automvil estacionado, el paquete que no lleg a subir, no pudo soportarlo, volver a traer torta, volver a comer torta se sorprende de s misma cmo puede seguir hablando cuenta una ancdota de su madre, la inventa espontneamente, se sorprende de s misma tendra que haberse dedicado a la actuacin s, con la hija con la hija, s ss, la hija y ella s, y ahora qu con la hija

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ya no le fue posible. es decir es decir, desde ese da no pudo ms con eso. Ese da podran haberla enterrado en lugar de la madre. Y entonces cada vez que la pequea se acercaba a ella, se arrastraba mendigando ser tomada en brazos, con esa mirada, semejante aspaviento, ella deba hacer un esfuerzo sobrehumano para no matarla a golpes para no exigirle explicaciones al padre no, ms bien para no matarla a golpes. Por culpa de la pequea haba tenido que volverse otra, dejar sus aires de grandeza eso tendra que haberse cocido la boca antes de volver a besar a su hija qu exageracin igual nunca habra sido una madre clsicamente amorosa, igual al principio al menos no le fue posible. Hoy lo es S, ha mejorado De todo se aprende algo. S. La hija tambin aprendi. Con el tiempo se acercaron, un poco. Nunca demasiado, nunca ntimamente. Pero la hija le cont mucho, pudo abrirse y hablar, tras larga resistencia interior la madre pudo escucharla, historias de la escuela, de los hormigueros en el parque, de los duendes tambin, mir con ella todos los dibujitos animados, cientos de veces la sirenita Ariel, Ariel en todas las poses que te puedas imaginar, Ariel y ms Ariel asenta con la cabeza en son de aprobacin y haca el intento, pese a todo pese a los gustos especiales del esposo de ser una madre pese a todo dadas las circunstancias de ser pese a todo una buena madre. y una buena esposa.

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JUSTIFICACIN Es que tena ganas. Estaba como para eso, con ganas justamente y eso, esa sensacin difcil de explicar, una sensacin justamente. Nadie le iba a decir a l lo que tena que hacer. Cuando un hombre un padre est solo y ah est su criatura, tan suave y tibia y de alguna manera bueno, de alguna manera ronroneando, agradeciendo caricias, receptiva, tanto que le da igual dnde la tocas y dnde quieres que te toque. A veces simplemente sucede. Y bueno, cuando ha sucedido una vez, cuando se ha cruzado un umbral de pudor, se pierde un poco el sentido de quin en realidad, y si hasta ahora no ha sucedido nada, entonces todo contina. Despus sucede que este padre simplemente vuelve a hacerlo, cuando tiene ganas o cuando la criatura tiene ganas. No lo piensa demasiado, son situaciones que se dan jugando, ms con un padre como el mo que trabajaba bastante en casa, me llevaba a su escritorio, y claro, no lo piensa demasiado, lo hace y listo. Como adems yo no opona resistencia. Y de alguna manera advierte que a la criatura le gusta, o. O, bueno, l ve la reaccin, la docilidad obediente, el regocijo de la criatura. Es parte del juego amoroso. Cuando uno se quiere, a eso me refiero. Cuando uno se quiere, uno quiere que el otro lo acaricie y quiere acariciar. Es normal. Aunque, es cierto que quiz en general se hace con una mujer, una adulta. Pero eso es otra cosa, o no. O, bueno, tiene otro calibre, de alguna manera, no sale de un lugar tan profundo, es menos carioso otra forma de cercana de alguna manera. Con una criatura, todo es tan pulcro para el padre, tan puro, la criatura ofrece su pureza, irradia pureza por el solo hecho de ser criatura, por la naturaleza de su cuerpo. Y es lgico que uno se deleite con esa pureza, que todava nada sabe de egosmo, es una consecuencia lgica esperable frente a semejante criatura cooperativa. Con una criatura eres ms entraable, tierno, mucho ms tierno, porque en efecto es mucho ms vulnerable, mucho ms, y entonces puede pasar que a uno se le crucen los cables, porque tanta ternura enloquece a un padre, la criatura enloquece al padre. Puedes dirigirlo hacerlo todo de acuerdo a tus necesidades. Y no te tiene que dar vergenza, nunca. Con una criatura, qu sabe una criatura y de ah la recoges, de su ignorancia. Si ni siquiera grita, solo de vez en cuando. Salvo que le causes un dolor inconcebible, pero no lo

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haces a propsito. Me consta que le causaba mucha pena causarme dolor, dolor corporal. Por otro lado con los nios sucede que Les acaricias la mano Y te acarician la tuya Les tocas la nariz con la punta del dedo Y buscan tocarte la nariz Imitan, incorporan modelos de comportamiento, es de lo ms normal, est claro. Y eso tambin le causaba mucha pena, se le notaba, tener que inventarse excusas y ms excusas o cuando de nuevo me tena que intimidar porque yo haba estado a punto de abrir la boca, no era algo que le gustara hacer en lo ms mnimo, deca l y eso a veces tambin se le notaba, pero no le quedaba ms remedio que hacerlo, tambin para protegerme. Poco me habra ayudado que lo separaran de m y yo me daba cuenta que l hubiera preferido mil veces tomarme en sus brazos, en vez de golpearme. Hacerme la hamaca, el avioncito, en vez de golpearme. Y creo que en algn momento se volvi una especie de compulsin sorda, como un ritual, eso, que forma parte de lo cotidiano, una especie de clmax cuando l siente aqu viene otra vez, y pierde un poco el control de s mismo, tambin porque yo estaba ah y lo notaba, ablandarse por dentro y volverse accesible. Entonces l no poda sino hacerlo. Deba ser algo as como un placer extremo. Y de algn modo una pulsin. Como sucede con las ranas, cuando uno captura una rana y la infla con una pajita, hasta que explota, uno lo sabe perfectamente, eso es tortura, no lo debera hacer, pero bueno en mi caso incluye ternura y un aprendizaje s y tambin por los beneficios es que uno lo hace de nuevo y de nuevo. Creo que conmigo le pasaba algo semejante. S y despus, despus me miraba tan tierno y sabiendo y de alguna manera culposo, ah yo me quebraba de compasin al ver lo mal que se senta y cuando necesitaba anunciarme: papito no lo volver a hacer. Yo no me inmutaba, porque estaba confundida y no poda terminar de asimilarlo porque lo que ms

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quiero en el mundo es estar cerca de pap y por eso qu poda responder ante semejante decisin, me haba dejado sola con eso. Pese a su anuncio volva a hacerlo una vez y otra vez, siempre despus de cierto perodo de veda un anuncio que al principio me intranquilizaba, hasta que en algn momento empec a desestimarlo por mera palabrera o por parte constitutiva de todo.

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JUSTIFICACIN (VIAJES)

Cuando se iba de viaje, eso, cada vez que se iba de viaje me traa algo. Por lo menos algo. Y claro que ahora se podra objetar, bueno los nios son menos pretenciosos que los adultos, se contentan con un plstico derretido y despus pintado, y seguro en cierto sentido es as, una cualidad digna de elogio que habra que tratar de conservar, digo yo, y como deca siempre traa algo, poda jugarme la cabeza a que traa algo, cosas de lo ms extravagantes, yo estaba como loca. Mi pap, que algunas cosas me las daba a las escondidas que por encima de sus gafas de lectura se me acercaba sigiloso con la mirada. Algo que solo yo entenda, nuestro pequeo acuerdo secreto. No necesitbamos decir nada, nunca en realidad, ese mutuo acuerdo, tcito, era el mejor regalo de todos, el ms valioso. Por ms que hiciera una pila con todos los regalos de navidadviajespascuascumpleaos, una pila alta como una torre, nunca, nunca sera una torre que tocara el cielo como nuestro acuerdo tcito. Es que era era como si estuviramos hechos del mismo material, nosotros dos, al punto que prematuramente supe que nunca nadie me comprendera tanto como l. Aunque debo decir que yo guardaba cierta distancia, y eso desataba su ser, que tomara distancia de l, en parte porque no quera afectar la magia, eso que era indescriptible, no quera perturbarlo, ms bien quera observarlo con el objetivo de entenderlo alguna vez Algo que todava no hago Pero no importa l supo transmitirme ese orgullo suyo Otra que supo corroborarlo fue mi abuela, cuando me iba a lo de ella a pasar un fin de semana y eso, corroboraba mi orgullo por mi padre, me mostraba el lbum de

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fotos, pginas papel de seda que pasaba con reverencia, me mostraba a mis padres, jvenes, pap abrazando a mam por encima del hombro, en un gesto de proteccin, cuidado, casi intimidado, me sorprende, mam sonre a la cmara, picarona, los rulos desordenados, mezquinos roosos casi, se ve que cultivaba esa onda, en ese entonces, en la foto el brillo del arito en la nariz. Estn sentados en el asiento trasero de algn auto, funda de cuero amarronado, por la luneta un camino de grava, acaso primavera, supongo que en el campo, la abuela cuenta, l logr sacarla de una muy mala poca, ella estaba desorientada, l un salvador, su caballero, eso. Para m tambin l siempre fue alguien a quien respetar, cuyos deseos cumpla sin contradecirlo, pero tampoco es que hubiera tanto que yo hubiera querido contradecir.

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MDICO

Van al mdico. De veras lo hacen Claro, van al mdico de cabecera, el consultorio queda a cinco minutos en auto el cinco lo interpretan como un buen presagio, este es el quinto mdico en dos aos y todava ninguno, ninguno pudo poner fin exitosamente al padecimiento en el consultorio: sala de espera corredor recepcionista mesita revistas peridico rincn de juegos La pequea se abalanza hacia el rincn de juegos acaso era el consultorio con la pista de canicas ese mismo, escruta el rincn de juegos y sin dudarlo se sienta de cara a la pista y hace rodar una tras otra las bolitas y luego varias a la vez hasta el da de hoy recuerda el ruido de las bolitas rodando por la pista y por qu fueron al mdico ahora te cuento por lo del coxis no, en realidad no por la cada del rbol exacto no, para nada casi una rutina, esa visita al mdico madre e hija llegaron temprano, la madre enzarza a la secretaria en una charla sobre el vecindario, el anticuario de muebles sale el mdico s alguna vez mdico sin fronteras pero eso cambi, ahora algunas fronteras conoce bueno, entonces

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la madre menciona un problemita entre las piernas, seguro que por culpa de la piscina, una infeccin o algo por el estilo el mdico pregunta: va a permanecer en el consultorio mientras la reviso la madre asiente ahora le pide a la pequea que se desvista ella lo hace, sin chistar, le pide que se recueste sobre la camilla ella lo hace, sin chistar empieza a revisarla con cuidado la madre le sostiene a la pequea la mano, le cuenta algo, de las prximas vacaciones o algo as, cualquier cosa, para pasar el rato, al parecer para facilitarle a la hija el procedimiento mdico acaso ya lo conoce s, incluidas las historias de rutina que le cuenta la madre El mdico tiene la sensacin de que la pequea responde a su mano presionndola lo sorprende obviamente no se atreve a levantar la mirada, mostrarle a la madre algn tipo de reaccin, minimiza su sensacin, para sus adentros expeditivo da por terminada la revisacin, le promete a la chiquita que pronto no le picar ms, con un supositorio y una cremita estar todo bajo control la pequea se viste, por indicacin de l, mientras tanto l le da detalles a la madre, le pide que espere un momento del otro lado de la puerta, tiene que conversar algo con la hija, es conveniente que lo hagan a solas La pequea de nuevo en sus pantys, mira mira el instrumental sobre la mesa del mdico, fotos de los hijos del mdico, la madre habla en voz baja, rpido, bajito, a la nia no le llama la atencin adems recin tiene cinco, uno no deja a una nena de cinco aos sola con el mdico, por ms confianza que le tenga hasta que le piden que por favor espere a mam afuera en la sala, que mam sale enseguida, claro, no hay problema, le encanta la pista de canicas

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cuando la llaman para que vuelva a entrar, la madre se puso seria, un gesto severo, tambin de preocupacin, difcil decirlo a ciencia cierta, una expresin de ambivalencia y la pequea hace honor a su apodo de pequea y junto al mdico, junto a la madre se hace pequea comienza diciendo el mdico: Es una zona muy delicada, ah donde te he revisado la madre asiente Tienes que cuidar mucho tu higiene ah abajo. Mira de reojo, pregunta a la madre: ya sabe lo que quiere decir higiene. De nuevo hacia la pequea, te deca, tienes que limpiarte muy bien ah abajo, de acuerdo. Lo que tienes ahora es un honguito. Por eso el supositorio y la cremita. En realidad tienes unos cuantos honguitos, muchos, pero diminutos, por eso no los puedes ver. Madre e hija asienten. Por eso te pica. De dnde viene el honguito, no lo sabemos. Puede ser por el agua de la piscina, por el jabn, por las sales de bao o tambin, eso, si alguien te toca. O si te tocas t misma. mirada interrogadora a la madre, que asiente sin parar Y debo advertirte que no te toques ms ah abajo, salvo para lavarte asiente ser que entiende lo que le dice difcilmente ahora la madre interviene: ya te lo he dicho. Varias veces, sabe doctor. Muchas veces se lo dije. Ya lo haba observado. Pero qu le vamos a hacer, uno no puede atarle las manos seguro que esa no es la manera, no se queja, no se lamenta, no est desconcertada. Por favor. Tiene que tener una solucin en vista. nunca ms a este mdico hijo de puta quiz no entonces qu

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lo insulta, insulta su orgullo de mdico, lo insulta en su consultorio, ese mundo reducido en el que se cree tan grande, y eso que en realidad se especializa en el diagnstico de artrosis, un dios de los achaques de la vejez, un curandero, qu carajo sabr de nios no viene al caso ahora, la pregunta es: qu hace la madre sale disparada apocada refunfua algo que cmo se atreve o algo as s, humillada, la mirada al piso o bien: escucha lo que le advierte, que debe observar atentamente cmo sigue todo esto y despus vuelve con el discurso sobre la importancia de mantener la higiene, algo sobre los valores del ph en la secrecin vaginal, a ella le entra por un odo y le sale por el otro, agarra a su hija, agradece, se va Ay. s, ni que l hubiera insinuado algo no no.

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ENCONTRAR 1 Un rostro en partes la mitad encastrada en el suelo eso de ah parece un ojo dado vuelta desparramado en sangre aplastado el otro salido hacia fuera mira al cielo o al techo ms atrs est la cabeza le brotan tripas cerebrales o como quiera que se las llame ah naci mi inters cientfico por la cuestin de los nombres supongo entonces se me viene a la mente la idea de que debo puedo tocarlo estar tibio todava un rostro en partes pienso partido pienso que ya no est entero, como si ahora despus lo fueran a reparar, como si ahora lo fueran a reparar despus, doy por sentado que tiene arreglo, que es posible reparar el dao Le acaricio el pelo mojo el dedo ndice en el charco que crece debajo del crneo dibujo una lnea desde el charco hasta donde alcanzo es como pintura extraa Con el dedo vuelvo una y otra vez al charco a buscar ms color y sigo trazando la lnea hasta alcanzar mi vestido, la extiendo hasta que llega a m, atraviesa el dobladillo como quien sube un escaln sigue por la costura hacia arriba me parece que ser un rbol un rbol enraizado en la cabeza de l despus viene el tronco despus ya en mi vestido las ramas muchas ramas con pocas hojas cuesta dibujarlas, una pintura obstinada, por cierto.

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JUSTIFICACIN (ALEGATO)

Mi padre con pap no es como con todos los dems padres y est bien que as sea. Esa hostilidad que le meten a uno en la cabeza aunque ms no sea en la cabeza, esa incomprensin de los de afuera, esa postura, me desespera la sola opinin de que algo as se puede generalizar todos esos consejos de todos esos aconsejadores tantos que uno desespera. Esa incomprensin de los de afuera, decir que el amor paterno puede entenderse de manera distinta de como yo lo deseo. De como lo he experimentado. Que el amor del hombre con la mujer, del hombre con el hombre, la verdad que da igual, decir que no est aceptado que la flecha del amor atrape a la hija con el padre, es desesperante. Quin me lo va a prohibir, quin me lo va ordenar, nada ms es cuestin de tiempo, como ser humano tengo derecho a amar, a quien quiera. Cuntas, cuntas relaciones destructivas hay que no caben en un marco legal punible como la ma. Miles miles de millones, incontadas. Y solo porque tenemos nada menos que la misma sangre dicen que esto es insalubre que atenta contra mi autoestima que me enferma. Me enferma no tener la menor chance siquiera de dar prueba de que mi padre a m no, mi padre nunca, jams a lo sumo rara vez me ha perturbado que lo perturbador vino recin de la perspectiva de los de afuera, a ver qu tan rpido se supone que mi amor indecible se desvanezca, semejante viento en contra le soplan y por qu me tildan erradamente me tildan de una con la que se ha cometido un error, cuando todo este error poco tiene que ver con la persona de mi amor y son meros factores externos los que hacen de m lo que soy y amo con desesperacin y ahora este amor es tildado de loco porque enloquece y enloquece porque nunca podremos vivirlo del todo, nunca, nunca, del todo gozarlo. Cuntas personas hay a las que jams las toca un amor as, que excluye todo lo dems y esas personas me lo prohben y eso no hace sino enloquecer mi amor ms que antes y potenciar mi locura volverla an ms inconcebible. Entonces qu, los de afuera pero si voy contra los de afuera me quedo sola con lo que tengo adentro

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La primera de todos mi madre, que no puedo odiarla pero que nunca pudo bendecir lo nuestro, no se lo puedo tomar a mal pero ir en mi contra de esa manera, no solamente contra lo nuestro, contra m, con pequeeces incluso, incluso desde pequea, con sus insinuaciones Para mi padre siempre fue una relacin de amantes y supo ensearme lo que eso significa. Y yo quiero que los de afuera me dejen en paz, por m que me dejen vegetar en paz. Que me reconozcan que la sangre por s sola no es impedimento de nada, fue VOLUNTARIO de mi parte y desestiman esa voluntad como si fuera una nimiedad, ni una pizca de comprensin, siquiera el intento, puro repudio La mayora de las veces un amor se manifiesta en el plano corporal y qu culpa tengo de que en algn momento me haya ocurrido, de que supe hacerlo pronto antes que todas las dems. Muy pronto quiz. Entonces lo que tienen es envidia, porque hace rato que estoy en buenas manos en mejores manos que todas ustedes, porque pas de estar contenida en la panza de mi madre a estar contenida en una pareja, porque el paso de una cosa a la otra fue en continuado.

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JUSTIFICACIN Con toda la razn del mundo exiga de mi parte una contraprestacin nada de juicios de valor, es una contraprestacin, parte de dar y recibir como hija siempre lo entend de esa manera. Me excitaba, la idea de poder hacer algo bueno. Que alguien pudiera entenderlo como incorrecto, repudiable, contra la norma, recin lo pens mucho despus. De hecho es algo que parte de m, de mi parte le conced una noche y la inocencia huy a pasos agigantados sobre largas piernas. A esta altura quin puede definir qu es esto, quin ha empezado. Al fin y al cabo fui yo la que durmi destapada, sell mi destino, como le dicen, en realidad fui yo la primera en hacer posible el amor. Es una invitacin inequvoca de una criatura a su padre: sentada en la sillita abierta de piernas, las rodillas flexionadas apuntando hacia afuera, leyendo en el balcn, jugando, se desparranca, deja ver la bombachita. Inequvoco Cada cual sabr cmo manejar semejante mensaje inequvoco de parte de una criatura que ofrece semejante acceso, puro, vulnerable, difcil de resistir y que nadie se sobresalte, que nadie grite: flor de ensalada tenemos ahora. Y quin sembr la lechuguita. Fueron los padres, que el engendramiento que los cogollos que la semilla la abonaron, la regaron bien, qu bueno que la lechuguita admitido, despus de algunos inconvenientes de arranque florezca tan maravillosamente, flor de ensalada tienen ahora. Las babosas y caracoles tambin trepan por los tablones de la huerta para llegar a la lechuguita, se arrastran por la tierra, para llegar a los cogollitos, en primavera es cuando los prefieren.

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OPERACIN 2

Volver de la deriva enfocar los ojos recuperar la percepcin han quitado el pao mortuorio por un instante me parece que vivo vuelvo a vivir acero inoxidable a mi alrededor como en un frigorfico un piiip los odos funcionan qu alegra un raro privilegio me propongo informrselo al enfermero nio apenas recobre la voz para informarle al enfermero nio que mis odos piden a gritos una limpieza por dentro y por fuera; por dentro para que a largo plazo nada obstaculice su funcionamiento impecable y por fuera para que se note. Y ahora cmo se lo hago saber al enfermero nio sola como estoy como supongo por lo que reflejan las superficies de acero mi rostro mi yo de pronto veo algo que se mueve quin sabe qu Aj s es el doctor Doctorus Plmula Tarntula, doc Palmus, como me ofreci que lo llamara, mirndome por encima de las gafas, dndome una palmadita: doc Palmus, para ti. Confieso que me alegr y cmo ya nos conocemos un poco mejor puedo llamarlo doc Palmus Miro bien Mis piernas estn apoyadas las plantas de los pies apoyadas el antes pao mortuorio ahora es una prenda de vestir verdosa del corte no puedo decir mucho todava entre esas mis piernas desparrancadas aparece una mano embadurnada con una sustancia roja escucho un ruido no consigo saber de dnde proviene, o s de entre mis piernas me imagino una carnicera los ruidos de fondo que vienen de la cmara fra por m tambin del matadero realmente qu agradecida estoy de que este ruido ahora actualice un recuerdo una imagen que jams hubiera reconocido por el reflejo en el acero inoxidable me imagino lo que sera sonrer a la mano dotada de los ms variados rojizos le sigue una cabeza es el doc Palmus cmo me gustara gritarlo esa cuestin de las cuerdas vocales ya la vamos a solucionar doc Palmus levanta la mirada e intercepta mis ojos creo es motivador tierno mudo entendimiento

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Hubo una complicacin Aunque a esta altura quiz sea un poco drstico hablar de complicacin Es una buena nueva Hemos descubierto es decir, bajo su pao mortuorio diagnosticaron un embarazo Usted est embarazada estaba No sabemos desde cundo ha estado empollando el cro Se ve medio viejo pero est bien Acabamos de parirlo, naturalmente ms que acabamos, usted lo ha parido A costa de su propio martirio se ha resistido un muchachito robusto crame Me pellizca con nimo compinche Estaba diciendo se ha resistido ha pataleado forcejeado un poco del todo como decirlo ha luchado contra su propio nacimiento aunque la ecografa indic que: el nio est pasado demor un poco hasta que nosotros el nio abandon la resistencia por no decir su lucha. Valo as positivamente le gustaba tanto estar dentro de mam que no tena la menor intencin de salir hasta tiene dientes tena ya, lo cual Exhibe su antebrazo izquierdo Queda demostrado por las cicatrices mordeduras

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Me estremezco quiero hacerme notar ver a la criatura nada Grito nada Con mis ojos sealo mi bajo vientre, doc Palmus me entiende, por poco se me salen los ojos de tan agradecida que me muestro No no siente dolor alguno, correcto no todava Ya lo sentir no se preocupe Sonre satisfecho sin duda un blsamo para el alma Sobre su estado: parece que no soy el nico a quien el cro tom por comestible Como dije: no tena la menor intencin de salir, para nada Por eso s Ahora usted tiene uno. Y con este paramos de contar. Lo bueno es que podr dedicarse a su carrera profesional Bien y ahora la vendamos upal, fantstico regocijante seguro que tambin para USTED como madre por cierto le hemos quitado tuvimos que quitarle algunas cosas todava estn ah En mi campo visual muchsima sangre, vsceras, tiras de piel delgadas como papel de seda, pulmones Tuvimos que tomar medidas de lo contrario el cro hubiera arrasado con todo vigoroso como es

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Seguro que ahora se siente ms ligera Quiz todava debamos recortar un poco Pienso pienso en voz alta: FUERA TODO Para terminar se limpia el antebrazo sucio en mi prenda de vestir, un gesto que advierto regocijada, me devuelve algo de m misma

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JUSTIFICACIN

Cuando empez la historia entre l y yo, l no era consciente de lo que haca, realmente consciente quiero decir, no del todo, al principio era solo ternura, de repente fue ms no registramos la transicin de una cosa a la otra porque eso ya estaba ah cuando sal disparada del vientre materno vindolo retrospectivamente solo s que no fue inmediato, la primera vez no fueron ms que besos, l estaba agitado, vino a mi cuarto, una pelea con madre quiz, aunque mi memoria no da para tanto, es pura especulacin y entonces me llev a la cama. Hasta ah no pasaba nada pero l saba exactamente, tena la intencin, ahora empiezo esto con ella, ahora lo vivimos a pleno. Desde el principio, segn creo, segn me dijo, se dej llevar por mi cuerpo, al baarme o al cambiarme los paales, por ejemplo, o al pasarme la cremita, por ejemplo. Mi cuerpo siempre le pareci bello como ninguno, dulce, tierno y en cierto sentido sedoso, excitante, dcil, me acariciaba, le gustaba ver que se me erizara la piel, hacerme cosquillas en la entrepierna, siempre conservamos ese ritual de iniciacin, era algo entre l y yo. Claro que me encantara gritarlo a los cuatro vientos, contar este amor, contar este amor cruelmente denostado, pero no poda hacerlo, l deca que no le incumbe a nadie. Otra cosa que lo enfadaba por ejemplo, desde el principio, cuando mi madre y l se me quedaban mirando, yo durmiendo en la camita, en el cochecito, donde fuera que estuviera y ella se pona a hablar de mi futuro, cuando fantaseaban juntos, l se pona celoso, su cuerpo entraba en celo. En esos momentos me quera alzar, fuerte contra su pecho, sentir mi aliento, le pertenezco, a l, no quera soltarme, nunca, compartir no. Siempre fui su pequea mujer, su segunda mujer, la primera, como yo deca corrigindolo. En algn momento, yo tena seis meses, segn me dijo, se volvi una cuestin extremadamente sensual. No puedo decir que no saba lo que haca y l: l lo tena claro, no cualquiera besa a su hija entre las piernas. Desde el principio tena las piernas demasiado cortas para ser adulta. Los dos lo tenamos claro.

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ENCONTRAR 1+

Cuando termino de pintar cuando esto por fin es un rbol un rbol firme con ramas tres ramas, una para madre una para pap una para m, aunque en realidad yo estoy en el rbol entero en el tronco propiamente dicho pap est en las races, cuando termino examino las funciones vitales le retuerzo la cadera hacindola sonar el por un rato calor abandon el cuerpo es pasajero no creo que nada sea permanente me abstengo de todo lo que sea permanente por eso va a calentarse de nuevo tiene que moverse para eso le retuerzo la cadera la muevo de izquierda a derecha

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EL CUENTO DEL NGEL Haba una vez una princesa, una princesa que estaba subordinada a su reino, que daba todo por su reino, porque el reino era todo para ella. Un da lleg un prncipe, ms bello que cualquier cosa en el reino, que todo lo que haba visto hasta el momento y este prncipe la observaba de tal modo, de reojo por delante del otro costado por atrs y desde todos los ngulos estaba claro que ella no era puramente un corazn como l puro corazn entonces ella se le acerc y vio que era un ngel. Y vio que estaba muerto. Y tom entre sus manos las manos de l y nunca ms las soltara, le prometi para qu. Y ah vio que era un ngel muerto y cuando intent besarlo l se descompuso en mil pedazos, su rostro astillado un montn de astillas restos de ngel entonces ella lo supo: he sido llamada a recomponerlo. Y sin perder un segundo puso manos a la obra encajando y pegando, encolando todo lo que poda y cumpli con su trabajo a conciencia y con el alma tomada por su sentimiento. Mientras lo arreglaba juraba s mientras lo arreglaba se juraba que lo amara hasta el fin de la vida, al ngel, si tan solo reviviera ahora mismo. Cuando las partes estuvieron perfectamente encajadas y mostraron un ser completo, ahora rehabilitado despus de haberse estrellado, cobr plasticidad, empez a moverse y cobr incluso una voz y aliento y todo lo que viene al caso. Ella miraba fascinada las partes recomponerse en un todo. Cuando el procedimiento hubo acabado reconoci a su padre en el ngel no, el ngel se haba vuelto su padre. Y como ella haba jurado honrarlo y amarlo, si tan solo l reviva, honrarlo y amarlo hasta el fin de sus das, lo bes ntimamente, as empez con eso de honrarlo y amarlo. Y colorn colorado, si an no han muerto, hoy todava aman.

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MUERTE Antes de irse, la salud hacindole una sea. Despus se dej caer desde la punta de la saliente rocosa. Es decir, primero se dio vuelta, despus se dej caer. La salud reflexivo, sereno, con la calma de quien ha dejado algo por escrito, diciendo qu deba pasar con la casa, sus cosas, el perro, su bicimoto. De modo que se balance hacia delante primero y plane, luego la gravedad hizo lo suyo, fue todo muy rpido, un impacto sordo, un hombre hecho a fuerza de cereales, en cierto sentido ligero, ser que lleg planeando hasta el suelo. La verdadera historia empieza en otro lado, l no fue reflexivo, nada concluyente, unos garabatos sueltos, atolondrada la letra no como la suya se hubiera dicho, y por eso tampoco cay planeando desde ningn lado, sino que ella quiz no me corrijo seguramente se lo imagin, se lo invent, mientras estaba en la escuela sentada apretando el pupitre, las uas inquietas rascando la goma de mascar pegada, endurecida, como rocas apuntando hacia abajo mientras l ultimaba los preparativos Ser que lo prepar de verdad. Pero no actu en estado de emocin violenta, estas cosas suelen ocurrir por emocin violenta o no Yo personalmente creo que l se la imagin enterndose de todo, apenas percatndose de lo que estaba sucediendo, quiz sin poder participar realmente, hasta mucho ms tarde recin, y sin embargo l se la imagina, mientras va preparndolo todo, en su cabeza, mucho no hay para preparar, lo ha tramado, con suficiente frecuencia, con suficiente antelacin, en cualquier caso, en el caso de que llegado el caso, en caso de urgencia, incidencia, en todo caso l estaba preparado Ms importante es que lo prepara en silencio, para que no se le note cmo que no, si a ella le zumba la cabeza imgenes que no logra quitarse de la cabeza, l solo parado en la punta de una saliente rocosa, ah no, ella est con l, l la arrastr montaa arriba hasta la torre panormica y desde ah podra podra en

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caso de que ella hablase, ya sabemos qu torre panormica ella sabe de lo que habla, lo tiene a la vista No hay que olvidar lo de las manzanas qu s, lo de las manzanas, que ella nada ms haba ido a buscarse una manzana y ah el hallazgo eso, la torre panormica que ya conocemos, que l haba sealado, con ella mil veces de la mano, arrastrndola fuera del auto, soltndole incluso el cinturn del asiento, porque ella como congelada clavando los dedos en el tapizado de cuero no se levanta, por eso l le suelta el cinturn, se inclina sobre ella, pasa la mano izquierda por encima de su vientre hasta el hueso de la cadera y un poco ms all, presiona el botn rojo, la hebilla se libera todo el mundo sabe cmo se desabrocha un cinturn gracias una vez suelto el cinturn, vuelve a su posicin, empieza a moverse como cobrando vida el cinturn no, ella ella ah luego bajan del auto, impaciente la arrastra entre los matorrales, no atiende sus quejas, no les presta atencin tanto que ella enmudece frente al absurdo de querer disuadirlo de su firme propsito pero es capaz de reflexionar de esa manera, si tiene apenas eso, cuntos aos tiene ella nueve quiz o ms s nueve quiz es posible que con nueve pueda lidiar as con emociones diversas, convicciones ella s. no ser que est atemorizada

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ms bien creo que lo soporta con resignacin, la excursin a la torre, no ser la primera ni la ltima vez, as que sobre todo se cuida de los arbustos espinosos que no le araen las pantorrillas s y ahora ya llegaron a la torre, ambos no me digas, ya llegaron a la torre rapidsimo s, rapidsmo estn junto a la torre, una torre de madera podrida alta en el bosque rodeada de pinos que le llegan hasta la mitad, la torre descuella entre los pinos, ella intenta calcular cuntas como ella subidas una encima de la otra sobre los hombros se necesitaran para alcanzar la cima de la torre no est pensando en algo as, ahora le da totalmente lo mismo, no est pensando en eso entonces en qu en lo que planea l y l qu planea l quiere explicarle algo ss, l quiere hacerle entender lo que podra pasarle a ella en el caso de que llegado el caso l lo considera posible en el caso de que llegado el caso del caso es decir lo que l podra hacerle en el caso de que llegado el caso etctera, un empujn ligero y ay se habra patinado, nadie podr pobrar nada. Qu, hacer algo as a propsito un disparate, nadie lo hara Zafamos, no la est amenazando, se amenaza a s mismo, va ms all de ella, porque ahora lleva un tiempo un ratito asaltado por dudas furiosas, dudas furiosas lo atormentan, un poquito s, cada vez ms inseguro est, todo el tiempo necesita ponerse de acuerdo consigo mismo, decirse qu carajo se dice Tengo todo bajo control y le pellizca su carne de nia se dice a s mismo que se ajusta a derecho ius primae noctis, intenta quitarle el hbito, cuando las dudas lo asaltan a gritos, le explica las circunstancias, entonces lee la tristeza en su rostro mientras desayunan, mientras l se prepara para un

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nuevo da, ella tambin, ah l ve su expresin, ese ruego, ese ruego mudo que le parte el corazn no solamente el corazn, todo lo dems tambin FALSO, en realidad le afecta directamente los tejidos erctiles, a l le gusta, ver en sus ojos la afliccin por eso tambin disfruta la excursin a la torre hace un tiempo como se ha dicho que lo asaltan sospechas recurrentes, una sonrisa en el supermercado y se siente aludido, la mujer a sus espaldas en la fila de la caja, extrao, una conspiracin, se siente aludido como si la sonrisa le estuviera dedicada, esta mujer se lo ha contado a todo el mundo, lo advierte demasiado tarde, la mujer a sus espaldas lo sabe todo, conoce sus preferencias, por poco y quisiera darle a entender que tambin podra callarla a ella, pero retrocede, luego entra en razones nadie lo sabe, si la pequea no habla antes se me ocurre ahora con respecto a eso de hecho se alegraba por la manera escrupulosa en que ella callaba, su silencio fue alimentando cierta sensacin de seguridad cuando ya en la mesa del desayuno ve en ella la expresin de quien est profundamente decepcionada, ve sus ojos de un celeste plido, las pestaas en arco tan lejos del iris azul, tan grandes sus ojos, cuando la mira a los ojos por encima de la mesa del desayuno no quiere ms, est a punto de caer de rodillas ante la madre, confesarle todo pedirle la mano de la hija en serio eso quiere en ese momento, cuando ella lo estremece a la maana temprano de lo ms consciente, sabiendo exactamente qu provoca en l esa expresin de desproteccin pero entonces lo ltimo que quiere es mendigar la mano de nadie No, ms bien teme que haga una escena frente a la madre, por eso se reconcilia con ella de inmediato, por la noche la busca se le acerca, ya la estaba extraando, la sola idea de una decepcin abismal en sus ojos le ha hecho hervir la sangre de preocupacin, sabe que ella lo necesita tanto, sabe, no podemos deshabituarnos el uno del otro por eso

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Estn junto a la torre y ella mide a ojo y a dedo cuntas veces entrara ella apilada sobre s misma en esa torre mientras l, mientras su, mientras que primero termina de jadear para despus arrancar, cuanto menos ruido hace, ms fuerza imprime, lo impresiona lo soberano que puede llegar a ser Ah empiezo a subir escaln por escaln, deslizo las manos por la baranda hasta arriba de todo, recin entonces viene la plataforma, la pierna izquierda, la paso por encima de la baranda, engancho el pie del ltimo tabln los dedos para adelante, para no perder el equilibrio despus lo mismo con la pierna derecha los dedos para adelante los engancho de eso que sobresale debe ser difcil mantenerse ah, por eso despacio, bien despacio deposito los pies, sigo sostenindome firme de la baranda con las manos, con cuidado, suelto una mano suelto la otra, es importante mantener el equilibrio hasta que le hago una sea al mundo, no, mejor a ti y entonces caigo al mundo al suelo. y se sonre un poco para sus adentros, no sea cosa que l la vea del todo, dice: y volara tras de ti. hace tiempo que opino que a esta altura l no lo pondra en esos trminos, lo hara mucho ms fcil, se lo dejara bien claro, que si ella hablara, l se ira as de fcil es Su amenaza me la paso, en serio por m, que se la meta donde le quepa, me importa un bledo queras hablar de las manzanas Cuando regresa de la escuela, ese da el da que empez a interesarse por las formaciones rocosas colgando de su pupitre. Ese da, digamos, el 23 de marzo, ese da vuelve a casa de la escuela, ella es una nia con llaves, sabe que mam vendr a casa pronto no me refiero a esas manzanas a qu manzanas entonces esas que le ofrece aunque no quiera, no quiera ni una sola, no hay modo cualquier cosa menos manzanas

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y por qu justo manzanas la fruta en s no importa, ms bien se trata, por m que sea una naranja, un kiwi, cualquier maldita fruta es lgico, hay que entender, precisamente esa parte de la historia, despus del entierro la manzana, bueno, cmo se dice se la ofrece la madre, despus del entierro le dice: quieres una manzana, no has comido prcticamente nada pero el olor la saca de quicio, la sola idea del olor a manzana ser que en el entierro lo asaron sobre un fogn con una manzana en la boca, digo para que ella haya desarrollado semejante aversin a las manzanas te parece gracioso para nada, pero semejante histeria por una fruta se trata de la comida despus del entierro que no ha tenido lugar, de lo contrario no estara hambrienta s es cierto despus del entierro directamente va a casa eso no se sabe. pero se parte de esa base. de modo que va directo a casa, no mira a nadie, no puede alzar la mirada, su puo lo mantiene el izquierdo lo mantiene extraamente frreamente cerrado s, tanto que los nudillos se le ponen blancos, o sea en serio y qu tendr ah escondido un pedacito de manzana no, una cua metlica no, es una ua que le qued del padre por poco se le cae de la mano por poco abre el puito cuando alguien quiere abrazarla despus de enterrar la urna atad es catlico no, crematorio, urna, lgico

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No, atad abierto, ella poda verle la cara, una cabeza cmodamente ubicada entre las sedas, flores alrededor S, esa misma cara, que ella reconoce en la suya propia s y ahora ella est junto al atad con ese rostro hipertrofiado, bien empolvado, han dado todo para reacomodarlo, han tratado de recomponerlo todo lo posible realmente han dado todo para reacomodarlo, le llev das al preparador de cadveres, en realidad le dieron tres das y los us, us los tres das para este nico rostro, sin pausa para el almuerzo, loable s y de tanto atender al rostro no prest atencin al cuerpo es que este hombre no tiene uas Corrijo: no tiene ms uas. Porque se las arranc, cada ua, una por una. Y los lechos de las uas quedaron expuestos, lo pas por alto el preparador de cadveres, donde debera haber uas hay pura nada, piel que abierta se ofrece desnuda, donde antes las uas ahora surcos marcados Imagnenselo: cmo es que alguien se arranca las uas, debe llevar horas, un asunto tedioso o por lo menos uno que supone una voluntad, una determinacin esto ya habla de una cierta fuerza para imponerse, quiz cont con alguna ayuda, se vali de un martillo al principio golpeando contra las uas hasta que se soltaran, despus tirar hasta despegarlas, a fin de cuentas es solo callosidad, o no vaya imagen y ella junto al atad grabndose ese rostro, ms fijamente que cualquier otra cosa, concentrada en el rostro, los rasgos ahora calmos, las imperfecciones que ningn preparador de cadveres hubiera podido perfeccionar le cosi piel ajena sobre las partes abiertas no se vea nada bien, la cabeza a medio reventar los ojos abiertos, aunque opacos no estn abiertos ok, por m: cerrados No: los de l estaban abiertos, los dejaron abiertos, eran de ese raro azul verdoso con una mancha marrn una pequea ella vuelve atrs con su recuerdo, los ojos exactamente del color del agua bajo la balsa un da de verano inundado de luz, y atravesando el agua el juego de los rayos, como hilos claros, exactamente as sus ojos

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estamos de acuerdo entonces los ojos estn abiertos, el color no le importa a nadie excepto a ella quiz pero el que est para abajo, ese est inyectado en sangre, el blanco del ojo mezclado con hilos de sangre, la oreja de ese lado parece faltar volada los cabellos parados, desgreados media cara encastrada en el suelo quieres decir, en el atad no, estoy en otro lado encastrada en el suelo no puedes estar en otro lado si no estamos ah, estamos aqu junto al atad, cmo es que cambiaste de lugar porque es ella la que lo encontr, s s, lo encontr, s. la que lo busc seguro y adems lo siento, lamento insistir, tengo que hacer hincapi en que los ojos estn abiertos y, pero secos de tanto llorar por el dolor de arrancarse las uas ella las orden todas, no es cierto la ua que a ella se le clava en la carne, tan fuerte aprieta su puo izquierdo en el momento en que se graba ese rostro, le murmura a la cara, se despide de la cabeza y ahora dime quin, qu se traen las manzanas lo de las manzanas eso, que son frutas, qu se van a traer lo del olor tienen olor s, ocurre con la mayora de las frutas ahora me acuerdo: el olor le recuerda al desvn. Exacto y entonces mam se la ofreci: no has comido casi nada, no quieres una manzana. Y ella sacudi la cabeza, mientras un bolo de bilis y efectos masticados buscaba salirle a presin por la garganta.

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JUSTIFICACIN (EXPLICACIN) Es lo inacabado en m lo que lo atrae. Que una persona no est en su estado definitivo, que por cierto no existe tal estado. Tener la oportunidad de participar de parte del desarrollo de un cuerpo. Siempre fue importante en su vida, siempre tuvo un papel monumental. Poder desarrollarse, s, tambin participar del desarrollo de otros. Eso es sed de conocimiento, curiosidad por la vida, por ver crecer vida, por la transformacin. La transformacin es lo que mejor le permite comprender la vida, tenerla cerca. Eso tambin se extiende a la vida del espritu, el regocijo del desarrollo por el desarrollo mismo, dejar atrs y superar loqueyafue. Eso, y a su vez el hambre de desarrollo, ese estar hambriento de lo nuevo, lo fresco determina el aspecto corporal de toda la cuestin, lo que le fascina de m, que con su experiencia conmigo puede volver a dejar como decirlo s, dejar volar su fantasa, algo que a uno le gusta regalar o compartir cuando todava est por desarrollarse, cuando a uno le dejan en claro lo suficientemente pronto la naturaleza irrepetible de ese desarrollo.

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ZOOLGICO PARA NIOS Est como loca, con las ovejas, las cabras, los cabritos, se dejan acariciar, les gusta el contacto, se le meten entre las piernas para frotarse acaso no es ella misma tan bajita todava que le llegan a la cadera, hasta los cabritos, los fresquitos recin paridos es posible. S, totalmente, es tan pequea que le llegan al ombligo, a duras apenas eran tmidos, los cabritos y fue lo que termin motivando el conflicto la cada del rbol s exacto, porque ella estaba esperando frente a la casita de madera, la forrada en lana por dentro, el hogar de los cabritos, estaba esperando sentada de lo ms paciente y esperando y esperando a que aparecieran no hasta que el padre perdi la paciencia o hay que decir que primero se fue a buscar un libro, o no no se lo fue a buscar lo traa consigo, ya sabe cmo son los domingos en el zoolgico, todo dura una eternidad, el corral de los monos lleva horas de exploracin, y ella, de tan entusiasmada, prcticamente se cree que est del otro lado de la valla separadora pero ms que a los monos quiere a los animales que estn para acariciar en el zoolgico de caricias, las cabras enanas, las ovejas, pollos, ponis, a los ponis tambin s hasta donde s hay ponis tambin, patos, gansos, pollos, conejos, llamas, un pavo real, burros enanos ella recuerda perfectamente el cartel que deca: ZOOLGICO INFANTIL, ANIMALES PARA ACARICIAR Y ALIMENTAR y despus en letra chica POR FAVOR NO ALIMENTARLOS CON NADA DE AFUERA, ADQUIERA EN NUESTRO QUIOSCO EL ALIMENTO ADECUADO Pero ya sabe leer la reglamentacin

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no, todava no, pero el ritual incluye pedirle al padre que se la lea, pese a que sabe hace rato lo que dice el cartel, los dos conocen muy bien sus domingos, son para que la madre descanse padre e hija salen solos de eso tambin se acuerda s, se acuerda, pese a que no saba leer, se acuerda con lujo de detalles y sigue yendo al zoolgico para nios cuando ya sabe leer fluidamente Y escribir siempre con pap siempre con pap solo que a esta altura pap se est hartando de a poco, porque ella espera de lo ms tranquila a los cabritos mientras l empieza a tener hambre, se est hartando de semejante domingo desperdiciado y del sol, penetrante no, semejante hija insomne ambulante, que en todo el zoolgico por cierto un zoolgico de lo ms variado en todo el zoolgico nada ms se interesa por los chimpancs y por los malditos cabritos que no se asoman, que duermen la siestita, los malditos cabritos, eso lo irrita tanto no y por qu porque algo lo inquieta me huelo algo Algo dentro suyo le debe haber dicho, algo que inmediatamente le afect el humor como por ejemplo, s por ejemplo, que olvid el cumpleaos de la madre, sabe que esto traer discusiones, malhumorado se irrita por su olvido no es esta razn de peso ha recibido un mensaje de la madre de l no, a su madre dejmosla afuera recibe un mensaje y le informan que lo s que un accidente ha dejado fuera de combate a su amiga de juventud a la pequea le oculta esta informacin porque

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para m no hay duda, puedo explicar el porqu de su ostensible impaciencia, lo que tiene es una sensacin, POR NO DECIR UNA INCLINACIN que ha descubierto en l, una sensacin combinada con una certeza que al instante lo ha puesto de mal humor, que lo inquieta, lo inquieta ms de lo que l es capaz de reconocerse siquiera en la intimidad de su sosiego, ahora no puede explicarlo, ha tenido la sensacin y luego aparece esa rabia impetuosa, que hacia afuera se muestra como simple impaciencia, que descargarla sobre su hija resulta lo ms fcil, lo ms obvio, por eso le insiste varias veces con que largue a las malditas ovejas o cabras o lo que sean, por favor, para que se puedan ir a casa ella accede, lo toma de la mano, se van a casa de camino a casa la cada del rbol no, la cada del rbol es en el corral, cuando pap se esfuma, despus de haberle insistido varias veces con irse o con que venga con l y ella no quiso, ah a l le empiezan a dar ganas, se pone a dar vueltas al zoolgico, ella todava no se da cuenta de que se ha ido, pap, y luego vuelve a concentrarse en las cabritas que en el momento exacto en que l le da la espalda y se aleja, por fin, por fin qu suerte salen de la casita para jugar, se despertaron por fin ahora se entrega de lleno a las cabritas ser que se va a estirar las piernas, aprovecha la oportunidad Quin quin va a ser, el padre deambula por el zoolgico un tanto irritado y la deja sola as noms no lo hara un padre consciente de sus responsabilidades no pasa por tener conciencia de la responsabilidad, sabe que ella siempre se demora en el corral adems se lo inform, es transparente con las reglas, su educacin consecuente y justa, efectivamente le dijo: en un cuarto de hora nos vamos. Y si no vienes, me voy solo. y ella no quiso escucharlo, terca se tap los odos y se qued esperando a las cabritas, o no todo lo cual parece tener su razn de ser, hasta que mira alrededor

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de verdad ve a Dios no Dios, quiero decir, ay Dios adnde se ha ido pap entretanto las cabritas descontroladas por el corral, pero l adnde se ha ido no se sabe, no es tan fcil de determinar por eso ella trepa a un rbol junto al corral, para tener una panormica del zoolgico, trepar hasta la panormica, eso. eso y queda acurrucada en el rbol, est a punto de sollozar as como est sin autoridad parental y sola, ss, se la oye sollozar, a lo mejor se est comiendo las uas, tanto para hacer ah arriba no hay en fin a lo mejor se cree un pjaro que cay de su nido por querer volar tras el pap y por eso empieza a jugar, o no claro, a fuerza de imaginacin no, a jugar en serio, despliega las alas, practica batir las alas, afila el pico contra la corteza, golpea con las garras la rama generosa, la rama que contena el nido, de donde el padre se ha ido, ido con el nido, porque no es que ella la nia pjaro y aqu me corrijo se haya cado, sino que l, el padre pjaro ha extendido las alas, picado el ltimo gusano de la reserva de gusanos, balancendose se ha impulsado fuera del nido as fue, esa imagen de l extendiendo alerones entonces ella da un golpe con sus garras en la rama generosa, echa un vistazo otra vez hacia abajo, un pato levanta la cabeza, quiz tambin quiera levantar vuelo hasta ese punto de observacin panormica, quin sabe, ella da un vistazo a todo, se eleva en los aires, desde su perspectiva encontrar a pap pjaro, aun cuando l, aun cuando l no, en fin, el padre pjaro, quiz ella no pueda volar tan alto y ahora se cae se eleva en el aire, pero todava no ha aprendido del padre cmo volar, cae se precipita en el abismo esta es: la cada del rbol cataplum ya lleva un cuarto de hora esperando, no

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ms, mucho ms su reloj infantil mide el tiempo distinto, indica que hace mucho ms tiempo que el padre la ha abandonado ni siquiera se dio cuenta, le resulta un misterio en qu momento se habr ido. Un misterio que primero la llena de inquietud, se echa la culpa, una cantidad de culpa increble se echa sobre los hombros. A quin si no se podra hacer responsable, a quin si no a ella por toda su desobediencia, castigada como corresponde por pap atemorizada sobre todo siente un gran malestar, es posible que el juego la haya distrado pero quiz en realidad lo que siente es desesperacin, llora, lo llama, contempla la muchedumbre de nios, las caravanas de padres, deambulando, esperando, empujando por qu nadie la ayuda en este infantil zoolgico de caricias lo que hay son animales en el zoolgico de caricias, no personas y qu pasa con el pblico, por qu no ayudan No tiene sentido, pap se larg, como hemos odo ella no conoce el camino a casa no sabe ni siquiera leer, ni que hablar de descifrar los horarios del autobs, entonces qu, ahora qu s, bueno, tienes razn lo cual no aporta nada a la cuestin, porque ella cae y ahora ah abajo coxis arriba yace, doler por semanas, los codos raspados, dolor de espaldas, solo gente extraa, caras extraas que se inclinan sobre ella, preocupacin, ella no sabe, cerca, muy cerca, eso sin duda, se retuerce, deja que una mujer la tome en brazos, que le limpien las lgrimas vivas hasta que aparece pap vuelve, no la deja abandonada diez minutos se haba tomado y para qu. Nada ms se fue a estirar las piernas y por ende est enfadado porque ahora parece que a ella le duele todo o no, ahora con tono conciliador, cuando ella se pone a llorar se permite un nico golpe bajo, dice: no me gustan las gallinas acto seguido ella se seca con mano propia las lgrimas y se propone no volver a llorar delante de pap l no sabe conciliar, no. Ese era el punto, no sabe conciliar de hecho inmediatamente sale caminando, la deja atrs sobre sus piernas largas l

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acaso protesta ella no, va cojeando atrs de l y se ordena a s misma no llorar, da todo de s para ir casi a su mismo paso y atencin que ahora viene: en todo el camino a casa l no le presta atencin. Las ocho paradas de autobs, los diecisiete minutos a pie, nada de atencin. Me huelo algo. En casa ella no se queja. Se dice, repite: a nadie le gustan las gallinas. Carajo que llora una nia desamparada de cuatro, cinco aos, se pone a lloriquear no puede evitarlo, por m opina lo que quieras Con la madre adelante es cuando lloriquea Lo hace, pero en secreto. Que no sea frente a pap Eso explica tambin cuando se acuesta a dormir, quiere llamar a pap por poco se muerde el labio, por contener tanto el llamado, por contener su voz, porque su conciencia la tortura exacto, su conciencia la tortura, hasta le arrebata la voz pero de pronto ah est l es lo que ella se imagina no, de verdad, de pronto ah est l Ella quiera agradecerle, dar un salto, que al fin haya venido a perdonarla venido a perdonarla es completamente absurdo pero es as, as lo siente ella, est infinitamente aliviada de que al fin haya venido a perdonarla despus se incomoda un poco, s, se contrae, la alegra cede s, qu viene despus de la alegra ah est l mudo y duro, el aliento regular, respiraciones algo ms cortas